9- Habitación del bebé 🛏

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Colombia y Corea estaban emocionados por la llegada de su bebé y habían decidido mantener el género como una sorpresa. Por esa razón, decidieron decorar la habitación del bebé con colores neutros, principalmente blanco, para mantenerlo simple y elegante. Aunque para algunos podría parecer aburrido, para ellos representaba una pequeña sorpresa que pronto se llenaría con la personalidad y la alegría de su hijo o hija.

La habitación del bebé estaba cuidadosamente organizada y lista para recibir a su pequeño milagro. La cunita blanca estaba colocada en el centro, lista para dar la bienvenida al bebé en su nuevo hogar. A su lado, se encontraba un cambiador con una suave almohadilla para que Colombia pudiera cuidar y mimar a su bebé con comodidad.

Colombia: (acariciando la cunita) Es tan hermosa, Corea. Imagino a nuestro bebé durmiendo plácidamente aquí.

Corea: (sonriendo) Sí, estoy seguro de que se sentirá cómodo y seguro en su cunita. No puedo esperar para verlo o verla allí.

En el rincón de la habitación, había un armario que esperaba ansiosamente ser llenado con la ropita para el bebé. Por ahora, estaba vacío, pero Colombia y Corea sabían que en el futuro se llenaría con prendas adorables y coloridas para su pequeño.

Colombia: (con entusiasmo) Pronto este armario estará lleno de ropita para nuestro bebé. ¡Será tan emocionante elegir sus atuendos todos los días!

Corea: (riendo) Definitivamente será emocionante. Tendremos tantas opciones y estará siempre adorable.

En un rincón de la habitación, había unos cuantos juguetes y adornos, como un caballito de madera, algunos peluches y un móvil con pequeñas estrellitas. Eran detalles sencillos pero llenos de amor, esperando el día en que el bebé llegara para jugar y explorar su pequeño mundo.

Colombia: (mientras acaricia el caballito de madera) Estos juguetes son solo el comienzo. Pronto llenaremos esta habitación de risas y alegría.

Corea: (tomando un peluche suavemente) Así es. Y me encanta pensar en todos los momentos divertidos que tendremos aquí con nuestro bebé.

En un rincón de la habitación, había una cesta de ropa sucia lista para ser utilizada. Colombia imaginaba los pequeños conjuntos que pondría en esa cesta, llenos de recuerdos de aventuras y días felices.

Colombia: (con una sonrisa cariñosa) No puedo evitar emocionarme al pensar en todos los recuerdos que crearemos aquí. Será un lugar lleno de amor y cuidado.

Corea: (tomando la mano de Colombia) Definitivamente será así. Y estoy tan agradecido de estar compartiendo este viaje contigo, mi amor.

Colombia y Corea se abrazaron, sintiendo la emoción y la felicidad de preparar la habitación del bebé. Sabían que pronto estarían llenando cada rincón con el amor y las risas que su pequeño traería a sus vidas.

La habitación del bebé era más que un espacio físico, era un lugar donde sus sueños y esperanzas se entrelazaban con el amor que compartían. Juntos, Colombia y Corea esperaban ansiosamente el día en que finalmente conocerían a su bebé y comenzarían una nueva etapa de su vida como familia. Con cada día que pasaba, su emoción crecía, sabiendo que su pequeño milagro traería consigo la más pura y hermosa alegría.

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