Blood Candy +18|| hananene/amanene

S E I S

Capitulo 06 "a todo dar"

Me encontraba abrazandolo, escondiendo mi rostro bajo el suyo apretando mis manos alrededor de su cuello; sus manos se mostraron firmes en mi cintura atrayendome a el con cada movimiento.

—no sabes cuánto tiempo he deseado tenerte así... Cerca de mi...

Hace unos minutos me quito el panties dejando al aire libre mis piernas las cuales no an cambiado de lugar.

Me susurraba muchas cosas al oido, cosas fuerte e indecentes, pero... ¿Eso importa?

—¿Quieres que vayamos lento? Aún no me dices como te gustaría que te hiciera el amor—mordió el óvulo de mi oreja lo cual me llevo a sentir una corriente eléctrica.

—¿Lento o rápido? Dime cómo quieres que lo aga.

—ambas...—susurre.

—¿Puedes decirlo más fuerte? No te oí.—sabia que lo decía para que lo repitiera.

—quiero ambas.—me arme de valor dejando de lado la vergüenza y lo mire—quiero ambas—repeti.

—¿Ambas?

—si...

—¿Cómo quieres comenzar?

Yo no era para nada una experta en esto, sería mi primera vez.

—no lo sé... Nunca he hecho esto antes...

—ya veo, no hay mucha diferencia entre nosotros; yo tampoco lo he hecho antes.

—seamos inexpertos juntos.

No besamos por un tiempo, de esos besos profundos.

—¿Puedes enredar tus brazos por mi cuello?

Así lo hice.

—bien, ahora acércate más quiero ponerlo mientras te veo.

Mi espalda quedó en curva.

—muy bien, ¿Puedo sacarlo?

Asentí con la cabeza, con sus manos quitó su cinturón y aún que no ví su miembro directamente sentí mucha vergüenza.

Aún traía mis bragas, y mi uniforme en si ya que solo levantó un poco mi falda, sentí como sus dedos jugaban con mi feminidad sobre la tela, aparto un poco de la tela dejándome descubierta.

Atrás nuestro hay una pared, ya que la banca esta pegada a la pared el recostó su espalda mirándome.

Jugaba con la punta de su miembro, lo rozaba contra mi antes de sentir como lo iba metiendo.

—duele...—le susurro con temor.

—pronto no dolerá, es normal para gente como nosotros, experimentando su primera vez.

Fue metiendo más su miembro y mi dolor se hacía cada vez más, las lágrimas no tardaron el salir

—un poco más... Solo un poco más.

Choque mi frente con la suya, mis manos se agarraron a sus hombros y los apretó con mucha fuerza.

Finalmente sentí como todo su miembro ya ha entrado en mi, se detuvo por un momento y suspirando me habló.

—tu expresión es tan... Linda.—acaricio mi mejilla izquierda.

—¿Puedo seguir?

Dolía, dolía mucho pero hemos llegado tan lejos que parar parece ser inevitable.

—si, si puedes.

Dió un suave movimiento, me hizo sacar algunos gemidos a medida que se movía, de pronto y muy repentinamente empecé a sentirme bien con cada uno de sus movimiento, tanto fue así que me ví obligada a pedir por más.