63. El topo

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-Te digo que es lo que pienso.- Dice Garp mientras come una galleta

-No es que no lo considere pero... ¿De verdad alguno de ellos podría hacer algo así? Quiero decir, conocemos a casi todos en este lugar a la perfección, no veo que ganarían traicionándonos.- Responde Sengoku recargando su cabeza en ambas manos

-La codicia es un arma muy fuerte, director...

-...

¿Acaso habrá un traidor?

...

Mientras tanto, en el mismo almacén de aquel muelle, la misma sombra encapuchada se dirigía rápidamente intentando no ser vista por nadie, del mismo modo, se acercó sigilosamente a la entrada y tocó un par de veces para llamar la atención, recibiendo casi de inmediato la respuesta de aquel hombre corpulento de antes.

-Llegas tarde, el jefe no tiene todo el tiempo del mundo y lo sabes

-Lo lamento, el toque de queda se pospuso mucho, no sé por qué.- Dice quitándose la capucha, como era de esperarse, se trataba de Hancock

-¿Enserio? Que interesante

La chica sin más pasa, observando que todos los presentes se encontraban más... ¿Agitados? de lo habitual, se insultaban y apresuraban constantemente, y la mercancía se movía como pocas veces. Pero decide reservarse sus preguntas, sabía que no era de su incumbencia. 

Hancock llega hasta la misma puerta, y al abrirla encuentra a Teach mirando fijamente a la ventana, con un vaso de licor en su mano, se le veía absuelto en su propio mundo.

-Ujum.- Tose la chica para llamar su atención.- Traigo el pago

-Ah, eres tú... llegas tarde 

-Lo lamento, extendieron el toque de queda, y no sé por qué pero creo que cada vez es más difícil salir

-Hmm ¿Crees que sospechan algo?

-Ni idea, el ha sido uno de sus elementos más importantes y hasta ahora me ha ayudado a ir y venir del colegio sin mayor problema durante el periodo escolar... y no creo que hayamos dejado rastros 

-Zehahahaha, bueno, después de todo, que un almirante traicione a la Marina es poco creíble, pero no imposible. ¡ZEHAHAHAHAHA! Mira Hancock

-¿Eh?

-¡Mira todo lo que he conseguido por mi cuenta! Hace tantas décadas cuando no era más que un mocoso que perdió a sus padres... que vivió en la pobreza extrema, y ahora... ¡Tengo tooodo lo que quiera! ¡HE CREADO UN GRAN IMPERIO! ¡SOY INVENCIBLE! ¡ZEHAHAHAHAHA!

-¿Bebiste?

-¿Qué?

-Escucha, Marshall... solo... ten el pago y ya 

-¿Por qué lo haces?

-¿Qué?

-Pagar por la protección de esos Monkey... ¿Amor? El mocoso ni siquiera te corresponde 

-No lo entenderías

-Explícame 

-Tsk, solo... solo ten el dinero y ya 

Pero ante esta respuesta, la pelinegra recibe una fuerte bofetada que la tira al suelo y le deja una gran marca roja en la cara.

-¡NO ME VUELVAS A HABLAR DE ESA FORMA, PERRA!

Hancock no dice nada, solo se coloca la mano en la zona golpeada con los ojos llorosos.

-Zehahahaha, aunque eres hermosa... no eres más que otra ricachona del montón... Zehahahaha... La gente normal no me interesa, que vivan sus vidas insignificantes, pero... cuanto más y más escalas en la pirámide, menos lugar hay... Y el dinero necesario para subir hasta la cima... todo ese dinero ¡LO ACAPARAN USTEDES!- Dice para después patear a la chica en el abdomen, haciéndola escupir su saliva a chorros

Mi soldado rebelde (LuffyxNami) LuNaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora