No Soy Tuyo, Gatinho || Guapoduo || (Omegaverse)

17.-

Cellbit llegó casi sin aliento al hospital, y apenas el enfermero de guardia le había dicho dónde estaba Forever volvía a correr doblando la esquina y viéndolo sentado junto a un chico joven. Tenía los ojos cerrados y la cabeza recostada en la pared detrás de él. Su expresión era sombría.

Sabía por el lazo que los unía que su pareja no había muerto, o sino, él no estaría de pie, pero dedujo que su estado no era nada bueno como para que su amigo estuviera así. Forever lo sintió y abrió los ojos frunciendo el ceño al verlo.
Se levantó y caminó hasta ponerse delante de él. Sus feromonas alfas inundaron todo el lugar mostrando su rabia y las de Cellbit respondieron en respuesta. Era un instinto natural de alfas rechazar a otro alfa aún si eran amigos desde hace mucho.

-¿Sabes la única razón por la que no te golpeo?- Forever dijo gruñendo- porque necesito que estés en tu mejor estado para cuando él salga de la sala-

-¿Qué le pasó?- Cellbit ignoró sus palabras, sólo estaba interesado en su pareja.

El ambiente seguía tenso y BBH, se sintió asustado y sofocado por las feromonas. Se dejó caer contra el brazo de su alfa y lo abrazó jadeando.
Sólo cuando este se dio cuenta del daño a su cuerpo y su estado de sumisión impuesto, inconscientemente bajo la cabeza y suprimió sus feromonas.

-Ya pasó menino- Forever se inclinó para abrazarlo, tomándolo en los brazos después, sentándolo nuevamente y arrodillándose ante él. Su cabeza se mantenía agachada y temblaba.

Por eso no le gustaba molestarse delante de él. Él era demasiado fuerte en cambio el menor era la otra punta de la cadena. Era un omega que sucumbía ante la raza opuesta rápidamente. Eso le había traído problemas en su vida por lo que apenas interactuaba con las personas más de lo necesario. Forever le sacudió la cabeza y tocó su mejilla. Los ojos de él estaban desenfocados pero comenzaba a recobrarse.

Una vez que su estado estuvo más estable se incorporó y enfrentó nuevamente a Cellbit que no había hablado en esos minutos. Ya estaban más relajados y podían hablar más civilizadamente por el bien del joven cerca de ellos.

-Tu omega está en estado crítico- dijo el alfa de forma fría -Su cuerpo está realmente débil. La desintoxicación ha sido muy violenta a pesar de que no mostraba indicios externos, pero por dentro es todo un caos. Además, creaste un lazo durante tu celo y lo expusiste a tu Voz de alfa justo después, eso estimuló su parte omega más rápido de lo que debía. Incluso ha estado sometido a mucho estrés-

Esta vez fue Cellbit el que tembló, apenas y podía decir algo. No se imaginaba que Roier estuviera sufriendo tanto. La culpa lo atacó de nuevo, deprimiéndolo. Forever aún así no tuvo piedad, no había terminado, era mejor decirle todo por si ocurría lo peor.

-Cuando Roier se escapó, fue atacado por alguien- un rabia salvaje recorrió al alfa más joven, se contuvo, pero tenía ganas de estrangular a quien fuera que hubiera puesto las manos encima de su amado- BBH lo salvó por suerte- señaló con la cabeza al chico que había puesto su frente en la cadera masculina sintiéndose protegido ahora que él no estaba agresivo- Cuando me llamó no me imaginé que fuera él, ni que estuviera tan grave-

-Forever no des más vuelta, ¿qué le está pasando?- las palabras que le había dicho cuando descolgó el teléfono aún resonaban en su cabeza.

-El corazón de tu omega está fallando -Forever se demoró en seguir con la segunda parte-
Antes de que llegaras, fibriló y tuvo un paro cardiaco. Se necesitó de reanimación y casi no lo consigue-

Cellbit pudo jurar que su mundo dio vueltas porque necesito de la ayuda de su amigo para sentarse y mantenerse derecho. Su pareja destinada, su guapito, el joven con el que había hecho un lazo, casi había muerto, más bien, había estado muerto por a saber cuanto tiempo.
Sabía que por lo poco que habían creado su unión y por la confusión de él era difícil que se hubiera solidificado y casi no pudiera sentir nada. Pero aún así deseó tener un poco del dolor de él.