Liv:
— Blake? ¿Estás bien? — mierda había matado a mi ¿novio? No habíamos hablado nada de ese tema, pero se daba a entender, ¿no? NO DEBERÍA ESTAR PENSADO EN ESO AHORA MISMO. Dios mío había matado a Blake.
Entonces un gruñido llenó la sala y solté el aire que había estado conteniendo sin siquiera darme cuenta.
— Estoy bien... — dijo Blake con voz ronca desde su celda. — Más o menos. Tengo ganas de vomitar.
Me derrumbé en mi celda, las rodillas me habían fallado. Ya no me quedaba ni un solo ápice de energía y yo también tenía ganas de vomitar.
— ¿Te encuentras bien? — dijo Archy con un tono de duda en su voz.
— Si, dadme un segundo — escuchamos como se incorporaba hasta sentarse en la celda. — Eso ha sido intenso.
— ¿Puedes probar a invocar algún poder? — dije yo impaciente por ver si había funcionado. Era la primera vez que usaba este poder así que había la ligera posibilidad de que no hubiese salido bien.
Sin decir nada, una ligera llama iluminó toda la celda de Blake. Esta salía de la palma de su mano. Estaba sentado en el suelo de su celda con las piernas estiradas delante de él. Era increíble y como si me leyese la mente.
— Esto es increíble — él la miraba aún sorprendido. Supongo que ser feérico tenía sus cosas buenas después de todo. — Quizás pueda probar a derretirlas como hiciste tú en la academia. — dijo Blake atravesando su mano con la llama por los barrotes para conseguir alumbrarnos un poco.
— Emmm — dijo Archy sacando una mano entre los barrotes como si así pudiese parar el avance de la llama. — creo que es mejor que uses algo menos volátil.
La llama desapareció de repente de la mano de Blake y nos volvimos a quedar a oscuras por cuarta vez consecutiva.
— ¿Qué propones?
— ¿La tierra?
Ni siquiera yo tenía alguna idea de como usar la tierra para abrir esta celda. La sala volvió a quedarse en silencio un momento cuando el barrote de la celda de Blake comenzó a brillar con un color rojizo. En ese momento un sonoro chasquido llenó la estancia.
— La puerta se ha abierto. — dijo Blake con toda la calma del mundo.
Una ligera llama volvió a brotar de la palma de su mano iluminando toda la sala mientras Blake abría la puerta y salía de la celda. No había llegado a derretir los barrotes. La celda se había abierto sola como por arte de magia.
Blake no había salido por completo de la celda cuando escuchamos un grupo de pasos bajando las escaleras. Blake volvió a meterse rápidamente en la celda pero dejando la puerta apoyada en vez de cerrada.
Dos guardias entraron escoltando a Josh, Mark, Gon, Serena e Ian. Todos ellos con las manos atadas a la espalda. O eso pensamos todos justo antes de que los guardias se levantarán el casco.
— Estais muy tranquilos. Nos esperábamos un ambiente más revolucionario — dijo Robin dedicándome una de sus mejores sonrisas. — ¿Esperando a vuestros salvadores?
— No hace falta — dijo Blake entonces saliendo de su celda.
— Siempre llegamos tarde — dijo Mark acercándose a mi celda.
— Aun podeis liberarnos a nosotros. — dije yo con una sonrisa divertida.
— Dejadme a mi — dijo Robin acercándose a mi celda. Mientras Alec iba hacia la de Archy.
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Marcada por las Hadas
FantasyLiv y Blake pertenecen a mundos totalmente diferentes que han sido enemigos desde hace miles de años. ¿Pero qué pasaría si se conociesen? ¿Podrían llegar a ser amigos? ¿O algo más? Liv es una mestiza nacida de la unión de hada y humano. Sus poderes...