Capítulo XXXVII

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Black despertaba por el llanto que oyó en la habitación.

Vio a Vegeta despierto, que estaba por cargar a la bebé en sus brazos.

Al hacerlo, se sentó en la orilla de la cama, quitando uno de los tirantes de su musculosa azul cielo.

En la oscuridad, apenas notaba la silueta de este. Oyó un bostezo suyo, seguramente estaba muerto de sueño.

Se sentó también, haciendo que este volteara su rostro hacia él. Se coloca detrás suyo, abrazándolo y besando su cabeza.

-¿Qué... hora es?

-Mmh...-Ve hacia el reloj que estaba en el escritorio-Las tres.

-Tengo mucho sueño.

-Lo sé. Yo también-Le hacía cariñitos en el cabello al castaño.

-Si esto se hace rutina me voy a morir.

-No digas eso, amor. Nos acostumbraremos de a poco.

-Supongo.

Luego de un rato, Bura volvió a dormirse, a lo que la pareja también se estaban por acostar nuevamente.

Black se acercó un poco más a Vegeta.

-Buenas noches-Le da un besito al cansado castaño que le sonrió.

-Buenas noches.

Volvieron a dormirse sin mucho problema, el sueño les ganaba.

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Pasaban los días y Vegeta se acoplaba lentamente a su nuevo horario de sueño con la pequeña Bura, quien no lloraba mucho que digamos, pero aún así despertaba a la pareja en medio de la noche.

Black por su parte, parecía estar algo raro. Le costaba levantarse, se mareaba al levantarse de la cama muy rápido y hoy le vinieron náuseas de la nada.

-¿Estás seguro de que estás bien?

-No, ahora sí que estoy seguro de que no estoy bien...

-Son los mismos síntomas que tenía... cuando inició mi embarazo-Le quita el mameluco rosa para poder cambiar el pañal a la bebé.

-¿Y tú de quién crees que es? ¿Del espíritu santo?-Pregunta con sarcasmo, algo molesto por esa insinuación.

-Ay, yo no digo que lo estés. Sólo digo que eso de los embarazos psicológicos existe... y te dio uno tardío. O... sólo estás débil y por eso te mareas al levantarte.

-Lo de estar débil es casi imposible.

-No, no lo es-termina de poner el pañal nuevo y agarra ropa nueva para Bura-Tu alimentación cambió mucho... no comías casi nada.

-Porque estaba nervioso, ¿ok?

-¿Lo ves? Es eso-Carga a su bebé luego de terminar de cambiarla-Deberías empezar a comer mejor. No vaya a ser que mi niña se quede sin papá.

-Ay, tampoco me voy a morir.

-Sólo promete que tendrás una dieta mejor.

-Sí, lo prometo. Es que esas últimas semanas me tenían muy estresado y no tenía apetito.

-Bueno, ahora ya no tienes excusa-se acerca a él con la nena en brazos, a quien Black tomó y besó su cabeza.

-¿Tú qué opinas, princesa? ¿Papi es un exagerado? Sí, lo es.

Vegeta rueda los ojos.

-Mejor entretenla un rato. Quiero dormir un poco antes de que vengan Trunks y los demás.

Pelear Por Tu Amor 《Black×Vegeta》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora