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Enid Pov.

—¿A dónde vas tan guapa?—. Escuché la voz de Kent detrás de mi.

—Quede de verme con Merlina, no la he visto en una semana por qué a estado de viaje de negocios—. Dije colocandome la boina en mi cabeza.

—¿A dónde te va a llevar?—. Preguntó Divina haciendo que girará mi cuerpo para verla.

—Nos veremos en el restaurante que tanto te gusta a ti—. Le dije a Yoko quién venía en pijama y comiendo un pan.

—Ese es genial, comida muy rica, me traes algo de comer—. Murmuró Yoko con un guiño feliz.

—No creo volver pero lo intentaré, ¿No tienen trabajo que hacer?—. Pregunté arrugando la frente y los tres me rodaron los ojos.

—No, tengo cosas importantes que hacer—. Murmuró Kent para luego marcharse con rapidez.

Divina y Yoko solo se encogieron de hombros y se marcharon dejándome sola, negué con la cabeza y mire a mi cama dónde Kuina y Mijin seguían durmiendo sin importarles el ruido mientras yo me cambiaba, negué con la cabeza divertida por qué a noche habíamos tenido una linda velada de amigos y la mayoría termino en mal estado, yo no... Yo fui astuta para grabar las tonterías de todos y chantajearlos después.

Tome mi celular para luego colocarme en el espejo de cuerpo completo en donde podía ver bien mi vestimenta, me gustaba como me veía, había escogido una boina color verde, una blusa tipo suéter de color blanco que me había regalado Mijin, un pantalón negro y había colocado mis convers blancos en la entrada para colocarmelos cuando saliera, sonreí y tome la fotografía.

Tome mi celular para luego colocarme en el espejo de cuerpo completo en donde podía ver bien mi vestimenta, me gustaba como me veía, había escogido una boina color verde, una blusa tipo suéter de color blanco que me había regalado Mijin, un pantal...

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—¡Despierten! ¡Ya son las cinco de la tarde!—. Grité divertida comenzando a jalar las cobijas que cubrían a ambas.

—¡Déjame en paz! Quiero dormir—. Gruñó Kuina con voz ronca.

—¡Perra!—. Gruñó Mijin cuando jale más fuerte haciéndola caer de la cama.

—Vamos, ya es muy tarde y deben de comer algo, dejen de ser unas niñas—. Les dije entre risas cuando vi el estado de su cabello hecho un lío.

—Me duele la cabeza—. Murmuró Kuina sentandose en la orilla de la cama.

—Era obvio, bebieron mucho, las espero afuera—. Simplemente dije dejándolas y escuchando las groserías de Mijin haciéndome reír.

Al llegar a la sala-comedor, note a Ajax, Tyler y Suhyeok tirados con cobijas en el suelo de la sala comiendo cereal, en cuanto me vieron me lanzaron una sonrisa feliz, todos bastante demacrados pero... Quién los manda a beber tanto, los saludé y caminé a la cocina para prepararle algo de comer a Kuina y a Mijin.

—¿Qué haces? ¿Me vas hacer algo de comer para esta cruda realidad? ¿Te vas apiadar de este pobre joven?—. Preguntó Tyler colocandose a mi lado.

Love Story (Wenclair)  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora