Merlina Addams es una arquitecta CEO de Addams Corp, una escritora con éxitos muy grandes, además de tener su propia editorial. Ella junto a sus dos mejores amigas, Jang Hari y Rizuna Ann vivirán nuevas experiencias y nuevos sentimientos cuando Mort...
Coloqué mi casco en mi cabeza para luego subir a mi motocicleta con una sonrisa en mi rostro, puse la llave y encendí el motor para luego ver a mi lado izquierdo, arranque alejandome de aquella calle, aceleré un poco más pasando los semáforos en verde. El trabajo por estos días no me a tenido tan ocupada y todo es por qué mi superior me a corrido varias veces para poder tomar un descanso, uno que ni siquiera necesito.
Desacelere cuando note que el semáforo estaba por cambiar así que poco poco baje la velocidad hasta llegar alfrente de los coches, coloqué ambos pies a mis lados mirando alrededor, luego por un momento gire a mi lado derecho pero en el segundo en que hice eso se escuchó un fuerte frenado que hizo que volteara a mi lado izquierdo solo para ver un Chevrolet color azul detenido en la vuelta además de que al parecer había golpeado a alguien en bicicleta.
Miré por unos segundos cuando la mujer que al parecer venía en la bicicleta se levantó, no podía ver su rostro ya que estaba dándome la espalda, la vi levantar su bicicleta para luego recargarla en el poste de la esquina, hice una mueca interna al ver cómo había quedado la llanta delantera, la cual estaba bastante torcida.
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La mujer se acercó al conductor quién se estacionó más adelante para luego acercarse a la mujer pidiendo una disculpa por qué al parecer él había tenido la culpa, volví mi vista al semáforo para ver qué aún estaba en rojo así que volví a ver lo que pasaba con ese accidente, al menos esa persona idiota no escapó de su responsabilidad, luego mis ojos se abrieron un poco más de lo normal debajo de mi casco al notar quién era la mujer.
¿Qué probabilidades había en qué volviera a ver a la amiga de Enid en un lugar tan aleatorio? Trague en seco observando como hablaba y gestionaba con él hombre, ambos sacando sus celulares, Kuina había llamado mi atención desde el momento en que la vi en aquel hipódromo, aunque tuve que salir de mi ensoñación cuando un coche detrás de mi tocó el claxon.
Así que volví mi vista alfrente para ver qué ya tenía la luz verde, así que aceleré un poco para después orillarme un poco hacia mi lado derecho, al llegar a otro crucé espere a que el semáforo se colocará en rojo, luego baje de mi motocicleta y maniobre con cuidado para pasarme al otro sentido ante la atenta mirada de las personas, ya se... Pero no podía esperar, está podría ser mi oportunidad para hablar con la mujer que sigue en mis pensamientos después de tres días seguidos.
Cuándo estuve en la orilla de la banqueta del otro sentido, volví a subir a la motocicleta para acelerar cuando el semáforo se colocó en verde, conduje con rapidez para luego bajar la velocidad en cuanto divise la esquina donde aún seguía Kuina, ¡Bien! Una pequeña sonrisa brotó en mi rostro y estacioné un poco más adelanté, al parecer el hombre con su coche ya se había marchado dejando solo a Kuina y su bicicleta descompuesta, apague el motor y me quite el casco para luego caminar hacia ella.
Kuina al parecer no se daba cuenta de lo que pasaba a su alrededor ya que estaba metida en sus pensamientos, mirando fijamente su bicicleta con ambas manos en la cintura, mientras me acercaba a ella, mi corazón se aceleraba, era algo fuera de lo normal por qué... Jamás me había pasado una cosa así, era inusual y ni siquiera he hablado con ella.
