¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—Hasta aqui te acompaño, Aiko-chan —Dijo el rubio.
—Prometes escribirme?
—Lo prometo.
—Abrace a el de rostro vendado dejando un beso en sus mejillas — Eres muy buena compañia Kasuhiko-kun.
—Digo lo mismo, pero ahora debes entrar e ir con tu familia, adios!
—Hasta pronto! —Dije y entre a la finca de el sonido, de la cual solo me ausente una semana.
—Aiko! Volviste!! —Dijo mi sensei
—Sip! Como ha estado todo en mi ausencia?
—Bien, pero aburrido, chicas! Llegó Aiko!
—Aiko!!! Bienvenida! —dajo Hinatsuru.
—Que alegria tenerte de vuelta —Dijo Makio.
—Lo que ellas dijeron!! —Esta vez fue Suma quien hablo.
—Debes platicarme sobre tu misión! —Exclamo Uzui.
—Claro!
[. . .]
—Bueno, conoci ha un chico lindo —Dije mientras masticaba.
—Como era el? Era Extravagante? Era educado?? —Decia curioso mi maestro.
—Es tranquilo, rubio alto, amable y ciego.
—Ciego?
—Ciego.
—Vaya suerte, no sabes cómo perdió su vista?
—Nop, no me lo conto
—Ya veo. Bueno, comamos para revisar tu condición y ver si podemos entrenar!
—Si, sensei!
•||Narra Akaza||•
—Me enviaron a un tren, ordenes de... Ese hombre. Bueno tengo entendido que hay un pilar, esto sera divertido, pero hay algo que no me puedo sacar de la cabeza, bueno mas bien alguien, cierta castaña de ojos verdes me tiene preocupado, ese hombre la sigue vigilando de lejos pero, pero yo quiero saber de ella, aunque se primer dia en la fortaleza fue algo molesto despues nos hicimos buenos amigos, o eso creo, con respecto a mi mision, tengo que partir hoy al anochecer, ya que ahora mismo 7:00 y si, estoy corriendo como loco buscando donde ocultarme de el sol...