Prohibido l.h

18

Cuando desperté fue por calor. Me giré y sentí como un aire tibio chocaba contra mi mejilla y entonces abrí mis ojos asustada.

Ahí estaba Luke Hemmings acostado junto a mí. Y estábamos abrazados durmiendo ya que su brazo seguía firme en mi cintura pegándome a su cuerpo.

Lucía tan sereno y guapo con los mechones rubios de cabello en su frente. Realmente era apuesto como el infierno y su cercanía me hacía temblar.

-Estoy segura que planeaste esto con Nora. -susurré. Me alce a ver el reloj de la mesita de noche dónde marcaba las cinco de la mañana.

Genial.

Ya no podría dormir.

Y aunque lo intentara estaba aquí, con Luke a mi lado y me sentía nerviosa por esta cercanía que teníamos.

Me quejé aunque fue más como un gemido al sentir que se movía.

-¿Todo bien?-preguntó con la voz ronca.

Bien... lo había despertado.

Asentí.

-Entonces deja de moverte, Hale-dijo él

-Dijiste que volverías en la mañana-susurré.

-Michael me pidió cerrar antes-respondió al mismo tono que yo.

Él se giró quedando cara a cara conmigo y abrió sus ojos. Sus ojos azules tan preciosos que me examinaban.

Dios... me acababa de percatar que estaba sin polera.

-Fue toda una sorpresa verte dormir destapada, de hecho tu camisón se había subido un poco

Mi corazón palpitaba fuerte y sentí como mi cara se volvía roja. Hasta la boca se me secó.

-Te mataré si sacaste una foto-dije.

-No saque una foto, pero si te admiré algunos minutos.

Tapé mi cara con mis manos sintiendo vergüenza.

Luke tomó mis manos y las puso en su pecho. Y lentamente acercó su cara a mía.

-¿Qué estás haciendo conmigo?-preguntó en susurro- No puedo dejar de pensar en ti.

-Estoy segura que podrías estar con cualquier chica que desees.

-Te deseo a ti.

Y sin esperarlo, tomó mi rostro en sus manos y me besó de forma apasionada dejándome derretida en sus brazos.

Yo no me resistí y lo besé con la misma intensidad que él. Podía sentir el deseo, la desesperación y las ganas de que esto pasara y entendí que yo también había deseado que me besara.

Se acomodó sobre mi cuerpo, haciendo que lo rodeara con mis piernas mientras él tocaba la piel de mi abdomen y espalda. Ambos deseábamos esto. Mierda, claro que lo deseaba.

Mis manos recorrían su pecho y se incrustaban en su pelo, atrayendo más a mí disfrutando el momento. Luke recorría con su boca mi cuello de forma desesperada como queriendo besar todo al mismo tiempo.

Cambié nuestra posición quedando sobre él entonces sentí su prominente erección rozar en mi entrepierna. ¡Oh Dios mío!

Caí en cuenta de lo que estábamos haciendo, él estaba listo para sacar mi camisón y sabía en lo que esto terminaría si yo no lo detenía.

¿Quería esto? si... pero ¿Estaba lista? no.

-Luke...-dije entre besos.

-¿Qué sucede, Hale?-dijo.