▪︎Capítulo 8▪︎

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Tenía un objetivo esta mañana, ser positiva acerca del amor. No podía arruinar el futuro brillante que tengo en cualquier sentido por mi familia. Me levante temprano para vestirme y salir a correr, despejar mi mente en el bosque donde posiblemente me podía perder, buena idea que tuve en ese momento.

>Los chicos salieron de la cabaña sin encontrar en su cama a Erin, no supieron donde estaba, pero aún tenían que ir a desayunar y estuvieron seguros de que regresaría para comer aunque sea un poco, todos se sentaron en una mesa viendo lo que podrían pedir<

>Entre tanta comida, eligieron lo que comería cada uno hasta que solo falto pedir lo de Erin, Irvin y Nolan discutían sobre todos los platillos. Harta, Dakota puso algún tipo de comida marítima, algo que hizo que Graham le quitara el menú buscando entre todo y apuntando un platillo completamente distinto al que todos pelearon<

—¿Cómo supiste que pedirle? —pregunta Irvin tomando el menú hechando un vistazo.

—Mariscos los odia y es alérgica al huevo, quite eso de todo quedando solo...

—Alguien estudio el libro de Erin —dice Dakota riendo.

—Tonterías. Ustedes también estuvieron presentes cuando lo dijo —se levanta marchándose a lavar las manos.

De regreso al campamento busque con mirada a los chicos y al verlos me fui a sentar con ellos, llegué justo a tiempo en que sirvieron lo que comeriamos. Fue un poco extraño que Graham no estuviera hasta que volteé a otra mesa donde se encuentra riendo con una chica, no se puede esperar más de ese chico.

Me puse a comer y realmente era delicioso, Dakota no me quito la mirada de encima, supongo que queria decirme algo de lo cual no soy consciente que es. Al terminar me marché a darme un baño y al salir lista para el siguiente juego que vendría en breves, me pregunté qué pasaría si me gustará Graham.

Después de analizar esa opción durante un tiempo me di cuenta que era una locura, así que salí de la cabaña corriendo y llegar con los demás que apenas me di cuenta que había charcos de lodo. Me terminé resbalando y alguien me sostuvo siendo Graham, no note sus ojos verdes antes, realmente son lindos.

Empujándolo lejos le agradecí, antes de que pudiera decirme algo el profesor comenzó a dar instrucciones sobre el siguiente juego y último porque al día siguiente nos marchabamos. A todos nos tocaría un color de pareja y en cada esquina lejos en el bosque tendríamos que encontrar a la persona que tenga nuestro mismo color.

Un tipo encuentra a tu pareja, fácil si no fuera que la última vez casi me perdía con Graham dentro y una serpiente nos asusto, ahora que conozco mayor parte del bosque espero no sea tan molesto andar por ahí. Me dirijo con la mitad que me tocó despidiéndome de los chicos y al agarrar un color de la bolsa que tenía el profesor era el morado. Entrando al bosque encontré a varias personas, pero ninguna era el color que me tocó. Pasó un buen rato hasta que me encontré de frente con Graham.

—Hola. ¿Tú color es...?

—Ah. Es... —Graham saca el papel azul y ambos escuchamos un grito de una chica detrás mío.

—¡Graham! ¡Tienes mi color!

La chica me empuja haciendo que casi me caiga y abraza a Graham, no puedo evitar burlarme de ella por detrás y él se ríe tomando de la mano a la chica. Me despedí de ambos buscando aun a mi pareja, cansada me recargue en un árbol limpiando el sudor de mi frente, no suelo sudar al menos que realmente esté cansada.

Una mano se extiende con un pañuelo, al levantar la cara me sorprendo, es un chico que parece ir en otro grupo y su color es el mismo que el mío, me dio una gratitud enorme que me encontrará que me enderece en el árbol agradeciendo el pañuelo y haciendo burla de lo mucho que tarde en encontrarlo para al final él fuera quien me encontrara a mí.

—Soy Garret, y tú debes ser Erin... aunque prefiero Carey —me sonríe levemente extendiendo su mano para ayudarme.

—¿Me conoces? —le recibo su agarre de manos y nos ponemos caminar a la salida.

—Es muy difícil no hacerlo, todos hablan de la chica que busca pareja y creí que era lindo no ser el único.

—¡Oh! Acabas de decir "lindo". No pensé que un chico seria capaz de usar ese término.

—Que graciosa. En realidad, me alegra que seas tu mi pareja y no otra chica.

—¿Por qué?

—Eres diferente ... —se detiene, me doy la vuelta sin soltar su mano— ¿Quieres hacer algo divertido?

Lo sigo saliendo por otro lado del bosque a una carretera y en frente hay un parque de diversiones abandonado. Nos pusimos a jugar y hablamos durante un largo rato hasta que se hizo realmente tarde, me di cuenta de la hora por su smartwatch. Regresamos al campamento y Dakota se acerco a mí diciendo lo preocupados que se encontraban por lo mucho que tarde.

Garret les explico que se perdió y lo ayude tan pronto lo encontré en el bosque, Dakota siguió gritando que estuvimos mal quedándonos ahí hasta que Irvin se acercó llevándosela lejos y así tranquilizarla. Fue ahí cuando sentí como no solté de la mano a Garret en ningún momento; me invito a comer con él. Lo pensé un poco hasta que gire a ver a Graham abrazado de su compañera del bosque.

Es común en él llevarse bien con quien le toca hacer equipo, nada sucedió entre nosotros el día anterior y debía entenderlo, solo podremos llegar a ser dos personas que se odian. Acepte la invitación de Garret y me presento a sus amigos, todos parecían querer reírse de quien era por lo de "Loca De L.O.V.E.". Me pareció forzado que Garret se molestara con ellos por ser como son.

Aun así tampoco les molesto a ellos y empezaron a incluirme en sus platicas, me la pase bien, sin embargo no sentí esa conexión de amistad como cuando conocí a los chicos. Ya no es lo mismo desde que soñé con la novia de Dakota, Nolan se confesó de una manera tan cursi y saber que no me gusta, y mucho menos con Graham que al parecer tiene un lugar muy dentro de mí. Solo quiero pensar que ese espacio donde esta es del odio que le tengo y no otra cosa.

Cayendo la noche me quede sentada afuera esperando ver la primera estrella aparecer, claro, la luna ya se encuentra ahí, pero no me refiero a eso. Unos minutos pasaron y cuando al fin apareció, él se encontró frente a mí al bajar la mirada.

—¿Por qué estas sola? —se acerca sentándose a un costado mío.

—Me gusta estarlo... ¿Y tú?

—Nevesitaba hacer algo antes de irme a dormir que tal vez cambié los pasos futuros que podemos dar.

—¿A qué te refieres...?

Al girar hacia su dirección me tomó de la mejilla besándome, no sabía cómo llegué al punto en que recibí un beso sin darme cuenta y no puedo evitar no alejarlo. Realmente prefiero esperar a que termine y reaccionar al hacerlo, ¿por qué él justamente lo hace?

Enemigos Del AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora