4┆km ඞɞ

983 90 1
                                    

Violación.

-por favor, para. Déjame, basta, sueltame- me solté y corri de nuevo hasta la puerta, pero esta seguía cerrada. Me dejé caer en el suelo contra la puerta y abracé mis rodillas mientras comenzaban a caer lágrimas por mis mejillas.

-¡Jimin ven aquí!-lo miré mientras señalaba un lugar al lado suyo en la cama. No quería ir, pero sabía que debía ir sino quería que me pasara algo. O a Yoongi.

Me paré y me acerqué hasta quedar frente a él. Me senté a su lado completamente tenso, me dolía el hombro y las ganas de llorar no se habían ido. Reprimí mis lágrimas lo más que pude pero igualmente se derramaron, jungkook lo notó y habló:

-no puedo creer que llores—. Se burló— creí que eras el súper chico que no tenía debilidades.

—si hay algo que aprendí es que todo héroe tiene kriptonita—. Respondí.

-¿tú tienes una? -asentí-

yo no-comentó mientras se acercaba a un mueble al que no le había prestado atención.

-todos tenemos algo que nos hace débiles, o alguien-.eso lo tenía claro.

-yo soy invencible, no hay nada que produzca miedo en mí.

-eso es imposible.

Fue tan rápido que no tomé conciencia hasta que pasó.

Jungkook estaba encima de mí sobre la cama agarrando mis manos a mis costados.

-¿a qué le tienes miedo?- preguntó mirando mi boca entreabierta.

-tengo miedo de...- me callé. No tenía por qué decirlo. - No te importa- volví a forcejear.

-¿de...? vamos Jimin, dime.—insistió. —¿a qué le tienes miedo?

-de lo que puedas hacerle a Yoongi.- respondi casi contra mi voluntad.

-no va a pasarle nada—. Liberó mi brazo derecho y comenzó a levantar mi polo.

-para-. Al ver que no lo hacía insistí. - Para.

-¿por qué tanto miedo Jimin? ¿Acaso no lo hiciste antes?__ agarró el borde de mi polo  y tironeó hasta que la costura se rompió, dejando más fácil la tarea de abrirla.

Las dos mitades de tela terminaron en el suelo dejándome el pecho desnudo, me levanto y me quito mi casaca, dejándome completamente desnudo de la parte superior. Rápidamente traté de cubrirme pero sus manos impidieron que pueda mover las mías.

-me gustas así-. Dijo.

-para, por favor, para-. Supliqué.

-no quiero parar, muchos meses tuve que esperar para esto -. Dijo apoyando sus rodillas alrededor de mi cintura para que no escapara y sacando su polo dejando ver su bien formado cuerpo.

-estás loco.

-nunca lo negaré.-

Atacó mi boca con la suya haciéndome estremecer. Cerré mis ojos tratando de no llorar. Al ver que no seguía su beso agarró mi cara entre sus manos- Jimin, quiero que me beses.-negué. Sí, vas a hacerlo.- al instante sentí su mano derecha sobre mi pantalón, acariciando mi muslo.

Se levantó y buscó algo en los cajones, cuando me lo mostró tenía ganas de que la tierra me tragara.

-¿sabes qué es esto?— sostuvo la cuerda en su mano-sirve para atar personas en las camas- volvió a tirarse sobre mi- y esa es la función que va a cumplir ahora- sin importarle mi puto hombro ató mis manos al cabecero de la cama, las lágrimas y gritos no sirvieron de nada.

-¡no quiero esto!

-prometo que no va a dolerte-. Agarró mi pantalón junto con mis zapatillas y las sacó de mi cuerpo, sacó sus medias y se quedó solamente en ropa interior. Yo estaba completamente desnudo. Segui llorando hasta que sentí su erección contra mi pierna. Eso fue lo que colmó el vaso.

-¡basta, para, por favor!

-tienes diecinueve años Jimin, no eres un niño, deberías hacer algo de esto -agarró mi cabello para que torciera mi cabeza-ya veras, lo disfrutaras- volvió a llevar su boca a mi cuello bajando hasta mi clavícula y mi pecho.- no entiendo como no lo hiciste antes, eres hermoso - agarró mi pezones y lo pelisco generando que todo mi cuerpo palpitara. Comencé a moverme para sacarme esa sensación pero él atrapó mis piernas entre las suyas y las separó con las manos.

-no, para, no estoy listo.

No le importó lo que dije y apoyó su erección contra mi entrada ya lubricada

Esperen.. ¿Lubricada?

¡¿CUANDO HIZO ESO?! ¡¿en que momento?!

-tranquilízate, sino dolerá más.- Entró despacio lo que hizo que sintiera como me rompía, cada milímetro de dignidad que me quedaba se esfumó. Estuvo un rato acomodándose dentro mío hasta que encontró una posición que le gustó.

-me gustas así Jimin, conmigo, desnudo- miró mis manos- indefenso se impulsó una vez más dentro mío, lo que me hizo gritar de dolor, esto no era para nada placentero.— y toda mío-  terminó la frase mientras descargaba su semen dentro mío.

-esto es asqueroso-. Lloré mientras él salía dentro de mí y desataba mis manos. Traté de pararme pero el dolor de mi trasero era insoportable.

Iba a pararme igualmente pero sus manos me lo impidieron.

-quédate quieto- ordenó- a menos de que quieras dormir atado.

Me quedé estático en donde estaba.

Él agarró mi cintura y lo abrazó usando mi espalda como apoyo. Se quedó dormido a los pocos minutos, roncando levemente. Al instante que sentí su respiración regulada me paré a pesar del dolor. Me puse mis pantalones y el polo de él, dado que lo mío estaba hecha tirones en el piso. Busqué entre sus prendas una llave para abrir la puerta, buscar a mi hermano e irme. Lo encontré en uno de los bolsillos de sus pantalones y abrí sigilosamente la puerta.

Había un largo pasillo que descendía por unas escaleras hasta un patio, iba a abrir la puerta pero una mano tapando mi boca y otra agarrando mi cintura me lo impidió.

-¿alguna vez te dije que si me desobedecías también habría castigos para ti?— la voz de Jungkook sonaba como una amenaza.

Bueno, sonaba como lo que era.

Traté de hablar pero su mano impedía esa acción. Me cargó mientras yo pataleaba hasta la habitación nuevamente.

-¿pensaste que estaba dormido?- preguntó mientras me dejaba bruscamente en la cama.- ¿me crees tan idiota como para dejarte escapar?  Jimin, estamos solos. No puedes salir de una caja sin salida. No puedes dejarme.

Se alejó y volvió con un trapo en la mano, me alejé instintivamente hasta la otra punta de la cama pero me alcanzó y apoyó ese trapo en mi nariz, traté de alejarme nuevamente pero tomó mis manos por detrás de la espalda y una mezcla de olor dulce y cítrico me invadió dejándome sin sentidos, abrumándome y arrastrándome. Me quedé dormido al instante.

:c

EL SECUESTRO ┆km ඞɞDonde viven las historias. Descúbrelo ahora