Esta historia se enfoca en la hija adoptiva de EGO que fue el conejillo de Indias antes de iniciar el proyecto BLUE LOCK, en el cual tu eventualmente participaste encontrándose con tu primer flechazo de la adolescencia (para que se entienda todo bie...
Fui de camino a levantar a todos ese equipo para que se prepararan para el entrenamiento, cosa que les hiba a sentar totalmente mal, yo sabia que yo llegaba a ser extremadamente estricta con ellos cuando de fútbol se trataba.
Esa clase se trataría tanto de ejercicio físico y fuerza psicológica como mental, porque aunque el fútbol se trate de meter goles, en cierto puntos también son guerras sicológicas.
Todos poco a poco se empezaban a cansar pero seguían mis instrucciones sin ningún lujo de problemas cosa que me gustaba pero con Barou no sería también fácil. Pero al principio no me molestaba hasta que se fue por su cuenta ha hacer una rutina diferente, no me desagradaba así que le hiba a proponer de hacerla pero hacer el doble.
Me dirigía hacia Barou que se encontraba el cual hacía unos tiros a la portería, pero le tocaba rutina corporal y calentamiento. Así que por eso me acerque para decirle lo que tenía que hacer, porque a parte de su buen físico y buena técnica aún tenía que superarse.
-T/N: Haz el doble de tú rutina diaria.
No recibí respuesta, del contrario, así que me comencé a enfadar pero busqué un poco más de paciencia y le volví a repetir.
-T/N: Te toca hacer el doble de tú rutina.
Aun me seguía ignorando, le agarre del brazo, controlando mi fuerza.
-T/N: Ahora, ves hacer el doble y con pesas en las piernas añadidas luego vuelves a los tiros.
-Barou: No vas a mandar al rey del campo.
-T/N: No he pedido tú opinión solo te estoy ordenando eso, así que para hacerlo más bonito te lo voy a pedir porfavor antes que te patee tú culo en el campo. Te falta mucho por aprender, tirando.
-Barou: Como sea.
Ya si que se puso a obedecer lo que le había dictado, al igual que los demás pero después de mi tiempo, me di cuenta que Barou no se hiba así que decidí calentar un poco, para aprovechar e ir corigiendo aquello que hacía mal.
-T/N: Ya deberías ir a comer proteína, lo necesita tú cuerpo.
-Barou: ¿Ahora eres mi escolta o que?
-T/N: Soy tú entrenadora, además, deberías estar orgulloso de tenerme en frente tuyo.
-Barou: No molestes al menos si vas a estar aquí.
Cuando me di la vuelta para dirigirme a la salida un pequeño quejido sonó.
-T/N: ¿Estas bien?
Preocupada fui a socorrerlo y comencé a hacer un par de masajes en las zonas doloras. Sin darme mucha cuenta estaba súper cerca de él pero antes de alejarme el me pasó un mechón de mi pelo detrás de mis orejas.
-Barou: No fue nada Entrenadora.
Su tono de cascarrabias no se hiba pero se notaba que era en un tono menos agresivo así que me lo tome a broma.
-T/N: ¿Te molesta mi pelo?
-Barou: No es demasiado molesto.
T/N: Gracias.
De repente su expresión se volvió rígida cuando alguien jalo de mi y me cargó tal bolsa de patatas para una zona que yo reconocía a la perfección.
-Nagi: Las llaves.
-T/N: En mi bolsillo derecho.
Por mis labios se escapó una risita cómica. Entramos con rapidez entrando en mi cuarto y tumbando mi cuerpo delicadamente en la cama, para luego en pleno de mi cuello me mordió.
-T/N: ¿Que te pasa Shei?
-Nagi: Te miraba de la misma manera que yo te miro a ti. No me gusta este sentimiento...
-T/N: Eres muy celoso.
-Nagi: Solo no me gusta en la manera que te tocó, solo hacías tú trabajo que no se haga ilusiones y menos siendo tú mía.
-T/N: Nunca me esperaría que fueras así Shei.
Un beso con cariño le di para luego abrazarlo. Entre besos se hiba calentando un poco el ambiente pero Nagi lo frenó del todo diciendo que le daba pereza en ese momento hacer cosas así que no le insistí más en aquello.
Pero lo que si hicimos fue ver películas de anime y jugar a videojuegos, cosa que disfrutamos ambos por mucho, era extremadamente agradable jugar con el a cada juego que jugábamos juntos, sinceramente era totalmente agradable y mi zona de confort para tiempo de calidad con él, era nuestra principal expresión del amor.
Aunque si me preocupaba que fuera tóxico al haberse puesto tan celoso pero mientras no se excediera le permitiría eso, porque en cierta parte de mi me gustaba eso, aun sabiendo que en parte estaba mal, pero no le daría más vueltas, estoy totalmente enamorada de el y se que yo también a veces llegaría a sentirme mal si una chica o un chico lo coquetea a él así que le entendía, pero en otra cierta parte también sabía que todo esto es un tema delicado. Pero él hecho de amarlo con toda mi alma no significaría que fuera una chica que se dejara hacer cualquier cosa por amor, porqué mi ego me lo impide y mi subconsciente también igual.
Era de madrugada y me levanté para estudiar un poco los grupos que tocaban mañana, era algo que me gustaba así que no le daba importancia madrugar por ello.
Estuve muchas horas haciendo la tarea por tarea que me proponía Ego. No era muy complicado analizar a una persona pero cuando son muchas e individuales era totalmente exhaustante .
Nagi se había levantado de golpe como si de una pesadilla escapará, haciéndome acordar de cuando me estuvo consolando toda una noche, cosa que acabó resultando un beso, ese beso nunca se me iría de la mente.
Me acerque a él y lo abraze para comenzar a darle cariños, acompañados de algunos besós, al final que acabó durmiendo pero no sin antes decirme con una voz gruesa e excitante.
-Nagi: Te amo.
Esas dos palabras me hicieron quedar totalmente desordenada, nunca me habria imaginado esta escena pero aprovechando aquella situación le respondí...
-T/N: Yo me siento amada por ti y yo también te amo.
Al final nos quedamos de nuevo dormidos pero esta vez, sabía que de ahora en adelante estaríamos juntos hasta lo que dure nuestro amor juntos.
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Hola mis personitas anónimas favoritaaas. Espero que os allá gustado él capítulo.
