Capítulo 4

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Las semanas fueron pasando y Tony y su grupo no regresaban.

Hyde se sentía cada vez más deprimida y en la escuela no le iba nada bien. Había entrado a un grupo "Dance Hemsphire" y a la banda musical, además de hacer trabajo social por las tardes en una veterinaria.

En Hemsphire todos querían hablarle a Hyde pero ella simplemente no quería hablar con alguien, se sentía desolada al llegar a la Torre y no hacer nada.

La campana sonó y se dirigió a la salida..

Alguien le tocó el trasero cuando se amontonaron, pero Hyde sabía que se trataba de Harry, un chico de ultimo año que quería tenerla en su cama.
Hyde rápidamente se volteó, harta, y apretó su mano contra las pelotas del chico
— Eso nena — le susurró Harry, que ni siquiera trataba de ocultar su dolor.

— Vuelves a tocar mi trasero, investigaré dónde vives y te castraré, eh maldito.

— Sí, lo que di-digas — Hyde lo soltó y Harry se hizo un ovillo en el piso.
Cuando se montó en su motocicleta, una mano esquelética y con uñas acrílicas la detuvo.

Era aquella rubia que había tratado de sorprenderla en el comedor, que por cierto se llamaba Jessie.

— ¿Se te perdió algo?

— No seas amargada, Hydy, queremos invitarte a una fiesta en casa de Harry.

— Primera, soy Hyde y segunda, no iré a casa de Harry... capaz y me viola.

— Qué exagerada.

— Perdón pero no voy a esas clases de fiestas donde solo hay sexo y drogas y mas sexo — le dijo poniéndose su casco — Pero veré si no tengo algo más en qué perder el tiempo.

Arrancó violentamente. Aquella no era la primera vez que la invitaban y ella se negaba.

Cuando llegó a la Torre, se dio cuenta que todavía no había regresado. No tenía teléfono ya que no le gustaban y además Tony no contestaría si estaba en plena misión.

Miró el reloj y una tremenda flojera le llegó, y se decidió en no ir a la veterinaria.

Se duchó y cuando se vio en el espejo se preocupó. Su piel estaba amarillenta y había adelgazado.
Frunció la boca y terminó de vestirse.

Se tiró en el piso, buscando alguna posibilidad de divertirse sin necesidad de ir a aquella fiesta.

Las posibilidades se redujeron a cero cuando cayó en cuenta que nunca había asistido a una fiesta así.

Rápidamente se arregló y tomó el Audi R8 e-tron blanco de su padre. Desactivó a Friday del coche y se dirigió rápidamente.
Cuando se detuvo en la mansión de Harry, Emergency de Icona Pop se escuchaba a todo volumen.

Aparcó y cuando entró todo el mundo se impresionó de verla ahí.
Llevaba un vestido azul eléctrico que le llegaba a medio muslo y estaba completamente pegado a su esbelto cuerpo, se había maquillado como una profesional —lo cual hacía en pocas ocasiones— y llevaba su cabello algo rulo. Y no podían faltar aquellos tacones de Renteira, altísimos y de encaje.

— Decidiste venir — oyó que le decía alguien en el oído.

****

— No te ahorco porque no tienes un cuerpo físico, Friday.

— Lo siento señor Stark, desactivó mis comandos en su coche.

— ¿En MI coche? ¿El e-tron blanco?

— Sí, señor.

****

En ultimas noticias, un terrible acontecimiento en la Quinta Avenida ha dejado a varios comerciantes sin sus negocios prestigiosos cuando un coche sumamente ostentoso se volcó e impactó en los ventanales de cuatro comercios, dejándolos devastados. El o la conductora desapareció pero los cargos ya fueron hechos cinco horas después del incidente.

Más que una StarkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora