Mi soldado rebelde (LuffyxNami) LuNa

10. Familia

"-¡Me muero porque acabe esta semana!" 

Esas palabras de Nami parecía que hubieran sido como un adelantador de tiempo, pues los dos días restantes habían pasado en un abrir y cerrar de ojos, y tras un sábado algo pesado, y un domingo de fastidio ya que la pelinaranja había perdido su privilegio de ir en ropa normal ese día, finalmente el lunes llegó, y tanto Luffy como Nami lo saben.

Y así, nada más el descanso llegó ambos ansiosos corrieron el uno hacia el otro, intentando ocultar su emoción por verse, no sabían porque, no sabían el cuando, pero tenían ganas de hablar sobre muchas cosas, parecía como si ambos quisieran arreglar todos los desastres entre ellos de una vez por todas.

La plática de ese día fue extensa, graciosa y a la vez interesante, ambos llegaron a distanciarse más de la cuenta de sus amigos y amigas cada uno, pero estos últimos sabían que era como una especie de reconciliación de amistad para ellos dos, por lo que decidieron no interferir en eso, ambos se veían felices. 

...

Las platicas entre estos dos habían sido constantes, primero fueron días, luego semanas y sin darse cuenta habían pasado ya tres meses, muchas cosas se acercaban en esa época en Noviembre. La Navidad, las vacaciones, la desastrosa entrega de boletas del semestre, entre muchas más. 

Cada vez que finalizaban clases la rutina era lo normal, el grupo sombrero de paja se reunía, en estas ocasiones todo el grupo se hallaba, a Nami le sorprendió lo "únicos" que eran los amigos de Luffy, o como ella los llamaba, su nivel jerárquico actual. Entre los más sobresalientes estaba un chico de cabello verde limón y con perforaciones en su nariz llamado Bartolomeo, después estaba un chico rubio que era muy hermoso, tanto así que incluso superaba la belleza de ciertas mujeres, su nombre era Cavendish, después estaba un chico de primer semestre, de cabello rosa y su nombre era Coby, el tomaba mucho a Luffy como su ejemplo a seguir, entre muchos otros. 

Ciertamente no cambiaron mucho las cosas, solo que ahora Luffy y Nami convivían mucho más seguido, esos meses adquirieron una conexión que los hacía sentirse felices el uno con el otro, hablaban de cualquier tema, y muchas veces Luffy le pedía ayuda a la pelinaranja con sus tareas, ya que el pobre de Sanji estaba harto de hacerlo siempre en las noches cuando podía aprovechar para "vigilar" el baño de mujeres, o eso es lo que le dijo a Luffy, quién no entendía porque después de decirle eso Nami fue directamente a darle una tunda de las buenas al rubio.

Sin embargo... algo que se les hacía interesante a todos es que a pesar de que llevaban tres meses hablando, casi nada sabían el uno del otro sobre sus detalles personales, sus sucesos del pasado o los nombres de sus familiares, Nami se dio cuenta de esto, ella dijo que quería conocer mejor a Luffy para saldar su deuda con el, y por supuesto que iba a comenzar con eso.

...

-Muy bien... ¿en que año llegó Hernán Cortes? 

-Esto... ¡Ah si! en el año quince mil diecinueve 

-¡Ni siquiera hemos llegado al año diez mil!.- Exclama Nami enojada

-Hay perdón, creía que me ayudabas para los exámenes finales, no a gritarme

-Es lo que hago, malagradecido, llegaron en 1519, recuerdalo bien Luffy, esto es fundamental para Historia Universal

-Shishi, descuida, confía en mi  

-(Si claro).- Piensa la chica

-Bien, entonces... ¿que quieres hacer ahora?

Nami queda en silencio, era la hora.

-¿Nami?.- Pregunta el pelinegro 

-Bueno... estaba pensando en. ¿Que dice tu familia?

-M-Mi familia... ¿Mi familia?