154. Tú también eres Alfa, ¿Por qué no te convertiste en un Omega?

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La aparición de Ye Linghan fue tan repentina que Yun Yi estaba completamente desprevenido y aturdido, incluso se le había olvidado cómo reaccionar.

Rong Cheng primero le echó una mirada a Ye Linghan y luego a Yun Yi.

Aprovechando la luz de las farolas en la zona de las villas, pudo ver claramente la lucha que había en los ojos de Yun Yi.

Rong Cheng entendía perfectamente sus emociones, y sabía que él aún tenía sentimientos por Ye Linghan.

Extendió su mano y tomó la de Yun Yi, ese cálido contacto hizo que se despertase como si de un sueño se tratara, y se giro hacia él para decir: "Voy a hablar con él".

Rong Cheng le sonrió tiernamente. "Sui Sui debe estár ansioso por verte, así que ve primero. Yo hablaré con él."

Yun Yi conocía como era el temperamento de Ye Linghan y temía que Rong Cheng saliera perjudicado.

Pero Rong Cheng percibió la preocupación que mostraban sus ojos y sonriendo le dijo. "No pasará nada, ¡no te preocupes!"

El hecho de que Yun Yi se estaba preocupando por él era un buen comienzo.

Mientras se esforzara más en ser bueno con él, pronto podría olvidarse de Ye Linghan.

Los dos estaban susurrándose cosas en el coche, y fué una escena que hizo que Ye Linghan sintiera como si su corazón fuese desgarrado, doliéndole terriblemente el pecho.

Miró fijamente a Rong Cheng con los ojos llenos de furia, deseando poder sacarlo del coche y golpearlo hasta despedazarlo.

Apretó los puños con fuerza, luchando por controlar la ira ardiente que emanaba dentro de él.

No podía permitirse perder los estribos frente a Yun Yi, ¡de ninguna manera podía hacerlo!

Yun Yi y Rong Cheng bajaron del coche uno tras otro. Rong Cheng antes de despedirse le entrego una caja de pastel. "Por favor, dile a Sui Sui que no podré entrar a saludarlo".

"¡Se lo diré! Voy a entrar ahora", respondió Yun Yi mientras tomaba la caja con el pastel.

"¡Nos vemos mañana!" dijo Rong Cheng con una ligera sonrisa.

Ya de por sí era naturalmente atractivo y esa sonrisa fué suficiente para hacer que el mundo se quedase paralizado.

Ye Linghan no pudo contenerse más y, cuando Yun Yi pasó junto a el, agarró de su muñeca. "Necesitamos hablar" dijo casi exigiendole mientras tenía los ojos fijamente clavados en Rong Cheng mostrando advertencia.

"Ya te lo he dejado todo en claro ese día", respondió Yun Yi, encontrando fuerzas para zafarse de Ye Linghan. "Estoy comprometido no vuelvas a buscarme, de verdad no quiero verte."

Yun Yi ya se ah comprometido. ¡Él ya no me quiere más!

Ye Linghan estaba en su peor momento, e instantáneamente sus ojos se enrojecieron, se quedó sin palabras y el dolor que sentía en su corazón era tan intenso que casi lo destruía por completo. Sí, Yun Yi estaba comprometido.

Su cuerpo se dobló, luchando por contener aquel dolor tan desgarrador.

¡Era realmente insoportable!

"¿Por qué te comprometiste con él? ¿Por qué?"

Casi rugió con aquello ojos rojos y su cuerpo entrando al borde del colapso.

"¿Me odias tanto, Yun Yi?"

Rong Cheng se acercó y se interpuso entre los dos, dirigiéndose a Yun Yi: "¡Entra adentro tú primero! ¡Sui Sui todavía está esperandote!"

El ex esposo quiere volver a casarse otra vezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora