Hace unos días volví al equipo de Mercedes, luego de un mes en donde mi doctor no me permitió trabajar por fin vuelvo a pisar el paddock. Me encontraba camino a la oficina de Toto Wolff, mi jefe. Recibí un mensaje suyo donde pedía que en cuanto estuviera en el pit lane fuera hacia su espacio de trabajo.
Al llegar di unos toquecitos en la puerta. -Adelante.- escuché decir al otro lado y entré. Tal fue mi sorpresa al ver que Lewis, mi ex novio, también se encontraba allí. -Queremos hablar contigo- explica Toto mientras Lewis me mira, escaneandome, como si buscara algo. No me sentía incómoda con su presencia, ni mucho menos, al contrario, me gustaba que estuviera allí. Nuestra ruptura fue muy espontánea, yo no planeaba terminar con nuestra relación y tampoco él, pero hace poco más de un mes cuando comencé con mis visitas recurrentes al doctor para hacerme exámenes y demás, supe que algo no estaba bien conmigo, y así fue. No quería que él se preocupara por mí cuando debía estar enfocado en las carreras y en el equipo.
Tomo asiento frente a los dos hombres que se encuentran en la habitación, preparada para lo que vendrá.
-Estamos preocupados por tí- comienza a hablar Toto- hemos notado durante estos días en los que has vuelto que no eres la misma. Antes eras muy alegre, siempre brillabas y tenías mucha energía, pero ahora pareces apagada y cansada, creímos que volverías a ser tú pero pasan los días y sigues igual.-
-Estamos preocupados por tí, linda- por primera vez Lewis habló, se sentía como si siguieramos juntos, ojalá así fuera porque necesitaría mucho a alguien en quien apoyarme ahora.
Tomé aire, preparándome para hablar. -Estoy enferma- acote y vi como sus rostros se relajaron creyendo que era todo, pero cuando vieron que la situación era mucho más compleja sus rostros se tensaron- hace aproximadamente poco más de un mes tuve cita con mi doctor, me envió hacerme exámenes y me diagnosticó esclerosis múltiple.- al escuchar ese nombre ambos hombres compartieron una mirada para luego volver su atención a mí.- Al comienzo no quería creerlo, me sentía perfectamente bien pero cuando comencé con los síntomas el doctor me dijo que tomara un descanso y que no exigiera mi cuerpo, por esa razón no me permitió trabajar durante este tiempo. Ya no soy la misma de antes, ahora me canso mucho más rápido, camino más lento, soy más débil y a veces siento dolor en mis piernas, me recetaron medicinas y estoy en un tratamiento pero con el tiempo empeorará. Existe la posibilidad de que en unos varios años incluso pierda la habilidad de caminar.-
El rostro de Toto reflejaba preocupación y creo que inclusive algo de molestia, pero en cambio, Lewis no demostraba nada, incluso conociéndolo tan bien, durante tanto tiempo no pude interpretar como se sentía con esto.
-Lo siento tanto- es lo único que Toto pudo decirme- Si necesitas cualquier cosa no dudes en hablar conmigo, con nosotros.- Lewis quien seguía en silencio asintió con la cabeza. Agradecí a los dos hombres frente a mí y salí del cuarto. Me dirigía al garaje cuando sentí un fuerte dolor en mi pierna derecha y de pronto perdí el equilibrio, espere el impacto de mi cuerpo contra el suelo pero este nunca llegó, en cambio, unos fuertes brazos tomaron mi cintura y me ayudaron a reintegrarme. Aún sin ver el rostro de esta persona sabía que era Lewis.
-¿Estás bien?- escuchar su voz provocó una sensación que recorrió toda mi espalda y por un segundo olvidé el dolor de mi pierna.
-Sí, gracias. Si no fuera por tí estaría desplomada en el suelo.- sonreí como una tonta, como una adolescente enamorada, y, aunque no soy adolescente si estoy enamorada de este hombre.
-No hoy de qué- luego de unos segundos en silencio continúo- ¿Crees que podríamos hablar un momento?
-¿Ahora?- él asintió- Claro, por qué no.
Nos dirigimos al cuarto donde se prepara para la carrera ya que solo él lo utiliza por lo tanto estaría vacío. Cuando llegamos tomé asiento en un pequeño sofá ya que mi pierna seguía doliendo, Lewis colocó una silla frente a mí y se sentó.
-¿Fue por esto que terminaste conmigo?- su tono de voz demostraba dolor, conocía demasiado a este hombre como para saber cómo se siente solo con escucharlo hablar. Asentí, no sabía exactamente qué responder.
-¿Por qué? ¿Creíste que iba a juzgarte? Yo te hubiera apoyado, aún lo hago.- parecía ofendido, como si yo no supiera que él era incapaz de juzgar a alguien. Sus ojos comenzaban a brillar más de lo normal debido a las lágrimas que acumulaban.
-No, no, no Lew, no es eso.- me apresuré a decir mientras le limpiaba una lágrima rebelde que corría por su mejilla.- Yo solamente quiero lo mejor para ti, y eso no incluye estar cuidando de mí cuando deberías estar concentrado en tu carrera, en el equipo y en el monoplaza.-
-¿No crees que eso debería decidirlo yo?- luego suspiro, esperando mi respuesta.
-Lo sé, pero sabía que aunque intentara ahuyentarte no me dejarías.-
-Claro que no!- se levantó de su asiento caminó unos pasos y luego volvió al lugar de hace unos momentos.- No te dejaría ni aunque tuviera que cargarte y cuidar de ti por el resto de mi vida, porque te amo y yo entiendo que el amor incluye estar al lado de una persona incluso en sus peores momentos.- Ahora era yo quien lloraba, sabía que no fue la mejor decisión alejarlo de mí pero en ese momento me deje guiar por el miedo.
Ahora fue Lewis quien limpió las lágrimas de mi rostro, me miró por un segundo y luego me besó. Extrañaba tanto esta sensación, seguía sintiéndose como antes, nada había cambiado entre nosotros.
-Quiero que volvamos a intentarlo, pero esta vez habla conmigo y dime que es lo que sucede.-
Asentí, era imposible rechazar su propuesta, amo a este hombre y no puedo permitir que algo fuera de mi alcance arruine todo lo que hemos construido.
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Sorpresaa!! Oficialmente comencé con mis vacaciones, si bien son solamente 2 semanas trataré de aprovecharlas al máximo, me sentía mal por abandonarlos/las durante tanto tiempo así que les regalo esta historia de Lew. Tenía planeado subirla antes pero se me hacía imposible escribirla hasta hoy, espero les guste!
P.D: Volvieron las cancioneeess. No me digan que no es hermoso, por favor.
