The Boy at The Window

Nightmare.

Capítulo 29.

Nightmare. 

Al detectar aquel olor a sangre se levantó y encendió una vela iluminando su habitación y vio su cama rebosante del vital líquido, casi como si hubiera desmembrado allí a su víctima. Tomó su vela con la base y salió rumbo a otra habitación para pasar la noche. 

Camino por los oscuros pasillos y conforme iba avanzando e iluminando todo podía ver las paredes de su preciosa mansión sangrar. 

Sacudió su cabeza pensando que solo eran alucinaciones suyas debido a la borrachera, más aquella visión no desapareció, dirigió sus ojos al piso y lo que vio en verdad empezaba a asustarla. El suelo, aquel bello suelo de su mansión se había convertido en un río de sangre. 

Derramó la cera de la vela en su mano y la quemadura le hizo saber que nada de eso era un sueño. 

Dejó caer la vela y entre la oscuridad corrió hasta la planta baja y de allí a donde se guardaban las armas qué poseía la familia más todos los aparadores estaban vacíos, incluso su preciosa espada había desaparecido. 

Como pudo a tientas fue hasta la cocina, allí tomó fósforos y otra vela de la alacena para observar mejor a su alrededor. Y vio que donde había hecho pedacitos a Michaelis había un charco de sangre que iba tomando una extraña forma de pentagrama y también un montón de plumas negras como si lo destazado allí hubiera sido un ave y no una persona. 

Ella no creía que los muertos resucitarán, mucho menos cuando no habían pasado 3 días desde que dejaron este mundo, sin embargo como si algo la llamara salió de su casa hacia donde enterró a ese tipo y se sorprendió de manera no grata cuando vio el hoyo vacío. 

Frances nunca fue una mujer que le temiera a algo, sin embargo allí estaba ella con escalofríos que recorrían cada fibra de su ser.

Y no era para menos, el cadáver que ella misma desmembró y enterró en ese sitio había desaparecido. No obstante respiró profundamente y decidió volver a su hogar viendo cómo todo estaba perfectamente como siempre.

Se encerró en su dormitorio y de nueva cuenta se recostó, otra vez estaba a punto de quedarse dormida cuando sintió compañía en la cama. Encendió una vela y en su cama,¡En su propia cama! encontró el cadáver descuartizado de Michaelis.

Eso fue demasiado para ella, entre tropezones llegó de nuevo a la cocina de dónde tomó fósforos, luego fue hasta la cava y de allí todo un par de barriles de whisky, volvió a su alcoba y con el licor bañó el cuerpo de Michaelis y su cama misma, arrojó un fósforo y las llamás lo envolvieron, sin embargo tan rápido cómo aparecieron se consumieron mientras la habitación se llenaba plumas negras y en la cama se formaba la figura que más temprano en la cocina. figura, 

Una sensación de terror se apoderó del cuerpo de Frances que sólo se dejó caer al piso en shock.

En su cama, sentado tan galante como siempre estaba Sebastián mirándola con una sonrisa siniestra.

-Buenas noches Frances querida.- saludó al demonio con total tranquilidad.

-¿Q-qué significa esto?-

-Vamos querida, ¿No te alegra verme? No podía irme sin hablar contigo.-

-Imposible, yo te maté, yo te corté ¡Yo te enterré! ¿Qué clase de brujería es esta?-

-¿Impresionada querida? Mi poder va más allá de eso.- acaricia el rostro de la mujer. -¿Quieres saber cómo fuí capaz de reconstruir la casa de tu hermano en solo una noche?-

-Toda la alta sociedad lo sabe, le vendiste tu alma al demonio.-

-Es mucho mejor que eso querida, soy el demonio en persona…