Segunda vista | Mechoa.

6 | ¿Solo una gripe?

• 2020 •

Memo y Lionel llegaron a la casa , Ochoa no había tocado más el tema acerca de lo que sucedió en la escuela, Lionel tampoco creía lo que le dijo a Guillermo, pero esa era la verdad, amaba a Ochoa —No tenés que hacer nada Guille?— Pregunto Messi mirando a Ochoa, este negó y fue a la cocina para encontrarse con el argentino —¿Te ayudo a cocinar?— Lio sonrió y acepto, sin duda harian un buen equipo ya que a ambos les gusta cocinar. Durante toda la trayectoria, las risas no se hicieron esperar, Ochoa resultó ser un hombre muy amable y bueno en la gastronomía.

Sonó la campana de la escuela, Thiago tomo su lonchera y salió, todos los niños se fueron tras el, Thiago solo aceleraba el paso para librarse de todos los niños que lo estaban siguiendo, hasta que se detuvo y los enfrentó —¿Que quieren?, ¿Por que me siguen?— Pregunto, uno de ellos se puso en frente de todos —Es que tus padres son re famosos, yo investigué a Guillermo y Lionel, y el rizado es portero y el argentino es futbolista del Barça.— Thiago se sorprendió ya que él no sabía que Guillermo era un portero famoso.

—Y que sucede con eso?— Pregunto extrañado, el contrario rió —Es que si vos sos hijo de unos famosos, eso te hace igual un niño famoso!— Explicó, Thiago no pareció entender así que siguió con su camino —¿Se significa que todos ustedes son mis amigos?— Todos los niños asintieron —Yo me llamo Julián, igual soy argentino pero me vine acá a España por cosas de trabajo de mi viejo.— Thiago sonrió, había conseguido varios amigos, era un niño agradable, gracioso y amable. Tocaron nuevamente el timbre, Thiago y Julián fueron a su salón, este estaba feliz por conseguir nuevos amigos.

Thiago a mitad de las clases se empezo a sentir un tanto mareado, cansado, débil y también le dolían mucho sus huesos, estaba casi durmiendose en la clase, Julián, el cual estaba al lado de Thiago, le pregunto que le estaba pasando —¿Estas bien Thiago? Querés que le avisé a la maestra?— El menor asintió débilmente, Álvarez se puso de pie y fue a avisarle a su profesora  —¿Que te sucede Thiago?— Pregunto la maestra tocando de la frente al pequeño —Me duele mucho mis brazos y piernas, también estoy mareado y cansado...¿Le puede hablar a mis padres?— La mujer asintió e inmediatamente llamó a los padres de Thiago. Llego Ochoa y Messi, entraron a la escuela y el menor estaba descansando en su pupitre, Lionel entró por el y lo cargó —¿Que te sucede campeón?— Pregunto Lionel mientras caminaba junto con su hijo.

—Me duele mucho mi cuerpo, estoy mareado y cansado...— Memo se colgó la mochila en su espalda, Lionel se sentó en la parte del conductor, Guille y Thiago en la parte de atrás, el menor estaba sentado en las piernas del mexicano —¿Te sientes bien Thiago?— Cuestionó algo preocupado el arquero, mientras acariciaban el cabello del niño —No, aún me duele mucho...— Susurró para esconderse en el pecho del alfa, Memo suspiro, aun que Thiago no fuera su hijo, le dolía mucho verlo en ese estado. Lionel estacionó la camioneta, bajaron y llevaron a Thiago a la parte del consultorio, lo atendieron de una manera muy atenta y rápida —Lo que le sucede a Thiago es solo un gripe, le recomendaré una medicina para que se alivie más rápido— Messi no se quedó tan satisfecho con lo que le dijo el doctor.

Ochoa se propuso a pagar todo, Messi sin duda le agradeció, en el camino Thiago se quedó dormido en los brazos de Guillermo —Se ve que mi hijo te agarro mucha confianza.— Comentó Lionel mientras manejaba y los miraba de reojo
—Es muy lindo, es como una copia tuya, no tanto de la apariencia, si no de la personalidad, es igualito a ti— Ochoa acaricio el cabello de Thiago —¿Vos crees que solo es una gripe? Yo no soy doctor pero eso no parecían síntomas de una simple gripe.— Messi miro a Thiago algo preocupado y frustrado —Opino lo mismo que tú Lio, pero no creo que sea algo más grave, a lo mejor una simple alergia o tos.— Messi suspiro —Gracias Guillermo...Digo, por que sos una persona increíble, de un corazón enorme, muchas gracias por preocuparte tanto por la salud de mi hijo.

—No te preocupes Lionel, no me lo agradezcas, Thiago es amable, me tiene mucha confianza como para abandonarlo de repente.— Lionel rió, Memo no podía dejar de ver al argentino que tenía a su lado, miraba con atención sus labios, sus ojos, su nariz, apreciaba cada facción del rostro de aquel lindo omega. Pero mientras Lionel solo pensaba en si lo que tenía Thiago era solo una gripe.

HOLAA! Les dejo una actualización rápida pero algo importante, está historia va a estar  chingon, lo tengo bien pensado, perdón si es corto, tengo exámenes y también tengo que estudiar.

Bai, los quiero 😼🫶