Hunted by the mafia, memories and secrets in Rome / Tom Kaulitz

Chapter 21

Taylor

Tal y como había mostrado antes el enlace de transmisión en el ordenador, la habitación era una bodega de grandes barriles de madera para que el vino envejeciera. Estaba iluminada por un par de luces en las paredes de piedra. Había un par de sillas a un lado de la enorme sala donde se sentaban tres hombres que parecían dispuestos a atacar en cualquier momento.

Al otro lado de la habitación estaba la cámara y delante de ella se sentaba Tom en la silla, con Anthony detrás mirándonos sorprendido. Tom levantó la cabeza y nos miró a Hirato y a mí.

Antes de que me diera tiempo a reaccionar, dos hombres tiraron de Hirato y lo derribaron al suelo con un fuerte golpe, mientras su pistola volaba hacía el otro extremo de la sala.

Alguien me agarró de los brazos y me arrastró hacia atrás, haciéndome tropezar debido a la sorpresa.

—¡Quítame las manos de encima! —Rugí y vi cómo Hirato forcejeaba, pataleaba y golpeaba con los puños a los hombres que claramente tenían problemas para mantenerlo en el suelo.

Dos de los hombres sentados saltaron inmediatamente para ayudar pero ni siquiera Hirato pudo defenderse de 4 hombres.

Miré fijamente a Tom, que me devolvía la mirada mientras un pequeño gemido salía de sus labios cuando Anthony lo golpeó en la nuca.

Apreté la mandíbula y usé toda mi fuerza para disparar mi codo justo en el diafragma del hombre que me sujetaba, haciéndole volar hacia atrás con pérdida de aire y un gemido.

Vi mi oportunidad y me abalancé hacia Tom, arrodillándome frente a él, colocando mis manos a cada lado de su destrozado rostro.

—¡¿Tom?! —Grité, tratando de forzar sus ojos cautelosos a encontrarse con los míos.

—Taylor no... —murmuró, pero dejó caer el peso de su cabeza sobre mi mano, haciendo que mis lágrimas ardieran en mis ojos. Estaba tan frágil y débil...

—¡Estúpida! —rugió de repente Anthony mientras señalaba hacia la cámara que uno de sus secuaces se acercó corriendo y apagó.

Me estremecí al ver su mano levantarse en el aire para ganar fuerza y luego venir hacía mí. Apreté los ojos, anticipando el dolor, hasta que oí un golpe y no sentí nada.

Abrí los ojos y vi que Tom había movido la cabeza para recibir el golpe en mi lugar. Volvió a gemir mientras Anthony se burlaba de él.

Mi cerebro dejó de funcionar mientras jadeaba y abracé a Tom. Apenas estaba consciente pero seguía intentando aguantar el golpe.

—Tom tienes que permanecer despierto, escucha mi voz —me asusté. Respiraba con dificultad y le levanté la cara, le limpié parte de la sangre del labio mientras sus ojos se encontraban con los míos. Parecía más que débil.

—No deberías haber venido —jadeó mientras yo negaba con la cabeza.

—Lo habría hecho de todos modos, nada podría haberme detenido —murmuré y me esforcé por dedicarle una pequeña sonrisa a pesar de la situación.

—Tom tiene razón, sin embargo, no debería haber venido aquí... —Anthony gruñó de repente y me agarró del brazo, apartándome bruscamente de Tom. Gemí un poco por el hecho de que me agarrara con tanta fuerza. Sentía como si fuera a aplastarme los huesos.

—¡Quítame las manos de encima! —Grité e intenté zafarme, pero era mucho más fuerte de lo que había previsto.

Me arrastró por el suelo mientras yo luchaba por liberarme. Le lancé una mirada apresurada a Tom al ver que estaba tan cansado que apenas podía mantener la cabeza erguida.