【20】

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—No hay otra cosa en la que gane

—La hay, en el amor

—¿Amor? —comenzó a reír —no creo que nadie se enamore de mí

—¿Porqué no?, si eres lindo

—Cualquiera puede ser lindo, Hanbin, tu también eres lindo, el amor no se basa solo en lo físico

—Bueno, es verdad, no creo que nadie se enamore de ti si conociera lo bipolar que puedes llegar a ser

—Idiota —Hanbin comenzó a reír siendo seguido por Hao, poco después se sirvieron más champagne llenándolo de arándanos para que le de un toque azul a la bebida —a veces te envidio

—¿Por qué? —está vez fue él quien tenía curiosidad por su respuesta

—Puedes estar y coger con quien quieras —suspiró —con chicas y chicos y no tienes ningún problema... ojalá yo pudiera hacer eso

—¿Estás admitiendo que eres gay? —comenzó a reír tratando de molestarlo

—Creo que... —se tapó la cara con sus dos manos por la vergüenza —... sí

—Viste que sí eres gay, ninfómano y promiscuo —tomó una fresa comiéndola sola con una sonrisa ganadora tallada en su rostro

—Lamentablemente soy gay —admitió —es que... acostarse con chicos suele ser complicado, la mayoría son imbéciles

—Como todos los hombres

—Sí, bueno, hay algunos que si son fáciles de tratar y otros que no, desde que tengo 17 aprendí a ser selectivo con los hombres, si les dices que no, es no, pero algunos no entienden, o se pasan de la raya, o suelen ser rudos cuando tu no pediste que lo fueran, como el imbécil de hace rato

—¿Te hizo algo?

—Me abofeteó y me escupió —sonrió como si no fuera nada —, se supone que el enojado debería haber sido yo pero él salió furioso de la habitación como si fuera culpa mía

—Es un imbécil

—Sí —asintió —creen que porque yo les dije para tener sexo o porque si les acepté, pueden tratarme como se les de la gana, incluso hay tarados que se niegan a usar condón o se quieren correr en mi cara como si fuera un depósito de su semen —hizo un mueca de asco —idiotas... —tomó un gran sorbo de su copa para después agarrar la botella y servirse más

—¿Y has tenido que soportar eso durante años?

—Sí —suspiró profundamente

—¿Y porqué?

—Porque se siente jodidamente bien —Hanbin lo miró con confusión y Hao se comenzó a reír por su expresión tan seria —momentáneamente se siente bien —apoyó su cabeza en el hombro del castaño —, luego de eso regreso a la horrible realidad

—¿Y no quieres sentirte jodidamente bien ahora? —acercó su cabeza chocando con la del castaño, la cual aún seguía apoyada en su hombro, sus cabellos se rozaron por unos segundos

—Sí quiero —dijo apenas escuchó eso entendiendo exactamente lo que quiso decir el castaño

—¿Vamos a otro lugar? —preguntó viendo como el castaño agarró la botella de champagne que aún no había abierto, de tantas que pidió ya perdió la cuenta de cuantas iba

—Vamos

Hanbin comenzó a caminar y este lo siguió agarrando el vaso de frutas que estaba por la mitad para finalmente seguirlo.

Al lugar donde llegaron era la habitación de Hanbin, era la primera vez que el chino ingresaba, dejó el vaso de frutas y el champagne encima de la mesa al costado de sofá.

Hao sintió por un momento que la cordura se le había devuelto a su ser y pensó que quizás debería abandonar lo que sea que estaba a punto de hacer en ese momento. Era muy probable que se arrepienta después.

Sin embargo, las manos de Hanbin debajo de su camisa no le dejaban pensar con claridad, él, quien estaba detrás de este, acariciaba cada parte de su torso de una manera tan lenta y suave haciendo que todos los sentidos de Hao se activaran.

Su respiración chocando desde su oreja hasta su cuello lo hacía estremecer de tal manera que fue inevitable no soltar un gemido.

Hanbin le terminó por quitar la camisa que llevaba puesta y lo giró hacia él para poder verlo a la cara notando un leve tono carmesí que salía de sus mejillas, no estaba seguro si era por el alcohol o por él mismo, pero de todas formas le gustaba verlo así.

Optó por una posición que simulaba un abrazo, y así comenzó a acariciar su espalda lentamente mientras jugaba con el lóbulo de su oreja, besaba su cuello y lamía al mismo tiempo.

Hao sólo gemía disfrutando de aquella sensación, no quería detenerse, cualquier pensamiento negativo que le venga en aquel momento quería borrarlo de su mente, esta vez sólo quería centrarse en los toques de Hanbin.

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Esposos por accidente 🥂 HaobinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora