Quemaduras de tercer grado

380 16 1
                                    

QUEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE!!!

Ese grito fue escuchado hasta las afueras del país del fuego.

La incredulidad de las personas era evidente, si dejar casi sorda a medio país era algo que tomar en cuenta.

Imposible! Gritó uno de los presentes totalmente indignado.

Es una maldita mentira! Gritó otro.

Alucard puso los ojos en blanco y caminó hacia la foto del cuarto, tomó un rotulador negro y le pintó tres marcas de bigotes en las mejillas.

Rápidamente las personas empezaron a ver el comando ctrl+c-ctrl+v frente a sus ojos y sintieron miedo y la mayoría negación.

Es una farsa! estás disfrazado o algo del demonio.

Naruto ahora le dió una mirada que decía "¿estás, putamente, hablando enserio?" Y después declaró -hace menos de 3 meses no podía hacer una maldita transformación decente y tratas de insinuar que puedo hacer esto incluso antes de nacer, bueno ¿tú estás pendejo o qué mihijo?

De repente Alucard tomó al niño tomándolo por el rostro detrás de su cabeza aplanando su cara redonda estirando sus rasgos hacia atrás y comparándolo justo con la foto que tenía atrás suyo. La imagen era idéntica aunque la mayor diferencia era que el niño estaba gritando de dolor porque le estaban jalando los cachetes.

Imposible dijo otro aldeano empeñado en negarse a aceptar la realidad de lo que sus ojos estaban viendo.

La identidad de los padres del niño se mantuvo en secreto para proteger lo de los enemigos del Yondaime tuvimos la intención de mantener su linaje en secreto hasta que fuera lo suficientemente fuerte como para defenderse de los más peligrosos ninjas que estaban tras la persona del cuarto y su progenie. Dijo el anciano Hokage solemnemente.

Eso es imposible! si el cuarto hubiera tenido un hijo ¿Por qué no se hizo de conocimiento general? todo esto me suena una mentira gritó alguien más.

Por la misma razón que había una ley que evitaba que se supiera informara a las generaciones más jóvenes acerca de la condición de jinchuriki de Naruto, para que pudiera tener una infancia normal, aunque ustedes se encargaron de que eso no fuera posible! reclamó el anciano.

Me niego a aceptar eso! Incluso si eres el hijo del cuarto tú sigues siendo un demonio gritó otro pendejo en negación.

De repente los ojos de Naruto tomaron un brillo rojizo.

SILENCIO! el rugido de Naruto hizo estremecer el lugar entero cuando su voz se elevó por sobre las demás.

El efecto fue instantáneo, todos sintiendo aquella sensación de hace 12 años.

Qué mierdas pasa con ustedes? Ese día no solo ustedes perdieron a alguien saben! Yo tambien perdí algo, algo mucho más importante de lo que ustedes podrían entender, perdí mi niñez, perdí mi familia, lo que realmente se siente que alguien te quiera! Al menos ustedes todavía tienen recuerdos felices de aquellos que extrañan, en mi memoria no existe nada de eso, lo único que recuerdo... Naruto bajó su cabeza mientras sus puños se apretaban y unas pequeñas lágrimas caían al piso.

La mayoría de personas sintió eso. De alguna manera esas palabras trajeron las caras sonrientes de aquellos que se habían ido, todos los momentos felices y el añoro de su compañía. Pero, rápidamente ese sentimiento cálido se volvió rabia, el problema era que dicha rabia fue totalmente sumergida por debajo del sentimiento aprehensivo que casi los derriba ahí mismo.

...Lo único que recuerdo... Es a un montón de idiotas tratándome con desprecio, culpándome por algo que jamás hice, incluso cuando es gracias a mí que siguen respirando...

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 17, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Naruto y sus DemoniosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora