⭒𝗦𝗸𝘆𝗳𝗮𝗹𝗹 ; 𝘛𝘰𝘮 𝘒𝘢𝘶𝘭𝘪𝘵𝘻

𝟑.

Tom | Presente

—Llévalas al sótano, Cook. —solte dirigiéndome a mi colega. —Mañana veremos a donde las mandamos.

—Como ordene, Jefe. —Asintió el ojieazul con una sonrisa.

Estaba cansado, normalmente no me canso tan rápido, pero hoy si.

Me dirigí a mi habitación, la cual estaba ordenada y limpia, gracias a las sirvientas, caí en la cama rendido, entrando en un sueño profundo.

(...)

Maia

—¿Susy, estás bien? —Hable hacía la sombra que tenía al frente. —Háblame Susi. —Ordené, estábamos todavía vendadas, atadas y seguramente ella se sentía fatal.

Para ponerlas en contexto, en el momento en el que Robert se entero de mi plan, obligo a su hijo a dejar a Susan y dársela a Tom, Susy dijo que rogo, pero no sirvió de nada. Obviamente.

—Si, lo estoy. —Suspiro pesadamente. —Perdón, Maia. —Escuche su voz quebrarse.

Si, se había puesto a llorar. Estaba en su sano juicio de hacerlo, el novio la dejo, la regalo a un mafioso alemán y ahora la van a prostituir.

—Su, tranquila, sabía que iba a pasar esto sinceramente, todo mi plan, se fue a la basura en cuestión de segundos. —Suspire con frustración, había confesado todo.

—¿¡De que mierda estas hablando Maia!? —Grito—. ¿Sabias que esto iba a pasar?

—Si...

—En cuanto me suelten, te juro por Dios... ¡¡Que te mato!! —Un estruendo se escucho, había tirado algo y al parecer, estaba tratando de soltarse—. ¡¡Jodeeer!!

Sinceramente no soy la mejor para las palabras motivadoras, aparte de que estaba frustrada, genere que Susy llorara más, esta iba a ser una larga noche.

...

—¿Están bien? —Hablo una voz femenina, en un inglés no muy bueno que digamos. —Me bad, my english isn't very good—

—Estando acá, creo que nadie esta bien, pero gracias por preguntar. —Dije un poco sarcástica. —¿Ustedes están bien?

—Si, no nos hicieron nada por suerte. —Hablo. —¿Ustedes también estuvieron en la fiesta de Robert?

—Si, estaba en una misión, intentando matar a Robert. —Escuche risas, seguramente no me creyeron. —¿Ustedes por qué estaban ahí?

—Trabajo. —Suspiro pesadamente. —Estaba tan necesitada de dinero, que tuve que meterme en estas cosas, seguro que la mujer que me trajo debe estar bañándose en dinero. —Soltó irónica.

—Yo igual. —Hablo otra de las chicas. —Mi familia debe estar preocupada, prometí volver con dinero a casa. —Dijo, en su voz se notaba el miedo.

Alguien comenzó a llorar, ya no era solamente Susy.

—A mi me levantaron de la calle, grite, patalee y trate de soltarme, lo intente, pero no lo logré. —Sus sollozos eran constantes.