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HANAHAKI

MARZO 2011

- Hanahaki - Menciono la niña de diez años que estaba sentada en la gran silla giratoria de su padre en su oficina - Te vas a morir.

- ¡Podrías dejar de decir tontearías! - regaño el chico de quince años que acomodaba los documentos sobre los ingresos del hotel - No me voy a morir por una absurda creencia.

- El Hanahaki es real - siguió ella que jugaba a dar vueltas - Te morirás por culpa de Saku-nee - el mayor solo se congelo al escuchar el nombre de la hermana mayor de la hija de su jefe - Estas tosiendo mucho, en cualquier momento vas a vomitar una flor.

 - ¿Como sabes que me gusta tu hermana? - pregunto para dejar de acomodar los documentos y ver como la niña se detenía de jugar - ¿Es muy obvio?

- ¡Demasiado! - chillo ella - Papá, Kaori-nee y Mei-nee lo notaron. Por eso digo, te vas a morir por el Hanahaki.

Su vacaciones solía pasarlo siempre en el hotel de su familia. Bien podría pasar sus ratos libres con sus amigas en el parque, pero la realidad era que Yena no tenia amigos en la escuela y con la única niña con la que hablaba, Mako Yamaguchi, estaba con su familia en Tokyo. Por eso prefería estar en el hotel de su familia, ayudando a los trabajadores, comiendo de algún dulce en el invernadero de mariposas o molestando a Ryu Mizuta, que trabaja en las vacaciones con la familia Hirokawa.

- Saku-nee nunca se ha fijado en ti - siguió la niña que le pasaba un perforador al chico de quince años - Es mas, nee-san solo te ve como la persona que hace sus deberes. No deberías fijarte en ella. Es cruel, egoísta, celosa y muy gritona.

- ¿Volviste a discutir con Sakura? - pregunto, era testigo de los constantes roce de las dos Hirokawa menores con Sakura.

- Dijo que me llevaría al centro comercial para comprarme el ultimo album de Taylor Swift pero no lo hizo - murmuro para cruzar sus brazos y recostarse en el silla.

Se asusto al ver como Mizuta tosió demasiado fuerte y un liquido rojo en su mano. La pequeña Yena no pudo evitar sorprenderse para darle un poco de agua con una servilleta para que pueda limpiarse. "La historia es real" pensó asustada ella.

- Yena es hora... - la voz de Mei quedo en el aire al ver como el chico de quince años que iba en el mismo salon de Sakura, tenia una mancha roja en sus labios - Dime que Yena no te golpeo.

- ¡Nee-san! - chillo la niña que bajaba rápido de la silla para ir hacia la adolescente de diecisiete años - ¡Mizuta-kun morirá por el Hanahaki!

- No... - tosió con fuerza el chico, asustando a Yena que se escondió detrás de su hermana mayor - tengo... Han-hana-Hanahaki... - siguió tosiendo.

Mei tuvo que ordenar a Yena que buscara a su padre porque el chico seguía tosiendo sangre. Ella tenia demasiado miedo que estaba gritando lo mas fuerte en los pasillos del hotel para llamar la atención de alguien que los pueda ayudar. No quería que Mizuta se muriera, era su único amigo dentro del hotel y era cómodo conversar siempre con él cuando cumplía con su trabajo. Pero había algo que si sabia, si Mizuta  moría por el Hanahaki culparía siempre a su hermana mayor.

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ABRIL 2011

- Necesito que... - la menor de la familia solo la ignoro para entrar enojada a su hogar y subir corriendo al baño - ¡YENA!

- Ríndete - murmuro Kaori - Sea  lo que hayas dicho o hecho con ella, esta vez si te pasaste - vio como Sakura enojada se sacaba el abrigo de la escuela y sus mocasines negros.

- Es es la cuestión, no hice nada - confeso ella.

Yena solo se encerró en el baño para limpiar su cabello que estaba manchado con helado de menta y se dio un rápido baño. Necesitaba lavar su uniforme, porque otra vez Reiko le echo helado a la hora de salida y no pudo hacer nada para defenderse. Una vez que estaba limpia, solo bajo otra vez para buscar su bicicleta e ir al hotel donde debía estar su padre. Extrañaba a Mizuta, era mas de mes que no sabia de él y nadie quería decirle que le paso. Por eso en su inocente mente de diez años, creía que en verdad murió por el Hanahaki.

Una vez que llego al hotel solo corrió para buscar a su padre en el invernadero, quería contarle todo lo que le paso ese primer día en la escuela. Pero se quedo quieta al ver al chico de cabello negro de quince años estaba hablando con su padre.

- ¡Mizuta-Kun! - chillo ella para correr hacia el adolescente - ¡Mizuta-kun no murió!

El patriarca solo arqueo una ceja ante las palabras de su hija menor. Yena solo abrazo lo mas fuerte al mayor, que traía puesto su uniforme de secundaria.

- Te dije que el Hanahaki no me mataría - respondió para desordenar el cabello de la niña - ¿Me extrañaste?

- ¿Como te curaste? - pregunto ella - Papá, Mizuta-kun regreso.

- Pues me realizaron una operación para sacarme todas las flores que tenia en mis pulmones - respondió para agacharse a la altura de la niña y seguirle el juego de esa historia que creía fielmente. No podia decirle que le dio una Bronquitis fuerte - El Hanahaki no me matara.

- ¿Entonces ya no te gusta, Saku-nee? - pregunto inocentemente.

- No, ya no me gusta tu hermana.

- Es una pena, porque Nee-san se pierde a una gran persona - murmuro ella.

La menor de la familia esculpió el agua enzima de Kaori que no se quejo, porque para las dos era una sorpresa ver como Sakura tenia un anillo de compromiso en el dedo. Cuando le dijeron que su hermana le tenia una noticia, pensó que era sobre una nueva película que iba a filmar. No que su hermana avisara sobre su boda que seria en menos de dos meses y la cereza del pastel fue cuando aviso que muy pronto ellas dos iban a ser tías.

- Es una broma, ¿no? - pregunto en japonés confundida - ¿Dónde están las cameras?

- Nee-san, no bromees así - menciono Kaori que daba un fuerte trago al sake - Esta clase de broma no es...

- Y falta la cereza del pastel - menciono su padre que comía tranquilo su carne Kobe.

- ¿No es con el Yakuza ese con el que salías? - pregunto Kaoria viendo a la rubia de Yena que estaba mas pálida que nunca. - ¿Quién es el desafortunado?

- Ryu Mizuta... - Yena volvió a escupir el agua pero ahora enzima de su hermana mayor. 

- Mizuta-kun merece algo mejor...

- ¡Yena! - regañaron Sakura y su padre.

- Pero digo la verdad. Mizuta-kun es alguien bueno, gentil, responsable y muy honesto - siguió la menor - y tu eres...

- ¿Que soy Himeko? - pregunto Sakura enojada.

- Eres...

- Es cruel, egoísta, celosa y muy gritona. - una tercera voz masculina se unió en la conversación - ¿Esas no fueron las palabras que usaste una vez, Yena?

- No te metas en esto Mizuta-kun - respondió Yena que estaba alegre de verlo otra vez - Trato de alejar las feas garras de mi hermana de ti.

- ¡YENA!