Li. [SIN CORREGIR, PAUSADA TEMPORALMENTE]

Plan en marcha.

Todos estaban reunidos allí.

Uma, Gil, Mal, Evie, Carlos, Jay, Jane, Ben, la hada madrina y los padres de Liam. Todos ellos esperaban a los únicos que faltaban, Harry y Li.

Y después de la espera de algunos minutos la puerta se abrió repentinamente dejándolos ver a ambos demasiado apurados.

——¡Perdón por llegar tarde, nos quedamos dormidos!— Harry traía de la mano a Li.

—¿Qué? ¿Durmieron juntos?— Ben y Carlos preguntaron al unísono.

Todos los miraron, era demasiado incómodo, pero no habían hecho nada durante la noche. Ja, Ja.

—¡Si!— respondieron ambos — pero solo eso. Dormimos— Li dijo antes de que todos comenzaran a molestar, pues por las caras de Ben y Carlos sabía que comenzarían a cuestionar a Harry como si ella fuera su hermana pequeña.

—Igual, no importa— dijo Harry.

El par se acercó a la mesa, todos miraban a Harry para que comenzara a hablar, pues de eso era la reunión. Explicaría que era lo que había pasado con Elen.

—Existe una cura— soltó devolviéndole la esperanza a toda la gente de allí — Elen me explicó que... cuando lanzó el hechizo él no determinó que pasaría con Li— Harry recordó las palabras exactas que Elen le había dicho — pero, la magia lo tomó como condena — su mandíbula se tensó y siguió —Hay un libro... un libro que contiene todos los secretos y todas las magias del mundo, solo que, él no sabe donde está, y si lo encontramos puede que haya una forma de que Li viva.

—Tenemos que comenzar una búsqueda. Visitar todos los reinos, todo... Estoy seguro que el libro debe de estar en algún reino o custodiado por alguien— Ben habló.

—Necesitamos ir en el mejor momento del mar... Cuando la marea este baja, o cuando no haya tormentas— Mal habló decidida.

—La marea está alta y bajará en un mes. Necesitamos una tripulación entera— esta vez quien comentó fue el hada madrina.

—Mi tripulación y la mía irá. La de Gil también— Uma se apuntó recibiendo una sonrisa por parte de Harry.

—Yo no iré, pero mandaré a mi tripulación— Harry sonrió a Li —Quiero estar con ella en todo momento.

—La abuela de Li, su padre y yo embarcaremos. Necesitamos estar distribuidos. Entre en más reinos busquemos, mejor— su madre, Alicia, se cruzó de brazos y hablo de forma seria.

Harían lo que sea para salvar a Li.

—Carlos y yo llamaremos a los reinos más cercanos y les daremos los puntos de partida y visita— Jane asintió repetidamente —Mi madre estará pendiente por si alguien lo encuentra para que ella pueda revertirlo — se refería a la hada madrina.

—Estoy seguro que mis padres querrán ayudar, así que ellos buscarán alguna tripulación. Entre más seamos mucho mejor. Así no tardaremos entre reinos. Tenemos un mes para planear las cosas bien— el Rey Ben cruzó sus brazos mirando a la mayoría del salón. Su mirada se fijó en Li —Todo va a estar bien, Li— dijo.

La chica sonrió. Estaba tan agradecida con todos. Todos, absolutamente todos estaban aportando algo.

—Gracias a todos por ayudar. En serio lo aprecio demasiado, no sé que haría sin todos ustedes— Li miró a Harry dulcemente, alzando un poco su cabeza, puesto a que la diferencia de altura era evidente — No sé que haría sin ti— susurró.

La reunión terminó y todos pusieron el plan en marcha. Claro, aún había cosas que revisar y confirmar, pero por ese momento al parecer todo estaba bien y correcto.

[***]

Se había llevado excelente con sus padres. Tan solo unas cuantas horas conviviendo y Harry se había ganado a sus queridísimos suegros.

Li estaba saliendo poco a poco de la enfermedad, pero no tardaría mucho para volver a lo mismo.

—¿Qué tanto hiciste en Arendelle?— preguntó una vez que ambos se encontraban solos en el camarote de Harry.

Algunas veces pasaban tiempo en la isla, otras en Auradon y así era...

—Conocí a Elsa y Ana— respondió fácilmente sentándose en uno de los sofás —Y también a Anne, la hija de Ana. Es gracioso, porque se llaman casi igual— Harry bufó.

—Ouh... sip, ya la conocía— Li husmeaba algunas cosas de allí, aún prestándole atención a su querido novio — Solo tuve el gusto de hablar con ella una vez. Dijo que yo era linda— sonrió mirándolo.

—¿Y quién no lo pensaría?— Harry respondió.

Li le miró con una sonrisa en el rostro y poco después volvió a lo suyo.

—¿Hablaron?

—No mucho... en realidad me dijo que estaría en Auradon dentro de algunas semanas.

—¿En serio?— el pelinegro asintió — ¡Que bien! ¡Creí que nunca volvería a verla!

Entonces su cerebro dejó de funcionar. En ese momento dejó de prestar atención a lo que Li decía y solo se dedicó a admirarla. No comprendía nada, se desconectó por completo de la realidad.

Li lo hipnotizaba.

¿Conocen las miradas más lindas y preciosas que dan los hombres cuando solo se dedican a observar?

Pues así era como en ese preciso instante Harry miraba la chica frente a él. Sus pupilas dilatadas y sus ojos con el reflejo de la única persona a la que amaba con tanta intensidad.

Li pudo notar esto y dejó de hacer lo que estaba haciendo para ir con él. Se sentó a ahorcadas sobre él sintiendo sus manos apretar su cintura.

—¿Te de dicho cuanto amo tus ojos?— entre sus manos tomó su rostro de forma delicada y acarició su mejilla.

Él negó completamente atontado por la chica.

Li dió un beso sobre su mejilla y después dió otro en sus labios, su nariz de metió entre su cuello y él pudo volver a la realidad. Soltó un suspiro por la sensación de cosquilleo que daba la nariz de su novia pasándola por su piel.

La pelinegra volvió a él solo para mirarlo y comenzar a besar sus labios de forma tierna.

—Me haces un tonto— Harry susurró entre sus besos.

Sus labios sabían tan bien, que podría asegurarte que tan solo probarlo una vez era suficiente para volverte adicto.

–Maratón 2/?

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