Baby

Final: ¿Quieres ser mi novio?

Pete POV

Me despedí de los chicos una semana antes de que terminara el semestre, Kinn y Kim debían volver a sus respectivos trabajos y le prohibieron a Khun quedarse a vigilarme como castigo por el apartamento que rento para mí en primer lugar, rara vez él hacía caso a las amenazas y peleo para quedarse hasta que Kim le advirtió invitaría a todo el mundo a pasar año nuevo con él sin decirle dónde y lo tendría que pasar solo en casa con su padre.

Khun no una persona que pudieran asustar con facilidad, pero le temía más a las promesas de Kim que a las que Kinn, al segundo podía manipularlo con facilidad o solo ignorarlo, en cambio a Kim nunca podía controlarlo y decidió rendirse antes de que cumpliera sus palabras.

El apartamento estaría rentado por otras dos semanas, después me mudaría a un sitió más cómodo que podría escoger sin ayuda, Vegas me había acompañado a visitar dos edificios en los últimos días, ambos eran para estudiantes y con los graduados de este semestre había varios cuartos libres para el inicio del siguiente año, sin embargo, todos estaban al otro lado de la ciudad y no podríamos ir juntos a clases, él decía que estaba bien porque nos veríamos al llegar, pero yo no estaba muy seguro.

Por ser la última semana del semestre, los entrenamientos de natación se habían detenido, ahora Vegas salía un poco más temprano que yo y aún cuando su facultad estaba más cerca de la salida, se ofreció a ir a buscarme cuando terminaran sus clases, la única vez que se suponía lo haría terminó siendo un fiasco, pero ahora estábamos en una etapa diferente y cada que lo encontraba sentado en alguna banca esperando por mí, sentía mi corazón agitarse emocionado antes de correr a encontrarnos.

Excepto esa tarde cuando al buscarlo entre los pasillos lo vi de nuevo con ese maldito rubio que trataba de colgarse de sus brazos, su novio seguía yendo a clases todos los días, pero él tenía desde que lo golpearon en el bar sin aparecer, creía que no volvería por lo que restaba del año, no esperaba encontrarlo encima de mi amigo, que seguía sin pedirme ser novios, otra vez.

Para beneficio de Vegas, desde donde estaba parecía luchar con quitárselo de encima y alejarse, pero el tipo seguía insistiendo con el rostro lleno de lágrimas y un par de moretones que no terminaron de curarse.

―No tengo nada que hablar contigo. ―el rostro de Vegas era de pura frustración, ponía los ojos en blanco y bufaba molesto apartando las manos de Tay de él con asco. ―Basta, nada de lo que puedas decir cambia lo que hiciste.

―Tienes que escucharme, todo lo que hice, lo hice porque me importas. Quería cuidarte. ―encogí la nariz deteniendo a unos metros de distancia, no había muchas personas en la facultad ahora, era tarde y faltando tan poco para terminar el año muchos habían sido liberados de las clases, aún así, había varias personas mirándolos curiosos gracias a los alaridos del rubio.

― ¡Usaste las últimas palabras de mi madre para tu beneficio! ―gruñó finalmente Vegas empujándolo lejos, no creía haberlo escuchado gritar así antes, fruncí el ceño confundido, no tenía idea de qué estaban hablando. ― ¡Te aprovechaste de su muerte para manipularme!

―Vegas, por favor. ―los murmullos alrededor se hicieron más ruidosos y el tipo lloró con más fuerzas mientras Vegas lo miraba furioso. ―Todo lo hice porque te amo, soy el único que sabe como amarte, el idiota de Pete es solo un jodido enfermo sexual aprovechándose de que nadie conoce su pasado para llegar a ti. ―mi cuerpo se tensó y todo el aire abandono mis pulmones.

― ¿Cuántas mentiras más tienes preparadas para defenderte? ―bufó Vegas poniendo los ojos en blanco y di un paso atrás queriendo dejar de escuchar esto, podía sentir las miradas de los curiosos en mí, preguntándose si era verdad, los rumores hicieron eco en mi cabeza y la necesidad de huir de nuevo se hizo presente.