Un problema GIGANTE | Parte 4 (T1 E6)

55 8 3
                                    

Kowaiyō se convirtió en una ola que lo único que hizo fue mojar a Spidey.
Araña: Ok, esto es molesto.
Kowaiyō: Oh, estoy seguro que puedo hacer mucho más que eso.
Kowaiyō intentó dañar de todas formas al Hombre Araña pero este solo terminaba mojado.
Araña: Me estoy hartando... ¿Solo sabes mojar a la gente? Bueno, esto se hizo más fácil de lo que pensé, ahora solo tengo que pensar en cómo puedo capturarte.
Kowaiyō: ¡Aaaaaah!
Araña: Amigo, creo que te sobrevaloraste demasiado.
Kowaiyō: ¡¿Me estás tomando como un chiste?!
Araña: Más o menos.
Kowaiyō se enojó mucho, hasta que se le ocurrió algo.
Kowaiyō: Soy agua, literalmente. Puedo unirme a más agua para ser más poderoso.
Kowaiyō recordó que cerca al barrio había una fábrica donde hacían botellas con agua, así que se convirtió en un charco de agua para avanzar rápido.
Araña: ¿A dónde crees que vas?
El Hombre Araña trató de detener a Kowaiyō pero no podía ya que cada intento que hacía solo resultaba en el pie o mano de Spidey atravesando el cuerpo líquido de Kowaiyō. Intentó encerrarlo en un frasco pero Kowaiyō simplemente se estiraba para esquivar el frasco. Mientras iba hacia su objetivo, Kowaiyō iba aumentando su tamaño ya que absorvía cualquier líquido que estuviera por su camino.
Araña: Absorves hasta gaseosa, ¿cómo le haces para seguir siendo celeste? Dicen de que el agua es incoloro pero nunca creí en eso.
Kowaiyō y Spidey llegaron a la fàbrica donde el primer mencionado absorvió todo el agua que se encontraba en esa fábrica para hacerse más grande y más grande y más y más hasta que...
Araña: Ok, ese sí que es un problema gigante.
Kowaiyō: Ahora, con este tamaño, puedo hacer más que antes. No te daré un puño o una patada pero puedo hacer algo peor.
Araña: Vas a producir un...
Kowaiyō: ...tsunami, exacto. No podrás hacer nada al respecto, Hombre Araña, cada golpe que intentes darme solo resultará en tú atravesándome debido a que soy puro líquido. Aunque, sabes, sinceramente ya no quiero hacer el tsunami, solo quiero dañarte a ti. ¿Qué tal si damos un paseo al lago?
Kowaiyō se convirtió en una gigantesca ola que llevaba a Spidey hacia el bosque, la ola arrasaba con todo a su paso y Araña sacaba a cada persona que estuviera cerca con su telaraña.
Araña: Amigo... ¡¿Qué estás tramando?!
Kowaiyō y Spidey llegaron al bosque donde la ola empuja a Araña hacia el lago.
Araña: ¡Ayuda, no sé nadar!
Kowaiyō se transformó en su forma humanoide para decirle...
Kowaiyō: Y ahora solo tendrás que aguantar tu dolorosa muerte, ahogándote por un tiempo que no será largo en minutos pero que para ti será una eternidad, sin nadie que te ayude, solo en el bosque.
Araña: ¡Perdiste la cordura mocoso, estoy seguro que tú no eras así!
Kowaiyō: Cordura, cordura, ¿esa palabra la escuché hoy mismo? En fin, solo quédate ahí, ahora solucionaré mis problemas personales. ¡Adiós!
Kowaiyō se volvió a transformar en una ola para irse con velocidad.
Araña: ¡Aaaaah! ¡Alguien ayúdeme! ¡Me estoy hundiendo! ¡Aaaaaaah!
El Hombre Araña empezó a hundirse para pasar los últimos minutos de su vida.
Araña: Bueno, y así acaba mi vida, como un héroe, un héroe que falló y murió ahogado en un lago de un bosque. Morir era algo que iba a pasar algún día, pero no imaginaba que fuese a pasar hoy. Mis padres, espero que superen mi pérdida, sé que lo harán. Gigante y Suneo, fueron unos buenos amigos, recién, pero lo fueron, espero que no lloren mucho la pérdida del torpe de Nobita. Dekisugi, lo siento por tenerte celos, eres un gran amigo y uno de los mejores que tuve, espero que no estés triste, amigo. Shizuka, voy a ser sincero conmigo, te amo mucho, eres la mejor persona que conocí en mi vida, siempre me has brindado apoyo, hospitalidad y cariño. Íbamos a formar una familia en el futuro, pero... el futuro cambia constantemente. Espero que no llores mucho por mí, no quiere que estés triste, cásate con Dekisugi en el futuro, es mejor persona para ti que yo. Doraemon, sé que ya no existes, pero muchas gracias por inspirarme para ser mejor persona, diste los consejos más sabios en tu último día de vida, me cambiaste completamente la vida y espero haber cumplido bien tu último deseo... ¿Pero qué estoy diciendo? No quiero morir ahora, aún quiero tener un futuro y habrán muchas personas en peligro por ese mocoso de agua. Debo salir de aquí.
Spidey intentó llegar a la superficie "aleteando" con sus brazos, sin éxito, pero Araña siguió intentándolo.
Araña: Vamos, con fuerza, con fuerza, si me propongo a algo lo puedo lograr. Aaaaaaah, me estoy ahogando.
Araña empezó a ahogarse, iba perdiendo la consciencia poco a poco, hasta que llegó el momento.
Y así fue el trágico final del Hombre Araña.










O ese hubiera sido su final si no fuese por dos chicos que andaban por el bosque.
Araña despertó fuera del lago y escuchó una voz.
???: Creo que ya se despertó.
???: ¿Estás seguro? Lo voy a ver.
Spidey vio a dos figuras conocidas frente a él.
Araña: Gigante... Suneo...
Suneo: ¡Ey, ¿cómo conoces nuestros nombres?!
Araña: Aaah, pues he escuchado de ustedes mientras me balanceaba de lugar en lugar, jeje.
Gigante: ¿Lo escuchaste Suneo? ¡El Hombre Araña sabe quienes somos!
Araña: ¿Y cómo me encontraron?
Suneo: Estábamos buscando un árbol que fuera lo suficientemente grande para treparlo, hasta que llegamos al lago y te encontramos inconsciente. ¿En serio te hundiste en un lago? Hombre, no era de lo más profundo, en ese aspecto te pareces a un amigo nuestro que no sabe nadar, jaja.
Araña: Muy gracioso, Suneo.
Gigante: Oye, no te burles de él.
Suneo: Vamos, solo nos burlamos un poco.
Gigante: Tampoco es que sea lo más divertido para la otra persona.
Araña: Ha cambiado.
Gigante: Escucha Araña, yo ya no creo que seas una amenaza, Dekisugi nos contó sobre su padre y la extorsión. Eres un héroe.
Suneo: Eres el hombre sirena.
Gigante: Suneo...
Araña: Muchas gracias por salvarme, siempre los recordaré por ese acto, pero ahora necesito regresar a la acción.
En eso, el Hombre Araña se acordó de un detalle...
Araña: Oigan, ¿no habrán visto mi rostro por curiosidad?
Gigante: No te preocupes, no lo hicimos. Suneo si quería hacerlo pero le dije que debemos respetar su identidad.
Suneo: Vamos, dinos quién eres, no se lo contaremos a nadie.
Araña: De eso nada, Suneo. Y gracias por no haber visto mi rostro y por haberme salvado.
Gigante: No hay de qué, ahora salva a esas personas.
Suneo: Y no te vuelvas a ahogar.
Gigante: Suneo, para con las bromas.
Suneo: Lo siento, no puedo evitarlo. ¡Ve por él, Hombre Araña!
El Hombre Araña salió corriendo del bosque para balancearse y regresar a la acción, tenía a un mocoso con dos de hidrógeno y uno de oxígeno al que detener.

Nobita es el Impresionante Hombre Araña | Spider-Man Donde viven las historias. Descúbrelo ahora