Descanso

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Alejandandro y Fabiola


Tendidos en el escenario ambos chicos se quedan acostados en el lugar, esto es poco recomendable por que el calor de sus cuerpos está pegando con el frío suelo, más por un momento lo ignoran, la buya de los demás alumnos se escucha alrededor mientras ellos ven el techo, Paty va a preguntarles a ambos si se sienten bien a lo que responden de forma positiva, antes de levantarse tienen un pequeño cruce de palabras entre los dos: — Nada mal para un jugador de fútbol.

— Lo mismo digo, chica bailarina, supongo que esas piernas bien torneadas no son mera vanidad.

— Gracias, supongo.

— Te quiero proponer algo, para darle un poco de sabor a esto.

— Depende, ¿De qué van tus pretensiones?

— Meramente atlético, tú y yo, rivales, a ver quien puede desenvolver los ejercicios físicos.

— Sería muy grosero de mi parte decirlo, pero aunque tengas condición te hace falta tacto, cuando se trata del performance un jugador no tiene nada que hacer al grácil arte del ballet.

— Para que un jugador experimentado pueda guiar un balón debe hacerlo con gracia, mis pies son más ágiles de lo que crees y mi cuerpo es todo menos tosco.

— Creeme, si hacemos este juego solo te vas a frustrar.

— No creo, te he visto algo tensa, sobre todo en tus hombros tan rígidos como rocas, te caerá bien algo de competencia.

— Conste que te advertí, tú haz lo que quieras, yo no veo competencia en ti, además no es algo que me preocupe actualmente.

Alejandro se levanta, para evitar tirones lo hace de lado, incorporándose lentamente, tras ello le extiende la mano a la chica para ayudarle y remata: — Veamos como nos va la siguiente clase.

Los dos chicos se sueltan de la mano, Alejandro va de inmediato con Lucía y Coneja aprovecha para ir al baño.


Ryu y Griselda


La chica le había pasado una toalla guardada en su mochila para el chico de rasgos asiáticos, él por un momento sospecha el acto pero el cansancio le hace bajar la guardia, ella aprovecha para tener su momento a solas: — ¿Y qué te parece verme aquí señorito?

— Nada mal, no pensé que fueras a aguantar tanto.

— No me subestimes.

— Entonces, ahora que estoy enterado de tus planes solo me queda darte la bienvenida a la preparatoria Castellanos.

— No seas tan formal, vine aquí porque estaré cerca de algo que me interesa. — Mientras ella lo dice Ryu queda congelado por unos instantes, luego la chica complementa su comentario — Vine aquí porque hay baile folclórico.

— Desconozco qué haces conmigo entonces.

— No alcancé el promedio, sin embargo, alguien me enseñó que se puede seguir con tus sueños estés o no en el lugar correcto. Quiero que juntos aprendamos a bailar, estemos en la TAE o no.

El chico se acerca al oído de ella para susurrarle: —Tienes suerte, hay una manera. Terminando la TAE me acompañas.


Abraham y Tsuki


De reojo el mangaka mira como Ryu y Griselda conversan, no sabe qué sentir exactamente, solo siente algo extraño en el pecho, toma un poco de agua y prefiere irse al baño a mojarse la cara. Mientras talla la cara con fuerza se repite a sí mismo: "Que no te afecte, que no afecte, actúa natural."

Nuestro Dramático Taller 2- ConflictoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora