Parte 31

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— No, no, no Adrien. D-de verdad no es necesario. —Negó una dulce azabache sacudiendo la cabeza de un lado a otro. —P-puedo caminar sola.

Adrien rodó los ojos, mientras estaba hincado dándole la espalda. Estaba transformado en Lobo y con su expresión le pidió que se subiera encima de su espalda. Marinette estaba avergonzada, y se negaba a cooperar.

Después de tres días... El celo al fin había terminado. Era hora de regresar.

«Sube, mi amor»

<<Si quieres... Yo puedo convencerla.>>

«No»

— Y-yo puedo... —Se levantó tambaleante. Las piernas le temblaban. —Solo... D-dame un momento para acostumbrarme. —Dió un paso, y casi se caía al suelo. Adrien pudo sostenerla a tiempo. Marinette soltó lo que parecia un suspiro. —Adrien, no quiero que me lleves... Ellos... Nosotros...

«Felix y Bridgette saben exactamente lo que hicimos. No te preocupes por ellos. »

— Lo se, gatito. Aun así no le quita lo vergonzoso. —Adrien lamió su rostro juguetonamente. —Una cosa es que Bridgette se parezca a una cínica gata en celo, y otra cosa es que yo la imite... Lo que hicimos fue más allá de un encuentro carnal... —Mordió su labio desviando la mirada. —A-al menos fue mucho más para mí. Y Y-yo no quiero que ellos lo malentiendan.

«Princesa, el apareamiento es lo que une al Alfa y a la Omega durante el sexo. Es lo más delicioso y placentero que los Mates puedan tener. Tengo entendido que en tu mundo las parejas también se aparean para demostrar lo que sienten.»

Marinette acomodó un mechón detrás de su oreja. Su cabello era un desastre. Parecía una nido de pájaros. Hizo lo que pudo acomodando un par de hebras sueltas hacia atrás.

— Los humanos no se aparean para demostrar lo que sienten...

«Si, tengo entendido que también se dicen cosas bonitas, se dan obsequios y...»

— No, no Adrien. Me refiero que los humanos no utilizan el término "aparear" para referirse a lo que hacen cuando... Ya sabes...

«¿Ah, no?» El Lobo negro frunció el entrecejo.

— N-No...

«Si no es asi como se refieren a su unión carnal... ¿Entonces como le llaman?»

— E-ellos le dicen... Simplemente que hacen el amor. O si es una aventura, solo se refieren al sexo o a follar. —Marinette miro a Adrien con una mirada indescifrable. —En lo personal, hacer el amor es lo que yo considero que hicimos...

«¿En serio? entonces, ¿No nos apareamos?»

— Para ti si, pero al menos yo considero que... ¡Ahgg! ¡Olvidalo! Date la vuelta, solo subiré a tu espalda.

Adrien se quedó pensativo, mientras Marinette le hacia señas para que se volteara. Frunció el ceño, sin entender. Las costumbres de los humanos eran complicadas y diferentes a lo que el conocía.

«¿Aparearse no es lo mismo que hacer el amor?»

— Supongo que no... Dejame subir a tu espalda.

El Alfa bajo la mirada por un momento.

«¿Los humanos hacen el amor, para demostrar lo mucho que se quieren?»

— Si, supongo... ¡Adrien, ya Dejame subir! —Adrien se hinco nuevamente, dándole facilidad a Marinette para que se subiera en el. Cuando la azabache lo hizo, se sostuvo fuertemente al pelaje largo que habia en su espalda para evitar caerse. Adrien empezó a caminar, algo pensativo.

The Alpha MoonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora