Capítulo 28

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Actualización 3/3

Entró al departamento y de inmediato se dirigió a la cocina para dejar la cena que había preparado en el restaurante

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Entró al departamento y de inmediato se dirigió a la cocina para dejar la cena que había preparado en el restaurante. Estaba usando su tiempo de comida para poder tomar un poco más de su ropa en la maleta deportiva que traía consigo.

Cuando finalmente llegó a su cuarto soltó un largo suspiro. Extrañaba su habitación, su cama. Le agradaba pasar tiempo con Namjoon y Hoseok pero sabía que el tiempo para tomar una decisión se le estaba agotando rápidamente.

Solo faltaba una semana para que sus amigos finalmente se casaran y aunque le repitieran una y otra vez que ellos estaban felices de tenerlo ahí, era consciente de que ellos necesitaban su espacio para disfrutar de su matrimonio y del embarazo de Hoseok.

Otro suspiro más escapó de sus labios mientras arrojaba ropa variada a la maleta sin prestar mucha atención.

¿Por qué era tan difícil tomar una decisión?

Tenía el dinero para rentar otro departamento para él solo, no le causaba ningún tipo de molestia que Minjae siguiera viviendo ahí, también estaba dispuesto a seguir pagando la mitad de la renta, pero sabía que si se iba oficialmente de ese lugar también estaría dejando atrás la relación y las pocas oportunidades que tenía para recuperar a su hermano.

¡Ja! Como si su relación no estuviera más que acabada.

Con un bufido molesto apartó a la molesta voz de su conciencia que últimamente lo había estado fastidiando tanto. Aunque no podía negar que en realidad si sentía que su relación ya estaba casi totalmente enterrada en el pasado

A pesar de lo que Minjae le había dicho a Jimin en el hospital, entre ellos habían pasado poco menos de tres meses desde que hablaron y prometieron que tratarán de mantener las cosas en calma para no alterar nada entre sus amigos y que volverían a sentarse y hablar cuando realmente hubieran pensado las cosas y ambos tuvieran ya una decisión tomada.

Fue la peor sugerencia que pudo haber hecho. Ese día solo quería abrazarlo, disculparse y decirle la historia completa, estaba dispuesto a decirle era una parte muy importante en su vida, que no quería y no podía perderlo, pero en su lugar habían hablado evadiendo el tema.

Se frustraba cada vez que estaban juntos, se hacían preguntas por cortesía y se dedicaban a contestar con monosílabos secos y que no reflejaban ninguna emoción. Lo que él quería era volver a cuando podían bromear entre ellos, cuando la risa de su hermano llenaba el lugar donde estaban a causa de uno de sus chistes, donde esos ojos risueños y parecidos a los suyos lo observaban con admiración y respeto en lugar de evitarlo.

Miro unos segundos alrededor cuando su ropa ya estaba asegurada en la pequeña maleta y salió al pasillo todavía sumido en sus pensamientos.

— Gracias por la comida.

𝑴𝒊 𝑶𝒎𝒆𝒈𝒂 𝑫𝒆𝒔𝒕𝒊𝒏𝒂𝒅𝒐 | ᴊɪɴᴍɪɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora