Capítulo XXXIX

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Luego de cenar, Vegeta y Black ya estaban yendo a casa con su bebé.

Bardock se ofreció a llevarlos para que no tuvieran que ir con la bebé en la motocicleta.

—Gracias, nos vemos mañana, papá.

—Sí, adiós, hijos.

—Gracias y hasta mañana, señor Bardock.

Vio que ambos entraron a casa y luego arrancó hacia su hogar.

Vegeta tenía en su hombro el bolso y Black llevaba a su hija dormida en sus brazos. Fueron hasta la habitación, en donde dejaron a la pequeña en el medio de la cama.

Con cuidado salieron de la habitación y se dirigieron hacia la sala de estar.

Estaban hablando sentados en el sofá, Tarble se les unió después, saliendo de su habitación, cuando ellos llegaron, él estaba dándose una ducha.

—¿Y ya tienen sus invitaciones?—Pregunta a la pareja.

—Aún las están haciendo, luego llegarán y las repartiremos—Mira a su hermano.

—Hasta que al fin se termina todo, ¿no? ¿Cómo se sienten?

—Es... no sé, raro, porque no volveremos a la escuela—Confiesa Black.

—Nunca creí que diría esto pero... es probable que la extrañe.

—Yo por ahora no puedo decir eso, ja, ja—Tarble no odiaba la escuela, pero le era estresante muchas veces—Ustedes deberían disfrutar sus últimos días.

—Lo haremos, ¿Verdad?

—Sí, planeabamos ir a algún balneario un día entero entre todo nuestro curso.

—No querrán ir a las aguas termales, ¿o sí?—Pregunta sonriendo de lado.

—No, no, eso será en otra ocasión, pero a solas—Dice Vegeta mirando a Black, quien se sonrojó por lo que insinuaba el castaño frente a su cuñado.

—Bueno, la bebé puede quedarse conmigo y con Raditz, somos los tíos solterones—Responde con normalidad.

—Hey, no consideren ideas así, que yo no he aceptado absolutamente nada—Reclama Black, un poco avergonzado.

—Por favor, Black, ya deberías tenerme la suficiente confianza, además yo no soy nada tonto.

—No digo que lo seas, pero Vegeta a veces habla demás—dijo lo último entredientes.

—No he dicho nada fuera de lugar y Tarble no habla, no te preocupes.

—¿Hey, dijiste que querías quedarte con Raditz? ¿o fue mi imaginación?—Pregunta sonriendo a su cuñado, quien se sonroja un poco. Vegeta tan sólo se rió, pues Black ya se había guardado hacer algún comentario respecto a esa extraña amistad que tenían.

—Para que me ayude con la bebé, tampoco pienses mal.

—¿Seguro que sólo por eso?

—Si te preocupa, no, no me le voy a tirar encima.

—Yo no dije eso—Dice sonriendo, mostrando sus dientes.

—Lo insinúas.

—Si esperas un poco más podrías lograr que ese grandullón se fije en ti. Parece enamorado de sus libros, pero a ti te gusta eso, ¿no?

—¿Tú crees?—Pregunta con interés.

—¿Ves que sí quieres?

Tarble sólo rueda los ojos. Bueno, ya daba igual, Black se había dado cuenta que tenía sentimientos hacia su hermano mayor.

Pelear Por Tu Amor 《Black×Vegeta》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora