Parte 32

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— S-si... Tienes unas manos muy suaves... —Gimotio el Alfa recostando todo su peso en el tronco del árbol.  Kitty apretó su erección con malicia mientras movía su mano de arriba a abajo. —S-sigue...

Que Kitty estuviera de rodillas, cumpliendo una de sus fantasías, era más que un sueño cumplido.

Kitty pensaba casi lo mismo. Tener sumiso bajo su poder a Félix, era una delicia para ella. Félix tenía la respiración entrecortada, y gemía solo para ella. Bridgette no lo había aprovechado lo suficiente. Tener a un hombre como Félix, bajo su dominio, significaba disfrutarlo, explorarlo y tocar cada rincón de su cuerpo.

«N-no me siento cómoda con esto»

<<Ahora aprenderás a tratar a tu Alfa, Brid>> Dijo Kitty con la voz irreconocible. Definitivamente darle el control no había sido una buena idea.

Kitty relamió sus labios, y paso su lengua por la longitud de aquel grande, grueso y húmedo miembro. Saboreo el sabor salado de su miembro, y como una felina, metió la punta del glande en su boca. Félix cerró los ojos y gimió.

— O-oh, si Luna... —Relamió sus labios, abriendo los ojos. Sus gemas verdes estaban encendidas de deseo.

Enredo su mano en el cabello de la chica, y la acercó a su erección, con la intención que se la metiera más profundo. Kitty cerró la boca y negó.

— Si lo hago, será a mi modo. Sueltame el cabello. —Demandó. Kitty nunca había actuado con una aptitud tan... Dominante. Aunque Félix no le gustaba del todo ser controlado, tampoco iba a perder la oportunidad de follar la boca de su Luna.

— Solo por esta vez, dejaré que tu mandes. —Le advirtió Félix.

La soltó lentamente, mientras en sus labios se curvaba una sonrisa traviesa. Kitty también sonrió y metió de nuevo el glande a su boca, deslizando la lengua suavemente por la punta, dejando que el líquido preseminal quedará impregnado en sus papilas gustativas. Félix cerró de nuevo los ojos, y echo la cabeza hacia atrás, con las manos echa puños a sus costados. Intentaba contenerse para no tomar a la chica por el cabello, y meter su polla por completo en su pequeña boca.

Kitty deslizó la lengua por la longitud mientras su mano lo masturbaba en un perfecto movimiento de arriba hacia abajo. Vacilo en metérselo por completo, temia que no entrara todo a su boca. Al final, succionó la punta, y probó la profundidad de su garganta metiéndoselo hasta la mitad.

Félix no pudo controlarse más, y la agarro por la cabeza y empujo las caderas hacia adelante, entrando casi por completo en la boca de la chica, y provocándoles arcadas a la misma.

— Ah, Luna... —Gimió Félix. —Quiero llenar tu boca con mi le...

— ¡Por Dios, Bridgette! —Chilló alarmada la azabache menor cubriéndose los oídos. —¡No tienes que ser tan específica! ¿Sabes?

Bridgette se cruzó de brazos y miro fulminante a su hermana, la cual aún estaba sentada en la cama hecha de hojas.

— Tu eras la que querías saber.

— Si, pero no así... ¿Puedes recortar esa parte?

— O escuchas todo, o no escuchas nada. —Le advirtió Bridgette.

Marinette inhaló hondo, y frotó sus sienes.

— Si sigo escuchando eso... No podre dormir después... Por favor, Netty. Solo dime porque Félix no quiere dormir contigo.

— Te lo diré si escuchas el resto de mi historia.

Marinette chilló y negó como si la vida dependiera de eso.

The Alpha MoonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora