EL SECUESTRO ┆km ඞɞ

19┆km ඞɞ

¿De nuevo? (maratón 2/3)

Jungkook se había despertado antes que yo. O nunca se había dormido, no lo sé. Según me dijo después, el viaje había durado casi dieciséis horas. Así que casi seguro se había dormido, pero - como dije- él había despertado primero porque, cuando me digné a abrir los ojos luego de haber dormido como un morso él se había cambiado la ropa y parecía que se había dado una ducha, porque olía a jabón.

—si quieres puedes darte un baño, aterrizaremos en una hora— me dijo cuando vio que estaba consiente.

-está bien-me desperecé.

En realidad, ahora que lo veía, estaba en una cama. Probablemente jungkook me había movido a la habitación privada del avión mientras dormía. Era claro que mi sueño era pesado, porque si no me habría despertado cunado él me cargó.

Jungkook  me dijo dónde estaba el baño y cómo encender la ducha con panel electrónico- que era demasiado moderna para alguien como yo para luego salir y dejarme privacidad.

Estaba bastante sorprendido por el cambio de jungkook en estos últimos dos días. También yo había hecho un esfuerzo. Tranquilamente podría haber intentado escapar o no darle una oportunidad luego de su treta respecto a yoongi.

No tardé mucho en la ducha. Cuando salí, me percaté de mi falta de ropa limpia. Lo anterior no estaba sucio, así que podría ponérmelo, pero cuando revisé sobre la tapa de inodoro en su busca, ésta ya no estaba.Sali del baño que estaba conectado a la habitación -e intenté pasar desapercibido a los ojos de jungkook que estaba en la otra punta. Para mi desgracia, cuando abrí la puerta no vi la pata de una mesa pegada a ésta e hice ruido cuando lo golpeé con el dedo pequeño del pie. ¿Por qué siempre era el mismo dedo, pueden explicarme?

-¿Estás bien?- jungkook se giró y me observó.

Mi cara ya colorado por el agua caliente que había usado en la ducha- se puso incluso más rojo, de ser posible, al ver cómo Jungkook me miraba. Sus ojos recorrieron mi cuerpo y me llené de sensaciones contradictorias. Su mirada expresaba lujuria, lo que me hacía sentir poderoso frente a cómo lo ponía, pero por el otro lado esa misma lujuria me daba mucho miedo.

-Si- finalmente le contesté. Estaba cohibido bajo su mirada— sólo estaba buscando algo de ropa.

-Te traeré algo. La temperatura bajó mucho así que será mejor que te pongas unos pantalones largos y no los shorts de antes- me dijo.

-Está bien, gracias.

Jungkook salió de la habitación y en ese momento el aire- que no sabía que no tenía- volvió a mis pulmones. No tardó mucho en volver a la habitación, trayendo unos pantalones de chándal de deporte y una camiseta ajustada de maga larga.

Mi corazón se disparó cuando el hombre se acercó para entregarme en la mano la ropa. Casi me da un paro cardíaco cuando se acercó demasiado cerca, lo suficiente como para tocarme sin extender por completo el brazo. Para cuando rozó mi brazo con la yema de sus dedos, me senti morir de miedo. ¿Había ido derecho a una trampa?

-tan hermoso -jungkook habló tan bajo que me costó entenderlo.

El acortó la distancia, aún más y estaba seguro de que mis piernas se convirtieron en gelatina. El miedo recorrió mi cuerpo entero, precipitándose por las venas hasta cada una de mis terminaciones nerviosas.

-tan mío -él volvió al acecho, cerrando por completo el espacio entre nuestros cuerpos.

-por favor, no- intenté no sonar como un damiselo al decir esas tres simples palabras. Él me tenía acorralado contra la pared.