Entre ayer y hoy (Satoru Gojo x Lectora / Kento Nanami x Lectora)

Recuerdos

Ayame se recostó en su cama, su mente zambulléndose en un torbellino de pensamientos. La conversación con Gojo seguía resonando en su cabeza. Aunque había tratado de mantener la compostura en ese momento, la noticia sobre Suguru había dejado un nudo de preocupación en su estómago. 

— Suguru... ya no está con nosotros — las palabras de Gojo seguían retumbando en sus oídos

La preocupación comenzó a crecer en Ayame, y no podía evitar preguntarse qué habría podido sucederle a uno de sus mejores amigos de secundaria. 

En su mente, un recuerdo vívido comenzó a tomar forma. El día que conoció a Suguru. 

Era uno de los primeros días de Ayame en Jujutsu High, ella estaba en primer año y solía quedarse a entrenar en la escuela todo el día, muchas veces sentía que las expectativas de su clan la habían llevado al límite. Se encontraba en el patio, agotada y frustrada, mientras practicaba su técnica una y otra vez, sin éxito. 

Fue en ese momento cuando un chico de segundo año, se acercó junto a su amigo de pelo blanco. 

— Eres la chica nueva de primer año,  ¿verdad? — preguntó con una sonrisa amigable, sosteniendo una botella de agua en una mano.

Ayame levantó la mirada, sorprendida por la repentina aparición de alguien que parecía tan amable. Asintió, todavía tratando de recuperar el aliento.

— Sí, soy Ayame Zenin — respondió, un tanto asombrada por la amabilidad del estudiante. 

El chico de pelo blanco se encontraba detrás de su amigo, pero parecía más interesado en observar a distancia que en interactuar directamente.

— Soy Suguru Geto, de segundo año — dijo él, extendiendo la botella de agua hacia ella. — Y ese es Satoru Gojo, aunque es posible que ya lo sepas. Siempre está causando revuelo por aquí.

Ayame tomó la botella de agua con gratitud, dando un pequeño sorbo para aliviar su sed, luego decidió jugar un poco con la situación y levantó una ceja con fingida sorpresa.

— ¿Satoru Gojo? Jamás escuché ese nombre — dijo con tono inocente, aunque su mirada se encontraba fija en el chico de pelo blanco. Claro que había escuchado de Gojo, todos en el mundo de la hechicería habían escuchado de él, y todos sabían que Gojo tenía una reputación por ser algo narcisista. 

Gojo, que hasta ese momento no había estado prestando atención, no pudo evitar soltar una risa suave ante la respuesta de Ayame. Se acercó un poco más, como si quisiera asegurarse de que sus palabras llegaran claramente.

— Oh, vamos niña, no hace falta que finjas —  dijo con un tono juguetón. — Soy como una celebridad aquí. — Sus ojos chispearon con diversión mientras se apoyaba despreocupadamente contra una pared cercana.

Suguru soltó una risa suave, como si estuviera acostumbrado a estas respuestas por parte de su amigo.

— Satoru, no sé si eres una celebridad, pero definitivamente eres alguien a quien no se puede ignorar. — comentó Suguru con una sonrisa irónica.

La respuesta de Suguru provocó otra risa por parte de Gojo, quien parecía disfrutar de la dinámica entre ellos.

Ayame frunció el ceño, ligeramente incómoda por la situación. 

— La verdad es que no tenía idea de quién eras — respondió ella con un toque de sarcasmo, su tono desafiante. 

— Oh, eso duele — bromeó Gojo, fingiendo una expresión de herida en su corazón. — Creo que es hora de que nos vayamos, Suguru, no quiero seguir siendo ignorado.