Insane (Lisa GIP)

Capítulo LIII

El destello de la Luna parecía hacerse cada vez más intenso y rojizo, como cuando su luminosidad va en busca de los licantropos en medio del bosque montañoso y frío que salen a cazar para calmar su hambre, la frialdad del viento era complaciente acompañando a la noche saciando el deseo sexual del aire.

Sus ojos penetrantes y vacíos esperaban sus peores acciones, no se conformaba con solo ver su miedo reluciendo en sus miradas, quería despertar su sed de venganza de la misma forma que había despertado su deseo, quería ver en sus actos el dolor y sufrimiento surgiendo a través de su piel, su incapacidad de dañarla a costa de su amor.

- Vamos! - gritó en un susurro esperando su primer golpe - Vamos.

Los tiernos y dulces ojos felinos de la castaña mediana abandonaron su cordura para ensombrecerse en una lujuria pasional y vengativa convirtiendose en una mirada cual jaguar en medio del pastizal a punto de saltar e incrustar sus feroces colmillos.

- Esa es mi niña - dijo Lisa en cuanto vio el primer movimiento de la menor - Vamos Jen, muéstrame que has aprendido.

- Bienvenida a tu cielo - respondió -  somos los angeles que haremos de tu eternidad el mejor y dulce sueño que imaginaste, ahora... - sonrió deliberadamente - Llámame Ruby Jane.

Acto seguido, Jennie se inclinó para mirar a la pelinegra directamente a los ojos, se puso en cuclillas y Lisa sintió como empezó a acariciar su entrepierna por encima de la ropa con sus calidas y suaves manos para de repente cerrar el puño dejando sus testiculos encerrados dentro, logrando sacarle un gemido agudo y notar como sus piernas se tensaban ante la fuerza que iba ejerciendo poco a poco.

- Tal vez esto sea divertido - dijo muy cerca de su oído mientras sus ojos se fijaban en algo detrás suyo - Espero que lo disfrutes, amor.

Cerró las esposas al rededor de las muñecas de Lisa sin que la otra pusiera resistencia alguna, lo único que dejó salir fue una pequeña risilla divertida que fue aún más cómplice entre el juego de ambas, luego la castaña caminó unos pasos tarareando una canción al azar que tal vez ni siquiera ella misma recordaría después, mientras tanto los ojos de la castaña mayor aún seguían sus movimientos sin alejarse de su propio lugar, estaba paralizada ante la nueva personalidad de Jennie, pero aún así no le impidió nada, al menos no por el momento.

- Eso es - la voz de Jennie al fondo parecía satisfecha con algo en sus manos.

Volvió a quedar frente a Lisa mirándola desde arriba con superioridad al momento que abría y cerraba unas tijeras mostrando su filo, se inclinó y con mucho cuidado fue cortando la tela de ropa que cubría el cuerpo de Lisa, iniciando con la parte superior hasta que quedó su perfecto abdomen y pequeños pechos al descubierto, se mordió los labios ante la vista perfecta de lo que era tenerla así, seguido de eso comenzó a cortar el pantalón junto con los calzoncillos mientras los ojos de Lisa se concentraban en los suyos, una poderosa intensidad entre miradas mientras las tijeras rozaban ligeramente su miembro qué pronto comenzaría a excitarse.

- No lo vayas a cortar - dijo en tono divertido mientras una sonrisa ladina adornaba su rostro.

Los ojos felinos de su pequeña jamás la abandonaron mientras se deshacía de su ropa de una forma peculiar, podría decirse qué literalmente le desgarró todo hasta tenerla completamente desnuda por la parte delantera, que era lo que más atención recibiría más adelante. Jennie se remojó los labios al ver la perfecta anatomía de Lisa y más aún cuando la tenía a su total disposición para hacerle lo que quisiera, supo entonces un poco de lo que ella sentía cuando tomaba el control sobre las tres.