En el jardín bajo las flores de un árbol, Seokjin tomó un par de ramitas del suelo y las empezó a unir para hacer un pequeño muñeco al igual que cuando era niño y no tenía nada más que ramas y lodo para jugar. Dicen que debes regresar a tus orígenes para recuperar lo que has perdido en el camino y eso es lo que llevó a Seokjin a tomar un cubo de agua y hacer un pequeño charco de lodo en el jardín.
Con cuidado empezó a hacer figuras de barro y algunas figuras con ramas, hizo algunas casitas pequeñas y muñecos algo tétricos y mal formados pero que le resultaron graciosos.
En pocos minutos tuvo una pequeña aldea de duendes bajo el árbol, entonces tomó los muñecos para colgarlos en las ramas y los dejó ahí para luego ir a trabajar nuevamente en la escultura de la habitación de su empleador.
Por la mañana ya habían llegado por fin las bolsas de yeso para empezar a hacer su escultura y como lo hizo con el lodo en el jardín, tomo cubos de agua para hacer la mezcla, ordenó tambien a los empleados de Kim Namjoon retirar la cama e inició con las primeras molduras.
No estaba seguro de que es lo que iba hacer pero empezaría por el fondo, hizo un marco precioso de muchas flores y enredaderas, por lo que ha visto hasta ahora y por el hermoso y bien cuidad jardin, pudo suponer que a su empleador le encantaban las flores y plantas por lo que decidió hacer un fondo precioso de naturaleza.
Eso le tomaría una semana aproximadamente, solo si descansaba solo para dormir, la pared es enorme, mide tres metros de altura y unos cinco de ancho.
Estaba preparado para terminar con su tormento, entonces tomó sus herramientas y colocó música a todo volumen. Mientras las notas musicales viajan por todas partes Seokjin se envuelve dentro de su imaginación, dando forma a la imagen que tiene en su cabeza, sus manos viajan por aquí y por allá moldeando junto con pequeñas espátulas y el tiempo a su alrededor de pronto se mantiene estático en un bucle donde nada más que el arte que está tomando forma y él son partícipes.
Aquella sensación de olvidar todo por un momento y solamente sentir la suavidad entre sus manos, dedos y herramientas lo engulle y así sin darse cuenta la noche ha aparecido por el horizonte y el sonido de pasos a su espalda se pierden entre la música que no se ha detenido desde la mañana.
Sin darse cuenta sus pies han abandonado la escalera en la que estuvo parte de la mañana y ahora en el suelo le está dando un último toque a un bonito rosal cuando de repente su mano es detenida.
-Suéltame-dice con voz provista de un intenso tono furioso y cuando alza su mirada observa con sumo enojo a quien se atrevió a detenerlo.
-Ya es medianoche-entonces la voz de Kim Namjoon cansada y suave cuelan por sus oídos y solo entonces da un paso atrás.
-Lo siento no me di cuenta de la hora-se disculpa rápidamente para tomar sus cosas con rapidez para irse pero es detenido.
-Antes de que te marches me gustaría saber donde has puesto mi cama.
Namjoon observa divertido a la fiera en la que se convirtió Seokjin transformarse en un bulto nervioso sin palabras o al menos parece tratar de encontrar algunas en alguna parte de su boca.
-Yo no lo sé, mande a retirarla para poder empezar con la escultura, pero no tengo idea donde la pusieron.
-¿Y se supone que duerma en el sofá?
-Hay otra habitación en la que puede dormir-sin querer Seokjin dijo eso con algo de ironía en sus palabras, acto que no pasó desapercibido.
-¿Te parece que yo duermo ahí?-pregunta Namjoon absolutamente serio retando a que le dé una respuesta.
-Supongo que no la usa para dormir.
-Supones bien, pero aún sigues sin responder, ¿dónde se supone que duerma esta noche? en este lugar no creo que pueda, el olor del yeso es muy fuerte.
-Debe tener más habitaciones de huéspedes, además esta habitación no iba a estar disponible una vez que yo empezara con la escultura, usted debió tener una habitación dispuesta para usted con antelación-se defendió Seokjin sumamente molesto, este tipo de nimiedades no es algo de lo que él debería hacerse cargo- además le agradecería que no me interrumpa cuando estoy haciendo mi trabajo, no si quiere una escultura bien hecha.
Por un momento Seokjin pensó en retirarse pero ahora no estaba dispuesto a hacerlo por lo que dejó sus materiales donde estaban en una mesita y prosiguió con la escultura.
La música seguía sonando y cuando volteó la mirada Kim Namjoon ya no estaba, aliviado al estar nuevamente solo prosiguió, sin embargo al cabo de unos momentos un pequeño refrigerio apareció en la mesita donde estaban sus materiales.
Seokjin no estaba prestando atención y solo comió lo que estaba en la bandeja mientras observa lo que está hecho pensando en qué más puede hacer, entonces toma los bocetos que hizo antes y observó algunos para proseguir en la parte inferior.
En la habitación iluminada totalmente por luz artificial Seokjin moldeaba cientos de pequeñas flores en la base de la pared mientras Kim Namjoon se mantiene sentado en el suelo observando asombrado y muy intrigado a Seokjin, ayudando de vez en cuando en el momento en el que el beta no encontraba alguna cosa en todo el revoltijo que era el suelo. Con el tiempo Namjoon se dio cuenta de que el beta no se daba cuenta de que lo estaba ayudando, parecía tan inmerso en lo que hacía que todo a su alrededor parecía desaparecer y en ese instante el gran Kim Namjoon quiso ser parte de ese mundo, quiso que lo observe también.
En la madrugada Seokjin al fin sintió el cansancio de sus pies y se derrumbó en el suelo colocando sus manos en su frente y observando lo que hizo en todo el día y toda la noche. Todo estaba como se lo había imaginado y no podía estar más feliz por ello y fue entonces cuando observó a cierto alfa dormido a medio metro de donde estaba moldeando un arbusto.
-¿Pasó aquí toda la noche?-se preguntó en voz baja pensando en que por esa razón fue que había encontrado sus herramientas cuando las necesitaba.
-Me parece realmente asombroso la capacidad que tienes para meterte en tu pieza y no ver lo que pasa a tu alrededor, podría hacer un terremoto y tú no lo sabrías-dijo Namjoon con los ojos cerrados

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Canario Dorado (Namjin)
Fiksi PenggemarEn un dia lluvioso él llegó a la vida de Kim Seokjin, con su mirada seductora, voz profunda y atrayente lo deslumbró por completo, más aún el conocimiento de dejarse llevar por la esencia de un alfa que no estaba dispuesto a tomarlo en serio lo puso...