El ex esposo quiere volver a casarse otra vez

90: Comienza la venganza de Ji Ran.

La boda de Ye Linghan y Gan Rui fue muy lujosa, casi todas las figuras destacadas de Kyoto estuvieron presentes como espectadores.

Ji Ran ingresó a la sala de banquetes a través de un pasaje interno. Ye Linghan lo había ubicado en un rincón apartado, tranquilo y discreto.

Tenía miedo de que Ji Ran se alterase al presenciar la ceremonia de la boda, y realmente sufra de depresión prenatal.

Si no fuese por la insistencia de Ji Ran en asistir a la boda, Ye Linghan nunca lo habría traído aquí.

Ji Ran se sentó tranquilamente mientras los sirvientes le preparaban pasteles y té de frutas, asegurándose de que no tocara nada en el lugar de la boda.

Ye Linghan, por motivos de seguridad, consideró que era necesario ser más cauteloso.

Gan Rui ya tenía intenciones de matar a Ji Ran, así que debía de estar alerta.

Ji Ran apoyó su mentón en una mano mientras estaba medio recostado en su silla de ruedas, observando la hermosa y lujosa escena de la boda, con una mirada que poco a poco se volvía fría.

Como era el novio, Ye Linghan estaba muy ocupado.

Después de organizar todo adecuadamente y bajar de la planta de arriba, iría a ver a Ji Ran de inmediato.

Ji Ran llevaba auriculares Bluetooth y escuchaba música mientras tenía un libro de consejos de maternidad y otro de pediatría en sus piernas.

Ye Linghan se paró a su lado y lo observó en silencio por un momento, asegurándose de que Ji Ran no tuviera ninguna reacción inusual, antes de hablar: "Ran Ran, ¿No estás cansado? Si estás cansado, deberías volver primero y cuando termine, iré a buscarte a casa".

Ji Ran negó con la cabeza: "No es necesario. Quiero verlo con mis propios ojos".

"¡Por favor, sé bueno! ¡Regresa a casa!" Ye Linghan temía que no pudiera soportarlo, prometiendole una y otra vez que después de que terminase la boda, regresaría a la mansión, instándolo a que se fuera ahora mismo.

Ji Ran era muy terco: "¡No! quiero quedarme aquí".

Ye Linghan intentó persuadirlo durante un buen rato, pero al ver que Ji Ran no cedía, frunció el ceño impacientemente, sintiéndose molesto en su corazón por la falta de comprensión de Ji Ran.

Con el ceño fruncido, estaba a punto de estallar cuando Ji Ran de repente habló: "Sé que esta noche no volverás".

Toda la ira de Ye Linghan se disipó instantáneamente, y una sensación de dolor se apoderó de su corazón.

Hoy era su noche de bodas, incluso si quería regresar a la mansión, Ye Yunping no lo permitiría y la familia Gan no lo dejaría en paz.

Cuando dijo que regresaría a la mansión, solo estaba tranquilizando a Ji Ran.

Pensaba que podía calmar a Ji Ran, pero Ji Ran entendía en su corazón claramente lo que estaba sucediendo.

Insistió en quedarse en la ceremonia de boda solo porque quería verlo un poco más. ¿Y por qué no lo dejaba quedarse? ¿Por qué todavía quería discutir y enojarse con él?

Ye Linghan se sintió extremadamente culpable, tomó la mano de Ji Ran y la besó: "Puedes quedarte aquí todo el tiempo que quieras. Después de que termine la boda, te llevaré de regreso".

Ji Ran entendió muy bien sus sentimientos y dijo comprensivamente: "Ve y ocúpate de tus asuntos. Tengo sirvientes que me acompañarán".

Ye Linghan se sintió especialmente conmovido.