Capítulo 28: Los Poderosos Vientos

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Después de hacer despertado al guerrero legendario del hielo, y haber salvado aquel pueblo helado, los tamers legendarios junto con los Digimons salieron de los páramos helados, para adentrarse en un bosque de grandes árboles.

-Oye ¿por qué ese árbol tiene una especie de escaleras que se unen a esos árboles?-Preguntó Naomi, viendo como en el tronco había una escalera de madera que lo rodeaba, antes de unirse a otro árbol.

-Este es el bosque de los bebés plantas.-Le respondió Bokomon.-Se trata de un bosque habitado por Digimons de tipo planta, sobre todo por Digimons bebé, los cuales se ocultan en lo alto de los árboles hasta que digievolucionan.-Termino de explicar, justo en el momento en que los D-Powers empezaron a reaccionar.

-Chicos, parece que tenemos cerca uno de los espíritus digitales restantes.-Anunció Mario, con su dispositivo digital en la mano.

Aunque antes de que pudieran decir nada o moverse, tanto Max como David cayeron al suelo por culpa de unas lianas que les había golpeado, y unas burbujas.

-¿Quién ha sido?-Preguntaron ambos chicos, mirando a todas direcciones para ver quién había sido.

-Esperadad un momento.-Llamó Zochitle la atención del grupo.-Recordar que es lo que nos ha explicado antes Bokomon, de los Digimons que viven aquí.-Les recordó la heredera del conocimiento.

-Es cierto, habrán sentido que pensábamos atacar a los bebés, y por eso os han atacado.-Reconoció Bokomon.

-¿Y por qué solo ha nosotros?-Preguntaron ambos chicos poniéndose de pies, aunque no recibieron una respuesta.

-No vinimos haceros daños, solo estamos aquí para poder cumplir nuestro objetivo.-Hablo Desi, mirando a todos lados para ver si veía algo.

-Se ha movido algo entre esos árboles.-Anunció Renamon, antes de usar su velocidad para moverse hacía la copa de los árboles que había a su izquierda.

Cuando Renamon volvió aparecer al lado de su tamers, se podía ver como traía en sus manos un Digimon con forma humanoide, de color verde, que sus patas eran como unas raíces, sus manos tenían forma de pétalos, de los cuales salían unos largos estambres, y su cabeza tenía forma de flor.

-Se trata de un Floramon.-Reveló Agumon, la identidad de aquel Digimon.

-Podéis acabar conmigo, pero dejar en paz a los bebés.-Les pidió el Digimon, mientras se movía sin parar.

-Por favor tranquilízate, nadie quiere hacer daño a nadie.-Intentó Naomi tranquilizar al Digimon, mientras se ponía a su altura.

-Floramon escúchalos, ellos son los tamers legendarios, los encargados de traer la paz al mundo digital.-Le explicó Bokomon, a la vez que Neemon asentía hacia aquellas palabras.

Al haber escuchado esas palabras, y al revisar a los humanos y los Digimons que le rodeaban, Floramon detuvo sus movimientos al reconocer algunas historias que se contaban, después de que los siete grandes señores demonios se hicieran casi con el control del mundo digital.

-Siento haberos atacado.-Se disculpó, nada más toco el suelo cuando Renamon la había soltado por petición de la heredera del amor.-Por favor, quiero que me sigáis.-Les pidió, antes de salir corriendo hacía las escaleras.

Compartiendo una rápida mirada, tanto humanos como Digimons empezaron a correr para seguir a Floramon escaleras arriba, donde al llegar a lo alto pudieron ver como entre las copas de los árboles había plataformas, y en los troncos de los árboles había pequeños huecos de donde se pudo ver salir varios Digimons de nivel bebe.

-Esto es increíble, nunca hubiera pensado que hubiera todo un mundo entre las copas de estos árboles.-Reconoció Zochitle, viendo como de las otras copas salían más Digimons.

Digimon 2 Una Nueva AventuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora