Living in a beautiful sin [Gguk Harem]

Capítulo 22

— Hiciste bien al negarte a lo que te propuso mi hermano.

Jimin se sentía aún indignado por lo que Taehyung exigió en aquel momento en que ambos hicieron acto de presencia.

— Mi hermano siempre ha sido así, si yo me intereso en algo, él lo hace igual.

Parece incapaz de interesarse en algo ajeno a mí. Siento que lo hace por joder.
Kim se detuvo para ayudar a Jeongguk a desnudarse en lo que se disponían a entrar en la ducha. Habían aprovechado que tanto Jin, Yoongi, Hoseok como Namjoon habían salido, Jin y Hoseok a cenar fuera y los otros dos cada uno con sus respectivas amistades, lo que había venido muy bien para cierta intimidad que Jimin pedía en su interior.

— Echaré el seguro de la puerta, no quiero que Taehyung pueda molestarnos.

— Está bien, hyung…

— ¿Estás asustado?

Aquella pregunta fue realizada justo después de haber cerrado tal y como dijo.

— ¿Te asusta que mi hermano también  exija tu cuerpo?

Jeongguk no contestó pero tampoco fue necesario, sus ojitos temerosos mostraban por sí solos la respuesta correcta a la cuestión.
Jimin sonrió con un poco de maldad y se acercó de nuevo al menor para calmarlo.

— Conejito asustadizo… No tienes de qué preocuparte, yo ya te reclamé como mío.

Lejos de dejar de preocuparlo, el comentario del mayor lo hizo recordar a cierta cosa que andaba repitiéndole cierto hermano mayor malhumorado acerca de la posesividad de ese chico que tenía enfrente.
El de más edad tomó al contrario del mentón y lo hizo mirarlo a los ojos para luego atacar sus labios, furioso.
No quería admitírselo a sí mismo pero a Jimin seguía molestándolo la exigencia de Taehyung hacia el menor. Había sido todo un descaro de su parte y algo totalmente fuera de lugar.

— Ahora pensemos en ese momento que me debías para el cual ya he esperado suficiente…

Tras terminar de sacar la ropa del cuerpo ajeno, él hizo lo mismo con la suya propia no queriendo esperar un segundo más para tenerlo justo como quería.
Jeon asintió en silencio dejándose guiar por el contrario que, prácticamente, estaba arrastrándolo hacia el interior de la ducha mientras su cabeza seguía pensando en Yoongi, tenía que hablar con él, lo haría, aunque en un principio no sería sobre Jimin si no sobre Taehyung. No podía permitirse que otro hermano más se uniese ‘a la fiesta’ como si él tuviese energía para todos y estómago para estar aguantando todo con lo que ahora mismo estaba conviviendo, era cuestión de vida o muerte y si tenía que terminar acudiendo a aquel chico que le ponía los pelos de punta, lo haría. Él le dijo que lo ayudaría, ¿cierto?
Su boca fue besada sin permiso justo en el momento en el que ambos entraron en la ducha. Jeongguk reaccionó algo torpe por la sorpresa, pero se dejó llevar lo mejor que pudo mientras su cuerpo era manoseado al antojo del contrario.

— Quiero verte abierto de piernas para mí, ya.

Jimin abrió el grifo con el agua ya regulada y esperó a que el menor se colocase sobre la superficie de mármol que había allí dentro, sentándose allí en una postura que convenciese al mayor quien lo miraba de la mejor manera por lo obediente que estaba siendo.

— Buen chico. —comentó situándose bajo la cascada de agua sin apartar la vista del chico. No tardó en dirigirle el agua en su dirección para que Jeon no fuera el único que estaba seco allí— Mejor mojadito, ¿no crees?

El chico no contestó, se limitó a mirar al contrario analizando cada movimiento y palabra que decía mientras trataba de contentarlo lo mejor que podía.

— Acércate, quiero que nos caiga el agua mientras te como el culo.

Asintió y se movió rápido, tanto que justo terminar de desplazarse, Jimin ya estaba allí arrodillado y listo para empezar.

«❦ ❦ ❦»

— Yoongi hyung… creo que necesito su ayuda.

La imagen de un Jeongguk con expresión de cachorro miedoso había sido lo primero que había visto tras haber abierto la puerta de su propia habitación.

— Perdone la intromisión por cierto… No era mi intención invadir su espacio personal no teniendo ninguna tarea que hacer aquí, sólo quería esperarlo en un lugar que supiese que nadie iba a molestarme.

Yoongi cerró la puerta tras haber entrado y miró al menor sin decir nada por el momento.

— No se enfade conmigo…

— No estoy enfadado. —respondió soltando algunas cosas que llevaba con él sobre su mesa de escritorio— ¿Ha pasado algo con Jimin?

Jeon bajó la vista al suelo sabiendo que Jimin también era un problema, pero no quería acusarlo por aquello de que le daba dinero a cambio de ciertos favores que el mayor necesitaba.

— Taehyung… él se enteró de lo mío con Jimin… Bueno, más o menos. Creo que no sabe todo.

— Taehyung, ¿eh? ¿Él también quiere su parte o qué? —rió aunque al menor no le hiciese nada de gracia.

— Me interesa saber si hay alguien en esta casa que no esté interesado en tu culo, Jeon.

El chico se sintió intimidado bajo la atenta mirada del contrario y su manera de decir las cosas que eran de lo más directas.

— Sé que usted me dijo que acudiera en su ayuda si tenía un problema con Jimin, pero… ¿si el problema no es con él también podría?

Yoongi se sentó en su silla de escritorio después de haber girado esta para quedar de cara al menor.

— No era lo acordado.

Jeongguk se decepcionó, creyó que no importaría demasiado que se tratara de otro de sus hermanos.

— De acuerdo… Gracias de todas formas, hyung.

Justo en el momento en que se dispuso a salir de aquella cómoda habitación, la voz de Kim lo hizo detenerse.

— Dije que no era lo acordado, no que me fuese imposible.

Los ojitos de Jeongguk cambiaron a una expresión algo más esperanzada después de oír la voz del más mayor dándole q entender que sí podría ayudarlo.

— Yo te había dicho que te defendería de Jimin porque tengo una especie de enfrentamiento con él desde hace años, pero eso no quiere decir que me dé miedo enfrentar a otro de los miembros de esta casa, ni siquiera a Jin que es mayor que yo.

— Entonces… ¿cuento con usted?

Yoongi lo observó en silencio analizando detalladamente la reacción del más joven, asintiendo al mismo tiempo que lo hacía.

— Sólo voy a pedirte un pequeño favor a cambio.

Su rostro se descompuso imaginando qué tipo de favor era.

— No te preocupes, no es necesario que uses tu culo para ello, Namjoon y yo podemos conformarnos con tu boquita.