Insane (Lisa GIP)

Capítulo II

- Mi papá nos abandonó cuando yo tenía 5 años y nunca volvimos a verlo ni a saber nada de él por lo que mamá tuvo que trabajar mucho para que pudiéramos estar bien aunque su trabajo es bastante difícil ya qué viaja constantemente y casi no está en casa - le contaba mientras ella me miraba atenta - Alison está conmigo durante la semana de lunes a viernes junto a los empleados de la casa, ellos tienen a su familia por lo que sábado y domingo se van y bueno, es por eso que me quedo sola estos dos días a menos que mamá este en casa, lo que es muy raro o qué mis amigas vengan a quedarse conmigo.

- Y ellas vendrán ahora? - preguntó curiosa.

- Oh no, la fiesta de hoy las tenía muy entusiasmadas - respondí con algo de vergüenza - se suponía que debía estar con ellas divirtiéndome, es lo que siempre me dice Irene.

- Y en cambio estás aquí conmigo - una sonrisa tierna se dibujó en su rostro y yo asentí.

Habíamos estado platicando sobre nosotras al rededor de 2 horas, más bien de mi, porque era la única que estaba hablando mientras que Lisa sólo escuchaba todo, pude darme cuenta que en realidad se interesaba en lo que decía pues sus ojos expresaban diferentes emociones cada que le platicaba sobre mi vida era muy agradable su compañía, tanto que ni siquiera me había percatado de la hora.

- Ya veo, debe ser difícil para una niña como tú tener que vivir todo esto, no es así? - preguntó ella

- Un poco, no me gusta estar sola - respondí suspirando - pero supongo que te acostumbras a todo aunque no quieras.

- Así es - sonrió - estar solo no siempre es tan malo Jennie... Aprendes cosas de ti misma, cosas que no sabías que existen en ti. - dijo.

La manera tan tranquila y segura en la que hablaba era interesante, debe ser un poco mayor que yo por su forma de expresarse, quizá algún par de años, que no se le notaban realmente pues a simple vista podríamos parecer de la misma edad, la observaba tanto que no me había dado cuenta de mi acción un poco incómoda para ella.

- Ven aquí - Lisa me extendió los brazos mientras ponía un cojín en sus piernas, sacándome del trance de sus ojos en el que me había perdido - Ven pequeña - palmeó el cojín.

Yo me acerqué a ella y esta hizo que me recostara sobre sus piernas apoyando mi cabeza en el cojín me tomó de la mano para entrelazar nuestros dedos y con la otra empezaba a jugar con mi cabello, su toque era demasiado suave y ligero, esas leves caricias eran sublimes, jamás me había sentido así con alguien, su forma de frotar sus dedos sobre mi piel era adictiva, tanto qué me hicieron cerrar los ojos por relajarme demasiado.

- Y ese chico, es tu novio? - preguntó ella.

- Quién? Kai? - abrí mis ojos para verla - no, sólo es un compañero de clase, nada más.

- Me parece que es un tonto - dijo con un tono serio.

- Si, yo también lo creo - reí por eso.

- Creo que eres una niña muy hermosa Jennie, no deberías permitir que nadie se comporte como un cretino contigo, eres demasiado dulce y tierna - ella sonrió desde arriba y yo me puse aún más nerviosa - me parece que eres una niña adorable, eres casi una mujercita y puedo jurar que tu belleza aumentará más cuando crezcas, tienes unos ojos hermosos y tus pequeñas mejillas son adorables y ni hablar de esos labios rosados rellenitos, apuesto que son deliciosos eh? - yo mordí mi labio imaginando sentir los suyos - mereces a alguien que cuide de ti y te ame como la preciosa niña que eres.

Sentí mi cuerpo estremecerse cuando su mano soltó la mía detenidamente para acariciar mi hombro con suavidad, apenas y podía sentir su tacto pero aún así lo sentía profundo sobre mi piel.