Por ti daría todo 1/2

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Sentir esos labios sobre los suyos era casi como un bálsamo para sus heridas. En ese momento, ella no podía pensar en nada que no fuera el instante que estaba viviendo al lado del hombre que siempre había amado. Las cosas que él le hizo no tenían importancia, pero lentamente todo ese dolor fue regresando a ella, haciendo que fuera imposible poder seguir al lado de Naruto.

—No —le dijo, apartándole suavemente de su lado, a lo que Naruto le miró confuso—. No puedes sólo venir aquí, decirme que lo sientes y esperar a que te perdone.

—Pero Hinata... —Naruto trató de decir algo, pero fue interrumpido por la chica, la cual le miró aún dolida por todo lo que acababa de pasar dentro de aquella oficina.

—No quiero verte en este momento, necesito estar sola, por favor.

El rubio quiso volver a replicar, pero al ver la expresión de desespero de Hinata, entendió que lo mejor que podía hacer era dejarla a solas. Lentamente caminó hacia la puerta, pero una vez ahí, se detuvo, volteándose para mirarla.

—Quiero que sepas algo, Hinata —dijo, llamando la atención de la chica—. Ahora que sé toda la verdad, no pienso renunciar ni a mi hija, ni a ti, así que no pienses que no regresaré a buscarte —sin más, se alejó tras la puerta, dejando a Hinata a solas y tremendamente shockeada por todo lo recién acontecido.

Ella se dejó caer sobre su asiento, respirando agitadamente.

—¿Qué haré ahora? —se preguntó confusa y preocupada. Naruto sabía toda la verdad ahora, por una parte, se sentía aliviada, ya no tenía que seguir ocultándole que Hime era su hija, pero por el otro lado, ahora tenía más miedo que antes; Naruto no estaba dispuesto a ceder, no pensaba abandonar el lugar que por derecho le pertenecía. A pesar de que estos seis años ella haya estado viviendo una mentira junto a Sasuke, ahora tenía demasiado miedo de que esa mentira se cayera como un castillo de cartas, de tener que enfrentar a su padre y a toda la sociedad, porque sería marcada por todos.

Pero ¿qué era realmente más importante para ella? ¿Acaso lo que otros pensaran era incluso más valioso que su propia felicidad y la de su hija?

De verdad necesitaba pensar muy bien cómo proceder de ahora en adelante.

*·_·_·*·_·_·*·_·_·*·_·_·*·_·_·*

Sasuke se encontraba encerrado en su oficina, reflexionando sobre todas las estupideces que había cometido anoche tras emborracharse, ni siquiera fue capaz de regresar a su casa, porque no podría mirar a Hinata y a su hija después de lo que hizo. ¿Cómo había sido capaz de hacerle eso a Sakura? ¿Qué culpa tenía ella de todas sus estupideces? Sakura lo había amado siempre, y él muy estúpidamente había pensado que esa sería razón suficiente como para que ella le quisiera consolar siendo su amante, pero estaba tan equivocado, estaba tan errado.

—Sakura... —susurró débilmente. No podía siquiera imaginar lo que ella estaba sintiendo en el momento en que él llegó y le obligó a estar con él, aunque se había detenido justo a tiempo, si no lo hubiese hecho, habría terminado por convertirse en un violador. Definitivamente, no podía volver a darle la cara, no podía volver a verla nunca más en la vida.

Ya no la vería nunca.

—Sasuke —oyó la voz de su hermano Itachi, quién había entrado sin aviso a su oficina y cerró la puerta tras él—. Sasuke, ¿estás bien? —le preguntó al ver que Sasuke parecía no notar su presencia.

—¿Qué haces aquí? —cuestionó el Uchiha menor, tratando de parecer más repuesto de lo que estaba hace unos segundos. Todavía seguía teniendo una relación distante con su hermano mayor, muy pocas veces se dirigían la palabra y no solían tener conversaciones a solas. Itachi se había ganado su desprecio luego de desaparecer por tanto tiempo sin aviso, Sasuke era rencoroso y aún no era capaz de perdonarle.

El Error de AmarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora