Samsara

XI.

Kim abre el libro con manos temblorosas. Es un volumen algo grueso que necesitará algunas noches para ser leído en su totalidad. Khun y Kinn lo miran con atención, los dos han quedado en silencio después de que Kim le contara a los dos acerca de esa otra vida y esa otra persona cuyos recuerdos son los suyos. A decir verdad, es bastante reconfortante saber que Kinn no piensa que él y Khun se han vuelto locos, su hermano mayor aceptó la historia que él narró con elegancia y sin poner en duda ninguna de sus palabras.

Kim contiene el aliento después de abrir el libro. La primera página reza "Auge y caída del reino de Flodvin" y el escalofrío que recorre la espalda de Kim al ver un retrato antiguo de un hombre de cabello largo y negro que podría ser su gemelo hace que sus hermanos se acerquen un poco más a él.

—Es increíble— susurra Kinn con algo de miedo en la voz—. Kim, eres tú.

—Oh dios— dice Khun y su mano se aferra con fuerza a la mano de Kim—. El parecido es enorme, Kim.

—Soy yo— dice Kim con voz débil—. El rey maldito soy yo.

—Leamos la introducción— dice Kinn con voz temblorosa—. Supongo que ahí encontraremos las respuestas que estás buscando de forma sencilla.

Kim asiente mientras su corazón late de forma acelerada dentro de su pecho. Un frío pesado y terrible se ha instalado en su corazón sin que él pueda detenerlo. Su mano derecha le da vuelta a la página del libro mientras que la izquierda se aferra con fuerza a la de Khun porque si no lo hace, perderá la conciencia. Kim siente que está a punto de atravesar un portal que lo llevará a un mundo terrible, un mundo que murió con el rey Kærlighed. Kim respira de forma profunda y después comienza a leer con voz firme a pesar de que el miedo sigue fluyendo por sus venas:

Del reino de Flodvin y el monarca maldito.

Incontables textos fueron escritos al respecto de la vida de Kærlighed, uno de los monarcas más jóvenes recordados por los historiadores de los reinos del norte ubicados en lo que antes fue el gran continente azul. Lamentablemente, las páginas que se han escrito acerca del Rey Maldito como se le conoce en la historia no narran proezas épicas sino sanguinarias matanzas ordenadas por el joven rey al que Hanabi de Myrthen hirió hasta la locura.

La historia de Kærlighed se remonta trescientos años atrás. Los reinos del norte eran territorios bastos y fértiles sobre los cuales se erigirían los cimientos de nuestra sociedad moderna. Kærlighed era el hijo menor de los reyes del norte quien heredó el trono luego de que sus dos hermanos mayores murieran en una epidemia de gripe que dejó debilitado al reino al que sin embargo, Kærlighed dedicó su juventud entera para intentar reconstruirlo logrando a sus escasos veintidós años un esplendor jamás antes visto.

El reino de Flodvin inspiraba admiración y envidia. Los historiadores están seguros de que una de las razones de la prosperidad del reino fue el hecho de que la península de Amberlia, el pequeño reino costero que prometió al hijo menor de los reyes de aquel lugar, el príncipe Stjernelys en matrimonio con el monarca del norte, jamás dejó de apoyar al joven rey cuyo único bálsamo pareció ser siempre la existencia de su mejor amigo y amante, ese al que solía escribirle:

"El día es largo sin ti, mi ángel. Al finalizar mis tareas me siento tan cansado y rendido que quisiera renunciar a todo pero si pienso en ti, el cansancio se evapora y entonces todo en mi corazón se transforma en esperanza. Tengo fe de que pronto vendrás a mí y llenarás las paredes de este castillo solitario con tu risa y tu música. Sueño contigo todos los días y anhelo poder tenerte entre mis brazos porque este mundo no tiene sentido si no te tengo a ti. Mi ángel, cuento los días para poder verte y poder decirte lo mucho que te amo mirándote a los ojos. Mi cansancio tiene sentido porque estoy construyendo un reino digno de ti. Si pudiera hacerlo Stjernelys, conquistaría para ti el mundo entero pero tú jamás has querido nada de eso, dices que te basta con mi amor. Soy tan afortunado de tenerte. Cada día que pasa me acerca más a ti y quisiera poder adelantar el tiempo. Ven a mí, ángel. Mi alma y mi cuerpo mueren por estar cerca de ti."