🧊Padres por encargo🍒 | YushiTama | Era moderna x lector

Cap. 1: ¿Un bebé?

Tamayo preparaba el desayuno. Era domingo así que Yushiro y ella tenían el día libre, después de todo ambos trabajaban en la enfermería de la academia Kimetsu, siendo Tamayo la enfermera y Yushiro su asistente.

En cuestión de segundos Tamayo sintió como Yushiro la abrazaba por la espalda. Ella, con una sonrisa delicada, dejó la sartén y le correspondió el abrazo.

- Buenos días, Yushiro - le dijo Tamayo.

- Buenos días, Tamayo-chan - le contestó el pelimenta de ojos púrpura - ¿Cómo dormiste?.

- Muy bien, ¿Y tú?.

- También dormí bien.

- Me alegro.

Yushiro se sentó en el sillón a mirar la tele mientras que Tamayo seguía haciendo el desayuno.

Minutos después ambos empezaron a desayunar mientras conversaban. Actualmente tenían 20 años y se habían casado hacía 3 meses atrás, pensaban en tener hijos después de unos años ya que aún se consideraban jóvenes para tenerlos en ese momento, además tenían que asegurarse de tener el dinero suficiente para mantenerlos.

La conversación de la pareja se vio interrumpida por el sonido de alguien tocando la puerta sin parar, como si estuviera desesperado por qué alguien abriera. Yushiro se levantó de la silla y fue hacía la puerta, encontrándose con la nada.

"Agh, odio cuando los hijos de los vecinos fastidian de esta forma" pensó Yushiro, pero escuchó unos llantos que lo hicieron bajar la vista. Su mirada de molestia cambió a una de asombro al ver una caja que tenía a un bebé adentro de esta.

El bebé poseía un cabello castaño, ojos celestes como el cielo y piel blanca. De sus ojos celestes caían lágrimas.

Yushiro, sin saber muy bien que hacer, agarró la caja en sus brazos y la llevó adentro.

- ¡Tamayo-chan! - gritó estando dentro de la casa - ¡Ven a ver esto!.

La azabache de ojos púrpura fue hacía su marido asustada de que le hubiera pasado algo, pero al verlo con la caja de la que se escuchaban llantos se preocupó y confundió más, sobre todo cuando vio al bebé dentro de la caja.

Tamayo sostuvo al bebé en sus brazos, meciéndolo delicadamente mientras cantaba una canción de cuna para calmarlo. El bebé pronto se durmió en los brazos de Tamayo, quien suspiró aliviada al igual que Yushiro al saber que al menos el pobre niño había dejado de llorar.

Ambos fueron hacía un armario que tenían en la sala de la casa, Yushiro lo abrió y sacó un futón pequeño dónde Tamayo recostó al bebé.

- ¿Por qué alguien abandonaría a un bebé? - preguntó Tamayo viendo a la criaturita que descansaba con el chupete aún en su boca - no sobrevivirá si lo dejan por ahí.

- Lo sé, pero a veces la gente puede ser tonta, o prefieren deshacerse de las consecuencias de algo que hubieran hecho para no tener que lidiar con ellas - habló Yushiro - en mi opinión, los padres de este bebé lo abandonaron a su suerte porque no querían lidiar con la consecuencia de lo que hicieron. El bebé sería la consecuencia en este caso.

- Yushiro, ¿Que haremos con el?. No podemos abandonarlo como hicieron sus padres y pienso que aún está muy pequeño para mandarlo a un orfanato.

- Mmm...cierto...podemos quedarnoslo por un tiempo hasta que crezca un poco más, cuando eso pase veremos si nos lo quedamos permanentemente como sus padres adoptivos o si lo dejamos en un orfanato, aunque también en todo caso podríamos llevarlo con alguien que si se sienta capaz de poder cuidar de un bebé.

- Bueno...si decidimos dárselo a alguien más dentro de un tiempo se lo podríamos dar a Uzui-san, ya sabes, nuestro compañero de trabajo con 3 esposas y profesor de arte de la academia.