30

167 26 9
                                        

Durante las mañanas siguientes Namjoon se tornaba distante o eso parecía, decía palabras dulces pero a la vez con un tono frío y las caricias que en ocasiones extrañas se le escapaban cada vez que pasa cerca de Seokjin no debería ser especial, no obstante le resultan cálidas.

Cada cosa que realizaba le parecía contradictorio, algunas veces lo miraba como si fuera algo hermoso y preciado y en otras ocasiones su mirada se perdía en alguna parte. Pensó que una vez de regreso podrían pasar algún tiempo juntos, sin embargo apenas lo veía por ahí, a veces no llegaba a dormir, supuso que era por trabajo entonces no dijo nada y tampoco preguntó.

Sus mensajes no dejaban de llegar en casi todo momento y a veces no llegaban por horas, decidió no prestar atención a esa tontería y se encerró en su pequeño estudio para esculpir.

Pasaban las horas y por más que intentaba concentrarse en hacer su trabajo se distraía fácilmente en Namjoon, preguntándose qué estaba haciendo y si estaba bien, si ya había comido y ese tipo de cosas. Al ver que su cabeza estaba tan lejos de donde debería estar, decidió ir al jardín y pensar en nada más que en su escultura y al regresar vino su tan anhelada inspiración.

No supo cuánto tiempo pasó dentro del estudio y para cuando salió ya estaba anocheciendo. Esperó tener el aroma de comida recién echa, estaba tan hambriento como un león y en su camino al comedor un muy malhumorado Namjoon lo estaba esperando en la sala con su celular en la mano. ¿De dónde lo había sacado? Estaba seguro que lo tenía en el estudio o eso pensó.

-¿De qué te sirve tener este aparato y conexión si no puedo contactarte?

-Estaba trabajando-fue una respuesta bastante directa y razonable, pero no fue suficiente o no fue la respuesta que Namjoon esperaba o eso es lo que parece.

-Quería invitarte a cenar, reservé un bonito lugar y no pude hallar a mi acompañante, te traje comida está en la cocina, voy a dormir.

Seokjin no dijo una palabra, estaba atorado en su garganta un no fue culpa mía, estaba trabajando que es para lo que estoy aquí, no puedes disponer de mi siempre que se te antoje y nada de ello cruzó la barrera de sus labios. Si decía algo como eso las cosas se pondrían peores y no quería discutir, al menos no esta noche, en verdad estaba cansado y solo quería comer y dormir.

Los siguientes días fueron peores, Namjon no puso un pie en casa y no lo contactó para nada. Tal vez debió disculparse pensó mientras a su lado Jimin estaba diciendo un montón de cosas respecto al color de las flores que quería en la recepción.

-¿Me estás escuchando?

-Sí, te escucho.

-Dije que no debía comprar flores porque eran mejor los globos, unos llenos de helio de colores fosforescentes y brincolines, ¿te parece si contrato un payaso?

-Lo que tu quieras está bien-responde distraído observando por milésima vez su celular.

-No me estás prestando atención por ver este estúpido celular-reprende Jimin tomando el celular de sus manos-¿desde cuando prestas más atención a este aparato? Normalmente olvidas su existencia.

-Estoy esperando una llamada, eso es todo-miente caminando a la parte donde se encuentran las rosas.

Jimin observó por mucho tiempo a Seokjin, no era de los mentirosos por ello le es difícil mentir y por lo mismo es fácilmente atrapado. Desde hace tiempo estaba actuando extraño, parecía distraído y su mente volaba en otra parte, claro, siempre fue algo como eso, pero no tanto, ahora es como si estuviera siendo perseguido por algo dentro de su cabeza.

Teniendo la esperanza de que le dijera lo que le pasa alguno esos días no presionó y solo hizo que se relaje un poco o eso esperaba hasta que inesperadamente un horrible alfa entró por la puerta y en ese momento los peores pensamientos de Jimin tomaron forma, cuando observó a Seokjin sonreír tan brillantemente al ver a Kim Namjoon, y esa mirada de devoción.

-Oh mi Dios-dijo en voz baja esa mirada no se disimula.

El dinero y el amor son dos cosas que no se pueden ocultar o eso dicen, Jimin no entiende muy bien ese dicho, pero de una cosa si está seguro y es que Seokjin acaba de cometer el peor error de su vida. ¿Acaso no ve lo idiota que es ese alfa?¿Cómo se puede enamorar de alguien que literalmente destruyó su vida?

Al regresar al departamento que comparte con Yoongi estaba tan distraído que olvidó por completo el catálogo de arreglos florales que debía llevar para que Yoongi pudiera decidir cuál arreglo quería.

-Debías hacer una cosa Park, una sola cosa y ahora mismo tengo una reunión que seguramente va a durar años, al menos esperaba poder escoger los arreglos florales mientras estaba en eso y ahora...¿Me estás escuchando?

-No escuché nada, perdón.

-¿Qué te sucede?¿pasó algo malo mientras fuiste a la florería?

-Pasó algo, sí, y es algo muy...no sé cómo describirlo.

-Solo dijo-animó Yoongi tomando una de sus manos para llevarlo al sofá. Adoraba cuando Jimin estaba pensativo, se dejaba guiar a donde sea y era tan dócil y tierno.

-Seokjin, mi lindo Seokjin se ha enamorado del peor alfa y ser humano del mundo.

-No creo que sea para tanto, ¿de quién se ha enamorado?-preguntó mientras colocaba un mechón de cabello tras su oreja.

-De Kim Namjoon.

-Eso es bastante malo, oh por Dios pero en qué está pensando, ¿acaso se ha vuelto loco? Kim Namjoon no quiere a nadie, es el ser vivo más egoísta del mundo, le va a romper su corazón y no solo eso, lo va a dejar arruinado, va a acabar con él por completo.

-¿Crees que Seokjin sea consciente de eso?-pregunta asustado Jimin al escuchar lo que dijo su prometido-debería decirle.

-Creeme que es totalmente consciente, no hay nada que puedas hacer si ya ha desarrollado sentimientos por se idiota.

-¿Cómo que no puedo hacer nada? Tengo que sacarlo de ahí, yo debo hacer algo Yoongi.

-No, no puedes, créeme que no puedes hacerlo.

Entonces la mirada de Yoongi se oscureció, Jimin jamás había visto esa mirada tan sombría en su prometido. Parecía que varios recuerdos demasiado dolorosos estuvieran tras de ellos. Estaba ansioso por preguntar pero cuando puso distancia física supo que no era el momento.

-Solo debes estar ahí para recoger sus pedazos, nunca lo dejes solo y escuchalo siempre que puedas, es lo único que puedes hacer y rezar para que sea fuerte, lo suficiente como para salir solo de ahí.

¿Pero qué carajo estaba pasando? quería averiguarlo, no obstante sabe que de Yoongi no va a obtener ni una sola palabra. Sabe que puede manipular sus sentidos lo suficiente como para que le diga, pero no le parece correcto hacer eso, entonces va por otra vía un poco menos ética. Al menos no iba a manipular a Yoongi.

-Tengo un amigo que puede averiguar la vida de una persona desde que nació, entonces deberíamos investigar al Señor Kim Namjoon y saber sus más oscuros secretos-ríe Taehyung sacando su celular y haciendo una llamada.

Canario Dorado (Namjin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora