En Todas Las Formas

Represalias

"Sam, tienes que calmarte y pensar las cosas, por favor. Acabas de salir del hospital hace unas horas, en contra de lo que te recomendaron». Caminaba de un lado a otro mientras escuchaba a Jim contarme cosas que ya sabía pero que no me importaban en ese momento.

"¡La estaba tocando! Ella estaba besando y tocando a mi Mon!" Golpeé la pared con furia. «¡Santa madre de Dios!» Ok, eso fue estúpido, tan, tan estúpido. ¡Mierda!

«¡Sam!» Kate se acercó a mí y revisó mi puño.

"¿En qué demonios estabas pensando? Podrías haberte roto los nudillos o algo. No eres She-Hulk, Sam». Hice una mueca de dolor.

"¡No estaba pensando, Kate, joder! Estoy tan furiosa ahora mismo. Estaba así de cerca de ser feliz, pero la vida tiene otros planes para mí». Kate me arrastró hasta el sofá.

« Iré por el hielo.» Tee se dirigió a la cocina. Miré a Charlotte, que estaba al borde de las lágrimas.

"¿Puedo usar tu baño? Creo que a Song le vendría bien bañarse». Asentí y la vi subir.

"¿Por qué demonios tardan tanto? Estos idiotas ya debieron averiguar dónde están». Agarré mi teléfono con mi mano herida y lo dejé caer. "¡Maldita sea! Tee, ¡¿dónde está el maldito hielo?!" Volvió corriendo a la sala y me puso bruscamente el hielo encima de la mano. Hice una mueca de dolor y me golpeé la pierna varias veces.

"Lo siento. Le mandé un mensaje a Yuki para que venga. Lleva un tiempo cuidando de su tío y se preocupó al no recibir noticias de Mon».

«Genial... Otra inútil en esta casa que no me da ninguna puta respuesta». Cogí mi teléfono y llamé al jefe de seguridad. "¡¿Por qué coño están tardando tanto eh?! ¿Creen que esto es una broma o qué?». Mantuvo la compostura, pero escuché cómo tragaba saliva.

"Estamos de camino a su casa ahora, señora. Llegaremos en 6 minutos». Fruncí el ceño.

«¡Pues dense prisa de una puta vez antes de que los despida a todos!». Colgué la llamada y me quité la bolsa de hielo de la mano. Los nudillos me sangraban un poco, pero no me importaba. Tenía suficiente dolor en el corazón para el resto de mi vida. Un poco de sangre no es nada.

«¿Sam?» Miré a Jim. Detrás de ella estaba mi encantadora abuela.

«¿Qué está haciendo ella aquí?» La abuela se sentó a mi lado.

«¿Podríamos tener un momento en privado, por favor?». Señalé con la cabeza hacia las escaleras.

» Vayan a ver cómo están Charlotte y Song. Yo estaré bien». Asintieron y subieron al piso de arriba.

"¿Por qué te fuiste del hospital, Sam? ¿Por qué no me dijiste que estabas enferma? He estado tan preocupada por ti». Me tocó el hombro. Me estremecí y me alejé del sofá.

"Te lo voy a preguntar una vez. Si me dices una sola mentira, puedes pensar que estoy muerta, como hiciste con P'Fa todos estos años». Intentó levantarse del sofá y levanté la mano para detenerla. "Quédate ahí y responde a lo siguiente. ¿Tienes algo que ver con el secuestro de Mon y P'Fa? ¿Sí o no? Es todo lo que necesito».

«¿Cómo puedes pensar....» La hice callar.

"Es una pregunta de sí o no. No necesito razones». Suspiró.

«No, no tengo nada que ver con eso». Seguía sin creer en lo que decía.

"Ok, supongamos que creo en tus palabras. ¿Por qué llamaste a Nita y en qué la ayudaste?». Tomé la bolsa de hielo y la volví a colocar sobre mis nudillos haciendo una mueca de dolor.

"Antes de declararse en quiebra, sus padres me pidieron ayuda para recuperar su empresa. Les dije que lo haría porque los padres de Nita son gente importante. Puede que no sean de la familia real, pero sin duda se han ganado su confianza y su afecto. Así que acepté ayudar a Nita. Eso es todo." Sonaba como algo que ella haría.

«Recuerdo lo que dijiste, sabes». Ella me miró confundida. "Recuerdo lo que dijiste en el hospital, que no pagarías ni un céntimo por recuperar a la mujer que amo. Ella lo es todo para mí, es mi felicidad. Incluso Kirk y su familia lo entendieron cuando cancelé la boda. Pero supongo que para ti sólo soy una desgracia igual que P'Fa. Bueno, ¿sabes qué? No me importa. Tan pronto recupere a Mon puedes considerar que estoy muerta. Te amo abuela, pero si tengo que elegir entre tú y Mon, ella siempre será mi primera opción». No dijo nada durante unos minutos.

"¿Quieres saber por qué estaba fuera del país? Me estoy muriendo, Sam. He estado haciendo los últimos preparativos para cuando muera. Me pasé toda la vida intentando mantener intacta la imagen de nuestra familia, pero llegué a un punto en el que ya no me importa. Quiero ser parte de tu vida y de la de Engfa. Cometí tantos errores que pagaré de la manera que tú quieras, pero quiero que sepas que poco a poco estoy aprendiendo a aceptarlo. Estoy yendo a un psicólogo para comprenderlas mejor. Sólo quiero una oportunidad, si me lo permiten». Las lágrimas empezaron a fluir de los ojos de Sam.

«¿Lo dices en serio?» Ella asintió.

"Te juro que es todo lo que quiero. Si quieres estar con Mon, no te lo impediré. Sólo déjenme estar en sus vidas por favor. Haré todo lo que pueda para ayudar a recuperarlas. Tengo investigadores privados por todas partes, pero no han encontrado mucho. Yo..." La abracé con fuerza y sollocé en sus brazos.

«Gracias, abuela». Me acarició la espalda.

"Te amo, Sam. No hay nada que no haga por mi familia». Le sonreí y ella me secó las lágrimas. Nos interrumpió un timbrazo. El jefe de guardia había entrado en la sala esperando permiso para hablar.

"¡Chicas! Vengan aquí». Bajaron rápidamente. «Dime dónde están». La abuela agarró mi mano.

«Están en la casa de vacaciones de la Srta. Nita en Chiang Mai». Te encontré, cariño.

«¿Tienes el celular del Sr. Toey?» Asintió y me lo dio. Le envié un mensaje a Nita diciéndole que iba para allá.

«Sam, ¿qué vas a hacer?» Charlotte sostenía a Song, que aún estaba húmedo por el baño.

«Voy a recuperar a nuestras mujeres».