Capítulo 3

340 64 27
                                    

Algo le sucedía a Yoongi

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Algo le sucedía a Yoongi.

Esa mañana llego al restaurante usando neutralizador para ocultar su aroma pero aún así podía notar la tristeza en su rostro.

Necesitaba saber si el estado de animo tenía que ver con quien sea que estuviera saliendo, o nuevamente estaba tratando de negar su naturaleza omega. Sinceramente ambas opciones le disgustaban, pero esperaría con paciencia a que su amigo se sintiera se a encara primero, a menos que las cosas empeoraran.

— ¿Jin-hyung?

El alto chef alfa lucía un poco apenado mientras lo miraba tratando de llamar su atención.

— ¿Qué sucede Mingyu-ah?

— Yo estaba hablando por celular y me distraje al poner sal en el buldak y... pues...

El menor parecía consternado por ese pequeño error en la salsa.

— No te preocupes Mingyu-ah, podemos resolverlo.

— Respira Mingyu-ah, te dije que no era lo gran cosa. Se que apenas llevas seis meses trabajando aquí, pero ya te deberías de haber dado cuenta de que tenemos unos jefes comprensivos.

La siempre alegre Seungwan, era otra más de sus cocineras y con quien más tiempo tenían trabajando Yoongi y él pues ella llegó al restaurante tan solo tres meses después de que abrieron al público. Era alegre, extrovertida y siempre dispuesta a ayudar a cualquier nuevo empleado.

— No digas eso Seungwan-ssi, estoy molesto en realidad. — Los dos menores lo vieron con caras serias ante su mejor actuación de enojo. —¡¿Tienen idea de lo que abría pasado si nos llegara un caracol como comensal?!

Los tres rieron con diversión aligerado el ambiente.

Por lo menos hasta que un claramente molesto Yoongi camino en su dirección.

— Abrimos en menos de una hora, ¿ya está todo listo? — preguntó su amigo pelimenta.

— Casi todo está listo, incluso el buldak para matar caracoles.

Volvió a hacer una broma tratando de mantener las risas en los dos menores que solo observaron como Yoongi pasba en medio de ellos para probar la salsa. De inmediato notó que el omega estaba tratando de encontrar un escape a su ira.

— No entiendo lo divertido de este error. ¡Las recetas están para seguirse y si no les gusta pueden ir a un lugar donde se les de esa libertad! — El rojo cubría las mejillas de su amigo.

— Yoongi, estás exagerando.

— ¿Estoy exagerando? — Podía ver perfectamente que el pelimenta estaba buscado pelea. — No estoy exagerando, llegamos al punto de confiar en que harían las cosas por sí mismos y si esto no se hubiera probado antes de salir los clientes lo habrían regresado. ¡Eso es una pérdida para nosotros, que no lo entiendes!

𝑴𝒊 𝑶𝒎𝒆𝒈𝒂 𝑫𝒆𝒔𝒕𝒊𝒏𝒂𝒅𝒐 | ᴊɪɴᴍɪɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora