77. ¿Quién se atreve a ponerle un dedo encima a lo que es mío?

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Ye Linghan realmente lo mordió, y Ji Ran sintió cómo sus labios se volvían adoloridos por la mordida.

Su corazón ardía de furia y, abriendo la boca, mordió de regreso.

Ye Linghan inhaló aire frío, sintiendo que este pequeño gato de colmillos afilados estaba dispuesto a enfrentarlo.

Ye Linghan no se apartó y permitió que Ji Ran lo mordiera, aprovechando la oportunidad para presionarlo contra la puerta y besarlo apasionadamente.

Ji Ran hizo un gran esfuerzo logrando morder los labios de Ye Linghan hasta hacerlos sangrar.

Sin embargo, Ye Linghan no lo soltó y siguió adelante, avanzando con fuerza y determinación, logrando que Ji Ran cediera ante sus besos.

Naturalmente, el precio también fue doloroso, casi le había arrancado un pedazo de carne de los labios a Ji Ran.

Ye Linghan tocó la comisura sangrante de sus labios, ¡realmente dolía!

¡Este pequeño gato era realmente despiadado!

Ye Linghan agarró la barbilla de Ji Ran y la sacudió con fuerza. "¿Quieres morderme hasta la muerte?"

Ji Ran sonrió fríamente. "¡Más bien quiero apuñalarte hasta la muerte!"

La ferocidad en los ojos de Ji Ran le dejó claro a Ye Linghan que realmente quería matarlo.

El corazón de Ye Linghan le dolía y estaba lleno de irritación y furia. Apretando los dientes, dijo: "¡No seas tan ingrato!"

Ji Ran simplemente lo miró con una mirada fría y gélida, haciendo que Ye Linghan se sintiera incómodo en todo su cuerpo.

"¿Por qué me hablas con esa actitud?", preguntó Ye Linghan con una mirada oscura, sus pupilas mostraban sombras cambiantes, como si pudieran desatar una tormenta en cualquier momento.

Al ver la terquedad y el orgullo en la actitud desafiante de Ji Ran, Ye Linghan se enfado.

¿Por qué tenía que ser tan terco y obstinado, no podía ser más suave?

"Si tan solo fueras un poco más dócil, si tan solo pudieras ser tierno, no terminaríamos divorciados."

Ji Ran era realmente obstinado hasta el final, nunca se inclinaría ante él.

Señalando la posición del ascensor, Ji Ran dijo: "Este es mi hogar, por favor, lárgate. De lo contrario, llamaré a la policía por allanamiento de morada".

Ye Linghan se enfureció aún más y sonrió con sarcasmo. "No te eh visto en unos días, y resulta que ya te has vuelto valiente".

Él había esperado abajo durante toda la noche, sin querer molestarlo, soportando el frío viento.

En lugar de apreciarlo, Ji Ran le dio la espalda.

Ye Linghan se sentía como un tonto, y un idiota.

Agarrando la muñeca de Ji Ran, lo arrastró hacia él. "Parece que últimamente he sido demasiado amable contigo. Te he consentido tanto que te has vuelto tan desenfrenado."

Ji Ran se estrelló contra su pecho y olfateó el tenue olor a tabaco en él.

Ye Linghan había fumado varios cigarrillos esa noche, y aunque se había deshecho de la mayoría, aún quedaba algo impregnado en su ropa.

Estando tan cerca de Ye Linghan sintiendo el olor a tabaco, le provocó náuseas en el estómago.

No pudo contenerse y vomitó frente a Ye Linghan.

Aunque solo había vomitado un poco de agua clara debido a que no había desayunado, el rostro de Ye Linghan se volvió pálido como el hierro.

Sus dientes crujían. Realmente quería estrangular a Ji Ran.

El ex esposo quiere volver a casarse otra vezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora