Capítulo XVII

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♫ Mr. Loverman ---- Ricky Montgomery

El tritón de aleta negra recobró la consciencia, estaba bajo el agua, pero no flotaba por su cuenta, alguien más lo estaba sosteniendo con sus brazos, el agua que ondeaba por su rostro le daba una imagen distorsionada de aquel otro ser que lo intr...

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El tritón de aleta negra recobró la consciencia, estaba bajo el agua, pero no flotaba por su cuenta, alguien más lo estaba sosteniendo con sus brazos, el agua que ondeaba por su rostro le daba una imagen distorsionada de aquel otro ser que lo introdujo al mar. Conforme fue pasando el tiempo una voz lo llamaba, gritaba su nombre desesperado, cada vez la escuchaba más cerca y clara.

— ¡LAW! DESPIERTA POR FAVOR, LO SIENTO TANTO, PERDONAME, NO ME DI CUENTA DEL TIEMPO. — movió el cuerpo de Law ligeramente para despabilarlo, aunque en su voz se notaba la desesperación.

— cuando escuchó su voz y sintió sus grandes manos recorriendo su espalda, sus fuerzas llenaron su cuerpo como si un veneno le recorriera por sus venas y le regresara sus energías. Salió del agua salpicando en todas direcciones, rodeó el cuello de Kid con fuerza, fue tanto el impulso que termino por tirarlo de espaldas, se hundieron un poco y aprovecho ese momento para besarle los labios ansioso.

Eustass se fue de espaldas, golpeando su espalda contra el agua, aferró sus brazos a la espalda baja de Trafalgar, como pudo jalo todo el aire que le fue permitido antes de sumergirse en el mar con el tritón encima de él, la presión de sus labios le hizo entender lo desesperado que se encontraba por estar con él.

Besándose bajo el agua, rodeados de ese liquido sentían que volaban o que se hallaban en un espacio creado solo para ellos; entre los rayos de luna que traspasaban el agua estos dos mantenían su unión corporal. Era como ver una obra de teatro romántica iluminada por delgados hilos de luz blanca.

El momento se vio interrumpido por el humano, quien giró su rostro a un lado, dándole a entender que necesitaba respirar. Sin dudar lo llevo a la superficie para que respirara.

— Gracias por eso, no pude jalar mucho aire antes de que me besaras. — acarició una de las mejillas de la criatura, delineando sus finas facciones, aunque noto un cierto aire de tristeza.

Law paso de sentirse dolido a sentir molestia, agarró los cabellos rojos de Eustass y con fuerza lo volvió a sumergir en el mar. — ¡IMBECIL! ¿¡COMO SE TE OCURRE DEJARME ASÍ!? NO VOY A PERDONARTE, ME LASTIMASTE. — expresó furioso mientras luchaba para mantener al humano bajo el agua.

El vocalista de la banda movió los brazos desesperado tratando de zafarse del agarre del tritón. Hasta que fue levantado con la ayuda de este que lo atacaba.

— Lo lamento mucho, esto me tomo más tiempo de lo que pensaba. — respiró agitado, jalando aire desesperado, se excusó agarrándolo por los brazos y juntándolo a su cuerpo, le urgía sentirlo cerca.

— No me vengas con esas cosas ridículas, si no querías estar conmigo me lo hubieras dicho para...

— No, yo si te dije la verdad, pero no quieres entender que querían mantenerme en New York para mi tratamiento.

Las serenatas provocan tsunamisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora