Solo digo que este fic va a ser tóxico, les advertí desde un principio espero que les guste tanto como a mi me está gustando jajajaja
Seokjin no entendió lo que estaba diciendo Kim Namjoon, ¿cómo que lo quería a él? ¿estaba loco?¿acaso perdió la cordura por completo?
-¿Está tomando medicamentos?-preguntó observando bien a este alfa que no hacía otra cosa que comportarse como un total demente.
-¿Por qué preguntas eso?-Namjoon no pudo evitar carcajearse por la pregunta de Seokjin.
Cualquiera estando en estas circunstancias estaría temblando de miedo y pidiendo piedad para que arregle todo el desastre, pero no Kim Seokjin, él explotó en ira, una que al parecer no sale con facilidad. Verlo estallar de esa forma le pareció muy divertido.
Delante de Namjoon se encuentra un beta testarudo, con una capa de misterio bien oculta tras una personalidad tranquila y amigable.
El primer día que conoció a Kim Seokjin le pareció alguien bastante simple con un talento nato, aunque debía aceptar que sus ojos le parecieron demasiado atrayentes, sin embargo algo cautivante se esconde muy en lo profundo de esa cabecita y quiere verlo directamente, así como quiso ver el proceso creativo de sus esculturas.
Lo que hizo para tener la visión detallada no fue legal, estaba plenamente consciente que colocar cámaras ocultas en el estudio de Kim Seokjin era un delito pero eso no lo detuvo para hacerlo de todas maneras.
Lo observó por días y no fue mucho lo que pudo ver. Kim Seokjin entraba a su estudio y esculpía pequeñas obras de arte, muy hermosas pero no fue algo interesante o eso pensaba hasta que sucedió algo impresionante.
El día de la fiesta en casa de Jungkook supo que se encontraba tras esas puertas del armario. Por la pequeña abertura esos ojos dorados brillaron intensamente. En su mirada pudo ver asombro, vergüenza y timidez, lo que lo obligó a jugar un poco, luego detectó algo más interesante tras esas emociones comunes, halló pasión, y un deseo arrollador se arrastraba en esos orbes dorados, unos preciosos ojos que mantienen esa mezcla de inocencia y sensualidad combinadas a la perfección.
Lo que no imaginó fue que Seokjin transportaría todo eso en una escultura.
Quería jugar un poco con Seokjin, pero sabe que no le va a dar una oportunidad. Tiene delante de él un beta tradicional, quien seguramente solo ha tenido relaciones serias y muy estables de años, algo que ni en sueños le puede ofrecer por lo que está recurriendo a métodos poco comunes para obtener lo que tanto quiere.
Mientras más lo observa más desea tener de Seokjin esa lujuria y esa pasión con la que esculpió la figura de ambos desnudos entrelazados. Verlo de esa forma con esa mirada perdida realizando algo tan erótico produjo un anhelo demasiado firme como para ignorarlo.
Podría haber mentido para seducirlo pero eso no es divertido, quiere que sepa quién es y qué es lo quiere y a pesar de eso lo escoja, que se doblegue ante sus deseos y sucumba ante la lujuria y para ello lo necesita cerca, muy, muy cerca.
-¿Entonces aceptas ser mío?
-Señor Kim, agradezco mucho su ofrecimiento pero me temo que voy a desistir esa proposición.
-Creo que se confunde, no pretendo ser su amante-rie Namjoon sabiendo que es lo que en verdad quiere, pero por el momento lo niega-quiero que haga una escultura en mi casa, en mi habitación.
-No realizo esculturas en casas, oficinas, edificios o algo parecido-responde Seokjin tajante.
-Sabía que respondería eso, por ello realice todo este espectáculo, si hace lo que le pido todo este problema será eliminado por completo. Además claro de tener una pequeña venganza a tanto rechazo de su parte...verá, no me gusta que me digan que no.
-Redacte un contrato, luego lo debe enviar a mis abogados y si me dan el visto bueno firmaré-accedió Seokjin.
Para Seokjin no tiene caso pelear con semejante alfa mimado, haría su estúpida escultura en su casa, luego desaparecería de su vida para siempre.
-No me ha entendido Seokjin-dice Namjoon petulante-está en mis manos en este momento y no pienso hacer nada hasta obtener lo que quiero de usted, entonces hasta eso, usted tiene dos opciones. Hacer todo lo que le digo o ir a prisión.
Seokjin ríe colocando ambas manos en su rostro. Todo esto no tiene sentido se dice a sí mismo. no puede creer que toda su vida esté en manos de este idiota.
-Entonces iré a la cárcel-escoge en un arranque de ira para luego ponerse de pie e ir con los policías para que lo lleven a una celda o a donde sea que deban llevarlo.
Luego de unos días en lo que Seokjin estaba esperando su juicio, Tahyung fue a verlo para suplicarle que acepte el trato de Kim Namjoon.
-Solo haz lo que te pida y todo acabará, ¿cuánto tiempo necesitas para hacer una escultura en su habitación? Menos de un mes supongo o tal vez más de un mes, pero solo son algunos días, soporta eso unos días, pero por favor no arruines tu vida.
Seokjin no dijo una palabra observando a su representante al otro lado del vidrio en la sala de visitas del centro de detención a donde lo llevaron. Dijo lo que dijo a ese alfa en un ataque de ira y ahora estaba arrepentido, pero no estaba seguro de cómo retractarse sin perder su dignidad, por lo que sabe es lo único que le queda en este momento, ya que todas sus cuentas se encuentran congeladas hasta que termine su juicio.
-Dile que acepto el trato-dijo en un susurro sin querer hablar más alto, sin embargo solo eso bastó para que Taehyung salga volando de ese lugar-espero no arrepentirme de esto-se dijo a sí mismo cuando un policía lo llevó a su celda.
Desde que salió del centro de detención Seokjin se sintió como un vagabundo, solo tenía una pequeña maleta en su mano a la espera de que lo recogieran y cuando eso pasó se encontró con la desagradable sorpresa de que el mismo Kim Namjoon fue a verlo.
-¿No está ocupando arruinando la vida de las personas? No tenía que molestarse en venir por mi-dijo cuando entró al auto en los asientos traseros.
-No es necesaria tanta grosería-dijo Namjoon observando a Seokjin de mal humor en la parte trasera del auto.
-En ningún momento dijo que debía ser amable con usted y prefiero ser lo más insoportable posible. ¿Por qué no avanza?-preguntó viendo que seguían en el estacionamiento.
-No hasta que vengas adelante-respondió Namjoon sin una pizca de diversión en su voz-¿soy tu chofer acaso?
Seokjin no dijo una palabra y decidió quedarse en el asiento trasero, sin embargo eso no duró cuando Namjoon abrió la puerta trasera y lazó las llaves a su regazo.
-Conduce tú, ahora.
-Soy su escultor personal, no su chofer-respondió Seokjin tomando la llave para tirarla al suelo.
-No olvides que tengo tu vida en mis manos, si no quieres hacer lo que digo ahora mismo puedes volver a la celda de donde saliste.
Seokjin lo miró por un momento y no vio ni una mínima posibilidad de que estuviera mintiendo o diciendo esa advertencia en forma de una amenaza simple, al parecer estaba hablando muy enserio y pese a que estuvo a punto de salir del auto y pedir que lo regresen a su celda, decidió bajar, tomar las llaves del suelo y conducir.
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Canario Dorado (Namjin)
FanfictionEn un dia lluvioso él llegó a la vida de Kim Seokjin, con su mirada seductora, voz profunda y atrayente lo deslumbró por completo, más aún el conocimiento de dejarse llevar por la esencia de un alfa que no estaba dispuesto a tomarlo en serio lo puso...