Capítulo Veinticuatro

1.1K 62 17
                                    

Emma Bloch.

La puerta de la habitación fue tocada, me levanto para abrir. Tomo el picaporte y entonces la realidad de mi cae como un jodido balde de agua fría, frente a la puerta esta mi tía con una cara de pocos amigos, y la entiendo ya que jamás le dije absolutamente nada de lo sucedido. Suspiro, esto realmente será agotador.

—Puedes, dejarnos a solas Yoongi —aviso al pelinegro y este asiente para luego desaparecer por el pasillo.

Mi tía entra a la habitación y luego la inspección, cierro la puerta tras mio ya al vernos de frente siento el ardor en mi mejilla; mi tía me propina una cachetada completamente molesta, descargando toda su ira en mí. Yo no digo nada, mi cara se voltea de perfil y sigo en aquella posición por unos segundos mientras mi mirada cae.

—Lo siento —trato de disculparme.

—¡Lo sientes! —exclama molesta—. ¿Qué mierda te pasa Emma?.

La culpa cae sobre mí como si hubiera cometido el peor crimen de la historia, sabia que tarde o temprano tendría que decirle la verdad más aún cuando ella era quien se estaba haciendo cargo de Leo.

—Dejas a tu hijo solo por venir a revolcarte con quien sabe quién, ¿ah?, acaso se te olvida que Leo es ¡tú hijo, tú responsabilidad!.

—No, simplemente... —trato de hablar pero me interrumpe.

—¡Pero nada! —Deja salir un suspiro—. No sabes lo preocupados que estábamos en casa, tu hermano se sentía culpable porqué pensaba que por el te habían llevado a la fuerza.

—¡Lo siente de verdad!, se que suena estúpido pero, no tenía como comunicarme con ustedes —trato de explicar—. Además deben de entender que también tengo derecho a reacer mi vida.

—Claro, eso lo tengo muy presente. Pero no por eso significa que esta es la forma de hacerlo —guardo silencio porque se que es verdad. Mi tía pasa sus manos por su cabello frustrada—. ¿Quién en ese hombre?.

—Es mi pareja —respondo ya más tranquila.

—Eso ya lo se, el muy sinico me lo restregar abajo con orgullo, me refiero a que se dedica —trago grueso—. Y no me venga con el cuento estúpido de que es "empresario", porque ese hombre nos trajo a la fuerza y aparte nos tapo el rostro con una bendita tela negra, esto es evidente que a cosas legales no se dedica.

Dios mio, no creí que seria tan difícil esto. Carajo, porque no le dije todo desde un principio.

Trato de pensar en como explicar sin que haya más problemas de por medio y entonces caigo en cuenta a lo que me dijo.

—¿Cómo qué "nos"? —pregunto confunfida—, ¿quién más esta aquí?.

—Leo también está aquí, el muy maldito no sólo me saco el susto a mi, si no el doble porque me trajo junto a Leo.

Nisiquiera pude procesar absolutamente nada, deje de escuchar todo cuanto mi mente solo capto una cosa "Leo también esta aquí". La felicidad me cayo rápido, estaba más que feliz porque por fin vería a mi hijo, por fin iba a estar de nuevo con él.

—¿Leo esta aquí? —pregunto emocionada.

Asiente—. Está abajo en la oficina de ese hombre.

¡Mierda!, Leo está con jungkook. Toda aquella felicidad se convirtió en preocupación, no sabía cómo reaccionaría jungkook al estar a solas y tan cercas de Leo, en especial porque el no aceptaba aquella idea de tener hijos o estar cercas de uno.

Trato de ir con ellos pero la voz de mi tía me detiene.

—¿A dónde crees vas? —toma mi brazo—. Tú no te vas de aquí, hasta que me explique todo y con detalle del porqué estás aquí y porqué estás con ese hombre.

Ambisiosa Seducción ||Jk® +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora